Amor, Pasion y Odio -Styles, Tomlinson y tu-

Cap. 19 Parte 2 "De nuevo"

"De nuevo…"

 

Parte 2

 

 

-Te amo más.- Susurré aún pegada a su boca.

-No, Yo más, mi cielo.- Tomó mi mano y me haló hacía el interior.- Vamos a ver quién es.- Caminamos por la estancia agarrados de la mano

Al abrir la puerta era de nuevo el camarero de la entrada. Me miró descaradamente y Louis lo notó y se tensó de inmediato. Me acerqué a su oído.

-Cielo...- Susurré tranquilizándolo.

-Vengo a retirar las cosas de la cama y el baño, señor.- Dijo el camarero sin quitarme la mirada pretensiosa de encima.

 

-No es necesario.- Dijo firmemente para luego mirarme.- Creo que las utilizaremos.- Musitó con picardía, por lo cual me sonrojé.

-¿Algo más?- Preguntó el joven rubio.

-¿Quieres comer algo?- Preguntó Lou y yo le sonreí mordiéndome el labio. Si no estuviera ese joven, me le hubiera lanzado encima.- Comida amor.- Aclaró rodando los ojos. Sonreí.

-Un poco lindo.

 

-Por favor suban lo que tenía encargado. Gracias.- Cerró la puerta sin esperar siquiera lo que dijera el joven. No importó sinceramente.- ¿Me extrañaste?- Preguntó mientras me abrazaba por la cintura y me pegaba más a él.

-Eso no se pregunta... Obvio sí, demasiado.- Caminaba de espaldas mientras Louis me acercaba hacía el sofá.

-No más que yo.- No pude contestarle porque capturó mi boca en un apasionado beso.

Tenía a Lou sobre mí. ¡Qué deliciosa sensación! Había extrañado todo de él. Sus manos recorrían de arriba a abajo mi cintura, mientras las mías lo acercaban más a mí y tocaban su espalda. Louis se percató de que aún llevaba el abrigo y comenzó a quitar los botones con afán. Al terminar, la expresión de su rostro me hizo sentir orgullosa.

-Ohhh Dios...- Su mirada viajaba por el escote de mi vestido y lo corto del mismo que dejaban ver parte de la sorpresita que le tenía preparada.- __________...- tragó saliva.- ¿A caso quieres matarme?

 

-¿Te gusta lo que ves?- Pregunté picara. Louis pasó de nuevo saliva.

-Me encanta. Pero no puedo esperar a verte desnuda en la cama.- Su mirada y esas palabras me hicieron sonrojarme.- ¿Aún te sonrojas?- Volvió a mostrar esa sonrisa que al parecer no se le había quitado desde que llegué. Asentí y me tapé el rostro con un cojín del sofá.- No te tapes linda. Déjame verte.- Me quité el cojín lentamente de la cara.- Estás hermosa.- Lo acerqué a mí y lo besé con más entrega.