Hold me

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NOTA: No les aparezca el vídeo de la canción, me encantaría que me lo dijeran, por favor.  LOS AMO. 💓 Capitulo corto.

Asomé mi cabeza para ver a Tom arreglar una maleta muy pequeña, iba de un lado a otro de su habitación buscando sus cosas, llevaba puesta una pijama de cuadros y una playera lisa blanca, tenia el cabello alborotado y se rascaba la cabeza, no sabía porque pero todo lo que hacia Tom me causaba ternura, sus ojos, sus gestos, sus movimientos e incluso su voz y su manera de hablar. Parecía que no se había percatado de mi presencia, incluso aún cuando toqué la puerta.

-¿Ya encontraste lo que buscabas?- Dio un pequeño brinco cuando escuchó mi voz. Soltó una pequeña risa, una muy tierna...

-No, no encuentro mis lentes para leer.- Volvió a rascar su cabeza y dejó caer su mano chocando con su pierna.

-¿Son negros, un poco cuadrados y con armazón grueso?

-¡Sí¡ ¿Dónde están? - Miró por toda la habitación buscando con la mirada mientras yo reía.- ¿De qué te ríes?- Me sonreía divertido.

-Los tienes en el cuello de la playera.- Soltó otra pequeña risa acompañada de otra pequeña sonrisa... Qué tierno.

No sabia exactamente que era lo que estaba haciendo allí, la verdad es que sí me dolía el haber terminado con Jack, me dolía que ya no podía hablarle como antes, tal vez estaba allí parada porque es dónde siempre quise estar, con él.

-Gracias.- Quitó los lentes de su playera y los puso en un estuche para meterlos a la maleta.

-¿Te vas?.- Me senté en la silla de su escritorio mientras lo veía arreglar su pasaporte ya muy usado.

-Sí, sólo serán tres días, sólo grabaré una escena, estaré aquí para año nuevo.

Sus palabras parecían darme esperanza, sabía que él aún sentía algo por mí al igual que yo por él, pero la distancia y su trabajo eran lo que me hacían retroceder los pasos que ya había dado para llegar hasta acá.

-Y dime.- Se sentó en su cama mientras peinaba su cabello con sus dedos y me moraba con esos ojos de cachorro.- ¿Qué te trae por acá?

-Ah. Nada estaba... Aburrida.- Sabía que no sabía mentir bien pero Tom creía lo que decía, a veces.

-¿Se acabaron los libros buenos?- Me sonreía, me estaba torturando.

-Algo así...

-¿Ya arreglaste las cosas con Jack?.-. Mis manos comenzaron a sudar, mi corazón se aceleró y me puse nerviosa, la verdad es que no sabia que hacía allí y Tom tampoco, para él, sigo teniendo novio.

-Sí.- En cierto modo era cierto, pero no quería decirle que ya había terminado con él, era demasiado pronto.- Él entendió. 

-Me alegro, ustedes se ven muy bien juntos.

Su expresión había cambiado ligeramente, la pequeña sonrisa que me mostraba se borró, se levantó de su cama y siguió arreglando su maleta. Me dieron unas ganas inmensas de abrazarle y decirle que lo quería, lo único que quería era abrazarlo muy fuerte y decirle que lo amaba pero no sabía si era del todo cierto, en su momento me hizo mucho daño aún si este no fue intencional, aún si en su momento no lo pensó. Tom me había mostrado el dolor y el amor al mismo tiempo y por eso lo quería y no a la vez; en cierto modo le estaba dando un cucharada de su propio chocolate, no lo hacia a propósito, pero sabía que el sentía lo que yo sentí y en el fondo me sentía bien por eso.

CasualidadesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora