17. Una noticia inesperada.

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🌸CAPÍTULO XVI 🌸

Emilia

Todos en el Trou Rouge están en alerta, las alarmas suenan incansablemente y de repente soy llevada a mi celda por una de las seguidoras de Debra. Allí Debra llega, me mira enfadada y luego me da una abofeteada que en verdad no me duele porque no concibo la idea que Isabela haya sido secuestrada delante de mis narices por el imbécil de Jacob.

— ¡Tú debes saber a dónde se llevó a esa puta!

— ¡¿Crees que tengo cara de saberlo?!

En parte es bueno que el tipo se la haya llevado, pero en parte no lo es porque parece que está obsesionado con ella; no me gusta pensar que Isabela estaría más segura aquí en el prostíbulo que a donde sea que estuviera. Nunca había pensado como sería mi vida si por lo menos no tuviera a Izzie conmigo, ahora si siento que estoy jodida.

Salgo de mi decepción conmigo misma porque para qué quiero ser lo que me dicen que soy si no puedo salvar a Izzie de una bestia sacada del infierno. Pero mi miedo no alcanza ahí, mi miedo se torna en algo más cuando las sirvientes de Debra llegan a revisar por toda la celda hasta remover los colchones, hasta encontrar la caja que me había dado Kaien como nuestra de su afecto.

Las cosas son difíciles cuando Debra pide que la sirvienta le entregue la caja y antes de que termine en sus manos protesto, pero siendo inútil porque de pronto hay dos mujeres alejándome de Debra.

— ¡No toques mis cosas! —Le digo enfadada: —Es un regalo de Kaien y no le gustará saber que lo tomaste sin mi permiso.

Debra me mira muy enfadada y abre la caja, no hay mas que el collar en forma de corazón y las pashminas.

Solo espero que Izzie haya escondido bien el teléfono pero mis esperanzas se esfuman cuando una sirviente saca del baño el aparato que Kaien me regaló.

Si antes había notado a la mujer furiosa ahora sí estaba llena de pura ira infernal cuando decide dejar caer al piso el teléfono inteligente y en ese mismo lapso de tiempo se permite a si misma quebrarlo con el tacón de su zapato dejándolo listo para tirar en la basura.

— No voy a tolerar que nadie incluyéndote a ti me dañen mis planes para el futuro. — Dice enfadada jalando mis cabellos con furia.

—Es un regalo de Kaien. —Le insisto y de pronto tengo otra vez el trato de ser abofeteada por ella.

—Vas a tener tu castigo aprenderás a que conmigo no se juega. —Ella me arrastra por todo el lugar haciendo uso de su fuerza: — ¿Creíste que no pasaría nada? ¿Creíste que no iba a ser nada?

Amanda me mira a mitad del camino e intenta interponerse, pero de repente hace la señal de la cruz católica y sigue su camino.

Justo cuando trato de liberarme Debra se detiene en una habitación cuya puerta dice: "las lecciones de Debra", cuando abre la puerta ella me mira muy iracunda.

— ¡Te equivocaste y muy feo, Emilia!

Ella me lanza adentro y yo caigo es una pequeña habitación de dos por dos, todo aquí es iluminado por una lámpara de neón y lo próximo que puedo escuchar es a Debra cerrar la puerta con llave. Grito tras las puertas y mis palabras no son escuchadas, lo que si alcanzo a percibir son las risas de las tres chicas que habían intentado hacer Bullying conmigo al principio.

—Suerte con la habitación de los castigos. —Dice la una.

—Prefiero mil veces morir que estar allí encerrada. —Dice la otra.

SERIE RAZAS ANTIGUAS I: La Promesa del Rey Oscuro. *FINALIZADA*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora