Amor, Pasion y Odio -Styles, Tomlinson y tu-

Cap.15 Parte 2 "El amor todo lo cree, todo lo sufre y todo lo soporta"

"El amor todo lo cree, todo lo sufre y todo lo soporta."

Parte 2

-Vamos cariño, muévete.- Me tomó de la mano y me haló hacia adelante, sin darse cuenta que ahí estaba parado Louis, tropezando con él. Mis manos comenzaron a sudar, la mirada de Louis era completamente indescifrable. Por su parte Alex, se quedó quieto, y por el agarre que ejercía sobre mi mano, sentí que estaba temblando.- Ahhh.- Soltó un gritito demasiado femenino al ver a Louis parado en frente, con esa cara que tenía, realmente asustaba.- Yo, yo yo...-Comenzó a balbucear, para al final concluir.- ¡FUE ELLA LA QUE SE ME ACERCÓ! ¡ELLA ME BUSCÓ!- Alex cobarde, pensé. Si no lo tuviera agarrado de la mano, de seguro que ya estaría corriendo despavorido a buscar escondedero a peso.

-¡ALEX!- Exclamé. El me miró con cara de pánico y luego miró a Louis.

-Ahhh sí...- Tragó saliva.- Ella es mi amiga y no me alejaré.- Dijo con fingido coraje mirando directamente la cara de mi esposo.- Así que si quieres hacerme algo, no importa, porque esta vez estoy preparado.- Louis hizo una mueca, que debí asumir que se trataba de un intento de sonrisa.

-Hola.- Saludó Louis.- No te preocupes, ya sé quién eres.- Alex se relajó notablemente. Sabía que él no sería capaz de golpear ni a una mosca.- Ayer no fue la mejor manera de conocernos. Yo soy Louis Tomlinson, y...- se pasó una mano por su cabello desordenado.- siento mucho lo de ayer, de verdad, no estaba pensando claro... y yo... lo siento.- Le estiró su mano a Alex, que sin duda alguna la estrechó.

-No te preocupes,- dijo sonriente. Yo estaba perpleja... ¿Tan rápido lo perdonaba? ¿En serio? Creo que soy la única que valora su dignidad.- Entiendo que la imagen no era muy amena para un esposo, y cualquiera hubiera pensado mal.

-Sí.- Dijo Louis.- Pero no es excusa para haber actuado como un animal, en serio lo siento.- Se disculpó de nuevo. Por mi parte, sentía un torrente de emociones encontradas, por lo que prefería no mirarlo en absoluto. Al final Louis me habló.-__________ ¿podemos hablar?- Me quedé en silencio mirando hacia otro lado con tal de no encontrarme con sus ojos. Si él pensaba que sería tan flexible como Alex, estaba muy equivocado.- Por favor.- Dijo al ver que yo no respondía. Alex apretó mi mano instándome a contestar.

-No.- Dije certeramente y Alex me apretó aún más.- Suéltame Alex.- Dije furiosa. Volví a dirigirme a Louis.- No tengo nada que decir, y además ya todo está muy claro. Vamos Alex.- Traté de dar un paso esquivándolo, pero él fue rápido y me tomó del codo. Lo miré a los ojos y estaban agolpados de lágrimas... "No, no y no... No iba a caer".

-Por favor.- Musitó con rostro suplicante. Miré el brazo que me tenía agarrado y volví mi vista hacía él.

-Suéltame ya Louis.- Nos quedamos así, mirándonos a los ojos. Alex se había adelantado dándonos nuestro espacio. Cosa que para mí no era necesaria. Al final Louis accedió y soltó mi brazo.

-Amor, por favor... Solo un minuto... Por favor.- Comencé a caminar hacia el carro de Alex.- Escúchame, por favor.- Se adelantó y se puso en mi camino, no dejándome avanzar.

-Mira.- Tomé una bocanada de aire.- Quítate ¿Sí? Estoy muy cansada y no quiero hablar lo que ya hablamos.- ¿De a donde saqué la fortaleza para decirle eso y no llorar? No lo sé. Pero su cara me estaba destruyendo lentamente, se veía tan mal, que ni siquiera de las pocas veces que lo he visto enfermo se veía así. Estaba tan pálido, pero sin evitarlo miré que se veía hermoso, con esa camisa y ese pantalón, típica ropa que usaba el fin de semana, pero que a mí me encantaba.- Ahora déjame pasar.- Louis comenzó a llorar con desespero.

-¿No lo entiendes? Necesito hablar contigo... Por favor.- Me tomó suavemente por los hombros y esta vez no puse resistencia.- Amor, escúchame... En verdad lo siento. No puedo, ni quiero estar mal contigo. Yo te amo- Mis malditos ojos traidores por la cercanía se desviaron a sus labios, que a pesar de estar resecos, seguían siendo tan apetecibles. Él lo notó y poco a poco se fue acercando. No podía alejarme, ni siquiera podía respirar. A pesar de todo quería que me besara, lo extrañaba demasiado. En un instante sentí sus labios sobre los míos, tibios y dulces, regalándome un beso lleno de ternura, y aunque traté de resistirme, le correspondí. Louis fue bajando sus manos hasta ponerlas en mi cintura acercándome más a su cuerpo. Solo él sabía hacerme temblar con un beso, solo él podía hacerme sentir así.

Al final puse mis manos sobre su pecho y lo alejé abruptamente.

-No puedes andar besándome cuando se te dé la gana.- Lo hice a un lado y comencé a caminar rápido, rápidamente se me acercó.

-Mi vida... Escúchame... Por favor.- Cada vez se agitaba más y más.- Si quieres me pongo de rodillas, lo que tú quieras, pero escúchame.

-¡NO! ¡NO MÁS! ¡DÉJAME EN PAZ!- Grité visiblemente afectada y llorando. Comencé a correr hacía el carro. Cuando llegué Alex estaba ahí con una sonrisa pero al verme se esfumó.- Vamos Alex, arranca.- Le dije prácticamente en un susurro. Louis llegó y se acercó a la ventana.

-Linda, por favor.

-Alex, ¡por favor arranca!- Subí el tono de mi voz. Alex se quedó mirando a Louis.

-Lo siento.- Le dijo al final y puso el carro en marcha. Después de 2 minutos de viaje, puse mi cara entre mis manos y lloré más y más fuerte.- Estas siendo muy dura con él.- Dijo Alex después de un rato.- Y también contigo __________.- No era ese tono alegre que siempre tenía, por primera vez estaba serio.

-¿Y ahora todo es culpa mía?- Lo miré y él siguió con la vista pegada en el camino.- Tú no entiendes.

-¡NO! Entiendo muy bien... _________, él está muy arrepentido, y está tratando de arreglar las cosas, pero tú no le ayudas ni un poquito.- Elevó el tono de la voz.

-¿Crees que no me duele? Yo no cometí ningún error, y todo lo que yo tenía se acabó.- Estaba frustrada. Era tan difícil ver que ni siquiera mi mejor amigo me entendía.

-Ahora estas cometiendo el error.- Dijo severamente.- Tu misma te estas encargando de romper con su matrimonio, en vez de enmendarlo... ¿Es que no ves cómo esta él _______? Se ve que ni siquiera ha comido, que se la ha pasado llorando, se ve tan desesperado, ¡hasta esta peor que tú! Pero él está solo, te necesita.- No respondí nada, solo me limité a mirar por la ventana y seguir llorando. Después de un rato Alex continúo.- El amor todo lo cree, todo lo sufre y todo lo soporta.

Cuando llegamos a mi casa, antes de bajarme del coche. Alex me agarró la mano y me estrechó contra su pecho abrazándome. Me quedé un segundo más llorando ahí mientras él me abrazaba y acariciaba mi pelo.

-Shhh, ya cariño. Siento haber sido tan duro... Shhh no llores más.- Me apretaba más contra sí, y yo me aferraba más a él.- Alguien tiene que hacerte entrar en razón... Estas dolida, lo sé...- Me despegué un poco de él.

-Siento que me estoy muriendo.- Parecía una niña pequeña llorando, dándole quejas a su padre.- Pero no quiero que me vuelva a hacer daño.

-Entiendo.- Nos quedamos en silencio.

-Voy a entrar, necesito descansar. Ya estos son los dos últimos turnos que hacemos de noche.- Sonreí levemente y Alex quitó las lágrimas de mis mejillas.

-Ve tranquila, pequeña. Te quiero mucho. Paso a recogerte a la misma hora de ayer ¿Vale?- Acunó mi cara entre sus manos y me dio un beso en la frente.

-Vale.- Me baje del auto y caminé hacía la casa.