Happy

3.1K 206 59
                                    

"Estado de grata satisfacción espiritual y física. Persona, situación, objeto o conjunto de ellos que contribuyen a hacer feliz. Ausencia de inconvenientes o tropiezos." 

Y con eso se podía decir que en mi vida, en este mismo instante, había mucha felicidad, estaba satisfecha con lo que lograba en la universidad, me sentía tranquila, tenía a esa persona que me hacía feliz y no teníamos inconveniente alguno para querernos.

Me gustaba hacer reír y sonreír a Jack, era una manera de expresarme que, si no feliz, estaba contento conmigo; yo, en cambio, me sentía completa en todas las formas posibles, había dejado a Tom de lado y de alguna manera se sentía muy bien.
El frío que venía casi terminando el otoño era mi favorito, se sentía ligero, un aire fresco, las hojas de los árboles tiradas en el piso tiñendolo de café, amarillo y naranja.

-Un mes con Jack...- Lizzy iba caminando a un lado mío mientras íbamos a clase de botánica.- No creí que duraran tanto y más por lo de ya sabes... Tu eterno amor.

-Tom y yo somos amigos, así quedamos.- Entré al salón y dejé mis cosas a un lado de mi asiento.

-Lo gracioso es que ahora sí contesta tus mensajes. Sólo necesitabas dejarlo de querer.- Se rió entre dientes, esperó una risa de mi parte pero al ver que no emití sonido alguno, siguió sacando sus libretas.- Me callaré...

-Gracias.- Le sonreí, lo que hizo reír a Haz. 

-No te vuelvo a traer, Harrison.

-Oye, que seas su novia no te da el derecho de regañar a mí hermano. No te preocupes Haz, puedes venir todos los días si gustas.- Triunfante, Haz sonrió escondiendo sus ojos azules entre las arrugas de sus ojos y su fina y blanca tez.

-Los odio a los dos.- Le volvimos a sonreír haciendo que soltara una risa y rodará los ojos.

Después de nuestra clase de botánica, los tres acordamos de ir a ver a Jack en su estudio, ya casi era hora de hacer entrega de trabajos finales y  Jack, el perfeccionista, se desaparecía por estas fechas.

Subimos hasta el ático de su casa el cuál era como un pequeño estudio para sus proyectos, tenía la vista fija en la pantalla mientras su ceño estaba fruncido, su boca se movía con insistencia, siempre hablaba en voz baja mientras estaba haciendo algo importante para él, su cabello, ahora un poco largo, estaba revuelto y aplastado por los audífonos de diadema que traía puestos y como era de costumbre, tenía los pies arriba de la silla. Suspire y lo abracé por detrás haciendo que diera un brinquito, quitó los audífonos de sus orejas y me miró y sonrío, tomó una de mis manos y la besó. Como lo quiero...

-Tengo al novio más trabajador del mundo.- Le di un largo beso en la mejilla.

-Yo sé quien es más trabajador que Jack.- Lizzy, cantó el nombre de Jack y se paseó por la habitación mientras me miraba. Haz y yo le lanzamos la mirada "ya cállate o te mato" que habíamos practicado muy bien anteriormente con Tessa y ahora con ella.  Jack se limitó a mirarla como siempre, sin entender lo que dice.

-Obviamente, Haz.- Abrazó a mi mejor amigo del cuello mientras le sonreía. Harrison le sonrió hasta que Jack rió y volvió a lo suyo para abrir los enormes ojos azules lo más que podía.

-Bueno chicos, Lizzy y yo tenemos que irnos. Los dejamos.- Haz llevaba a Lizzy tomada de la cintura mientras se cuchicheaban algo, por sus gestos, seguro Harrison la iba regañando. Me reí y volví a ver a Jack.

Era una persona tan apasionada en lo que le gustaba hacer, me senté en un puff que tenía a un lado de su escritorio y sólo lo miré, lo miré hasta que dejó de mirar la pantalla y me devolvió la mirada, me sonrió y peinó su cabello hacía atrás con ambas manos mientras se recargaba en el respaldo de la silla y bajaba sus pies descalzos al piso tibio de madera, suspiró y talló sus ojos.

CasualidadesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora