This can't be true

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Otra canción a la playlist de Spotify "Tom & the pencil✍"  🎶☝
Incluso pienso cambiar el nombre de la fic por "Playlist" 😂 Jk.

Las cosas entre Jack y yo habían cambiado mucho, si caminábamos juntos, nos tomábamos de la mano, a veces nos besábamos en la escuela, en mi casa viendo alguna película o en el parque, me gustaba estar así, aún no éramos novios porque siempre me decía que quería pedirmelo de una manera muy romántica, "algo que yo mereciera"; de repente un día, me encontré pensando en Jack y olvidando a Tom, no me sentí bien, pero después de cuatro meses contando en los que se fue por primera vez, creí que era justo intentar ser feliz sin depender de Tom, nunca fuimos nada, nunca pude gritar que lo amaba, nunca me dejó.

-Hola, hermosa.- Jack besó cortamente mis labios para después mostrarme su gran sonrisa.- Te tengo una noticia.

-¿Qué pasa, Jack?- Cerré la laptop que tenía frente a mí para prestarle atención.

-Estuve hablando con el maestro Porter.- Se sentó frente a mí con un rastro de emoción.

-¿Mi maestro de anatomía? ¿Cómo es que lo conoces?- Recordemos que Jack es diseñador gráfico y es imposible que se toparan él y Porter.

-Es amigo de mis abuelos. Ese no es el punto, cariño. Me dijo que estaban llevando chicos que representen las carreras de esta universidad en el Bronx School of Science de New York... y me pidieron que fuera a exponer Diseño gráfico, referente al proyecto sobre el calentamiento global.

-Eso es genial, Jacky.- No sabía si estaba emocionada o no, no quería volver a vivir el estar lejos de alguien que quiero, más que un afecto fraternal.

-Dejame terminar. Me dijo, que le encantaría que fueras tú por Biología.

-¿Qué! No tienes nada que ver en esto, ¿cierto?- Mi emoción había aumentado de diez a mil.

-No, creo que tú te haz hecho mucho mérito con el Sr. Porter. Me habló maravillas de ti, aunque no tenía que decir nada, sé que eres maravillosa.- El color de mis mejillas se volvió aún más rojo.- Entonces, yo salgo en dos días, ¿Qué dices, vienes?- Tomó mis manos sobre la mesa.

-No sé, Jack, es algo que no estaba en mis planes. No me puedo ir así sin mas. Aunque me encantaría llevar a los chicos el interés por la biología.

-Claro que puedes, si lo quieres. Atreve a hacer algo nuevo. Vamos, por favor.- Tomó mis manos mientras esperaba una respuesta, me sonrió ampliamente, sin pensarlo y casi en automático, le contesté.

-Está bien. Vamos a New York.- Jack gritó victorioso, besó mi mejilla y salió corriendo de mi lado, seguro iba a avisarle a Porter que acepté.

Tomé mis cosas para salir e ir a casa a contarle a mi padre que supongo, sería el más feliz con lo que iba a hacer, estaba convencido que debía vivir la vida al máximo y apartarme un poco de las hojas blancas y los lápices de grafito. Estacioné el coche que mi padre me prestaba para ir a la escuela y entré, como siempre, Kerch se aventó a mí para que le acariciara, movía su cola y lamía mi mano. Cómo amaba a ese perrito, fui al estudio de mi padre para contarle las buenas noticias.

-Hola.- Entré por aquella doble puerta para ver a mi padre editando en la computadora.

-Hola.- Me regaló una sonrisa mientras se quitaba los lentes.- ¿Cómo te fue, cariño?- Se acercó a mí y me abrazó para después volver a la computadora.

-Bastante bien, de hecho, te tengo noticias.- Volvió a poner toda su atención en mí.- El maestro Porter, bueno de hecho me lo dijo Jack, él quiere que vaya a Bronx para promover mi carrera.

CasualidadesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora