“Traición”
Parte 3
Al final el miércoles me decidí por volver ante la insistencia de Phoebe que era la única que sabía la verdad, pero el resto de las mujeres Tommo no eran tontas y lo sospechaban todo, así que me echaron del que fue mi primer hogar.
Fueron días largos y oscuros, en los que me sentaba simplemente a pensar en el patio, con la maraña de pensamientos y culpa en el corazón. Por más que me lavaba no me sentía limpio. Por más que buscara salidas no había absolutamente nada para escapar. Tenía tanto rencor almacenado contra Eleonor, que estaba casi envenenado por la ira.
No sabía nada de ________, porque ni siquiera podía llamarla y Phoebe se había negado a llamarla por mí, y si se lo pedía a mi madre, ella sospecharía y todo se complicaría más. Y si la llamaba yo ¿qué le diría? ¿Qué era la peor porquería de todas? ¿Qué me perdonara por traicionarla?
Estaba roto y abrumado, completamente temeroso para cuando arribé a Londres
Llegué a casa asustado, aún no podía creer lo que había hecho. ¿Cómo la miraría a los ojos sabiendo que la engañé? No quería, no lo quise jamás, pero pasó y ahora tendría que llevar esa cruz por mi falta de control.
Abrí la puerta mientras la realidad me noqueaba, la culpa fue más grande al mismo instante en que pisé nuestro lugar. Quizás había destruido mi matrimonio, y la idea me mataba en vida. Si _________ no me perdonaba, moriría. Si todo lo que teníamos se acababa por una noche de licor y una enorme laguna mental, no lo soportaría. El maldito pasado tuvo que volver. No me controlé y tendría que pagar las consecuencias. Le había sido infiel al amor de mi vida, a mi esposa y no había marcha atrás.
No estábamos en el mejor momento, de hecho, era la peor crisis que habíamos tenido. Cuando me fui a Doncaster habíamos discutido, estaba muy enojado por sus mentiras, le había hecho daño, pero nada había cambiado, la seguía amando como nunca. Por más enojo no era causa para haber hecho lo que hice. Y no sabía qué hacer, no sabía qué esperarme, ni siquiera sabía cómo iba a mirarla a los ojos.
Para Eleonor no había sido suficiente destruir mi vida una vez, sino que tuvo que volver e intentarlo otra vez. Solo esperaba que ___________ me perdonara y todo siguiera igual.
Di dos pasos adentrándome a la tenue luz de la sala de estar. Ahí estaba ella. Sentada con las piernas cruzadas y la vista pegada en un libro. Tan inocente de lo que yo había hecho, tan hermosa… A pesar de los errores que ella había cometido, no merecía algo así. Levantó el rostro y me sonrió tímidamente.
-Hola, Louis.- Sus ojos llenos de sentimientos me recibieron, mientras yo me sentía sucio solo por el hecho de estar frente a ella, por lo que le había hecho. Mi hermosa…
-Hola, _________- Le sostuve la mirada mientras ella se ponía de pie. Apreté la manija de la maleta al ver que se acercaba a mí. Instintivamente di un paso atrás y ella se frenó incómoda.
-¿Qué tal tu viaje?- Tragué saliva.
-Estuvo… bien.- No es cierto, mi amor. No estuvo bien, nada de lo que hice lo estuvo. Si tan solo no hubiéramos discutido, si tan solo me hubieses acompañado, todo estaría bien. Cometí el error más grande del mundo y no quiero perderte.- Estoy cansado.- Balbuceé.- Voy… voy a darme una ducha.- Se pasó las manos por su despeinado cabello, suspiró y asintió.
-OK… ¿Quieres algo?- Te quiero a ti, quiero dejar de ser un cobarde y quiero que me perdones.- ¿Traes hambre, lindo?- Ahora ella me hablaba de esa manera que me derretía el corazón… Me amaba, a pesar de todos mis errores, y yo le había pagado mal. Necesitaba salir de allí. Negué.
-Estoy bien. Gracias, __________.- Me miró con sus ojos tristes.
-OK.- Me dio la espalda y se dirigió de nuevo a un sillón que no reconocí.
Subí las escaleras y corrí a la habitación. Solté la maleta y me metí a la ducha. ¿Qué había hecho y por qué la seguía cagando aún más? El agua fría me castigaba, me despertaba de esta enorme pesadilla en la que me había metido. Mi esposa no tenía la culpa, y yo la trataba con distancia cuando ella estaba intentando arreglar todo. Pero, ¿cómo arreglar la mierda que cree? ¿Qué pasa si esta es la última estocada y acaba con nuestro matrimonio? ¿Qué será de mí sin ella?
-No… no… no…- Me repetía. No podía perderla, simplemente no podía.
No aguanté más y salí de la ducha. Necesitaba algo de alcohol, algo fuerte y que me hiciera olvidar lo estúpido y cretino que era. Busqué un pantalón de pijama, calzoncillos y me vestí. Ella no había subido y así era mejor. Me encerré en mi despacho y comencé a beber como un loco. Todas las veces que sentí perderla… Ninguna, nunca estuvo tan cerca a sentir el dolor y la desesperación que sentía en ese momento. Algo me decía que si ella se enteraba, este sería el fin.
El licor me quemaba la garganta y los ojos me ardían. Sollocé como un niño, como cuando rompí la vajilla favorita de mi madre con mi balón de futbol y ella no quería perdonarme… Pero nada era comparado con el hueco en el pecho que sentía en ese momento. La había cagado. Si me dejaba estaba en su justo derecho, si no me perdonaba lo entendería porque lo merecía.
No sé cuánto tiempo estuve así, copa en mano y lágrima suelta. ¿Cómo había sido capaz de acostarme con Eleonor sin vomitar? ¿Por qué no podía recordar esa noche? ¿Por qué me pasaba esto y justo cuando era feliz después de tantos años y ella aparecía a dañarlo todo? Alguien llamó a la puerta y me sentí más débil. Solo podía ser __________.
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Amor, Pasion y Odio -Styles, Tomlinson y tu-
FanfictionInfiel La vida en un matrimonio es monótona... Siempre lo mismo, después de un tiempo siempre es lo mismo. Todos los dÃas, casa, trabajo, cena en silencio, cama. Cuando me case con Louis nunca pensé que serÃa asÃ. Que él se convirtiera en alg...