La Evidencia En El Libro © [Wattys2018 Y PremiosWattolimpicos2018]

🌿Sesenta Y Nueve

Capítulo dedicado a:
                                      user74395897

Cuando por fin lograron llegar al otro extremo del conducto,  Alice pudo mirar una carretera,  trataba de brincar desde ahí,  pero el pánico la invadía,  entonces tuvo que hacerlo por el bien de ambos,  se aventó y cayó sobre el poco pasto que rodeaba la cabaña,  seguida de ella ayudó a Martín a bajar,  pues él estaba herido y no podía caminar ni hacer muchas cosas a la perfección.

Caminaron lo más rápido que pudieron en dirección contraria a la que se encontraba la cabaña,  pues finalmente buscaban alejarse al menos diez kilómetros de ese sitio,  aunque sería mucho recorrido que no aguantarían ni en una semana.

Después de haber caminado aproximadamente durante media hora,  cuando al fin ya estaban un poco lejos,  se sentaron sobre la tierra que rodeaba ese feo rumbo.

Alice sentía que Martín en cualquier momento dejaría de responder a sus movimientos, estaba muy pálido y de repente la mirada se desviaba como si quisiera desmayarse.

-Vamos,  Martín tu puedes continuar,  seguro en cualquier momento encontraremos un lugar en donde pasar. -Dijo Alice tratando de reanimarlo.

-No Alice,  ya no puedo seguir,  mis fuerzas no me dan para más. Sigue el camino tú. -Le dio su mochila. -Cuídala mucho,  porque en ella llevó mis evidencias. -Terminó de hablar y suspiró desanimado.

-Alice se sentó junto a él y le devolvió la mochila.-Si tus fuerzas ya no dan para más,  no te preocupes. -Tocó levemente su hombro. -Yo tampoco seguiré,  me quedaré aquí contigo,  estas herido y necesitas descansar,  creo que esa fue una parte que no comprendía.  Pero ahora que lo veo mejor creo que estando en tu lugar,  también preferiría descansar al menos una hora.

-Martín la miró directo a los ojos y tocó con suavidad su mejilla,  para terminar regalándole una sonrisa débilmente. -Te lo agradezco bastante.

Alice se acurrucó a su lado,  él solo la miraba,  el cielo se tornaba completamente oscuro y corrían mucho peligro estando al aire libre y en ese sitio tan inseguro,  más sin embargo no tenían a donde ir.