Casualidades

Baby, It's cold inside

El 25 de Diciembre se supone que es un día para dar amor y recibir, ni los regalos, ni las luces, ni el árbol, el amor era lo importante, para mí siempre fue el amor el protagonista en esto, recuerdo pasar todos los años las doce para recordarle a mi familia y amigos cuanto los amaba y quería, el amor era mi protagonista y el amor en sí era el que me confundía y no la estaba pasando bien...

-Papá, ¿invitaste a los Osterfield?- Entré apurada al estudio de mi padre.

-Claro, no me dejaste olvidarlo. ¿Por qué estás tan ansiosa, ____?

- Ah bueno, no lo sé, porque mi novio y el chico que me gustaba estarán aquí, juntos y se conocen. Sin Haz, yo estaría muerta.

-No lo sabrías... Pero sí, Harrison y su familia son invitados de honor. La mesa ya está puesta, cuatro Osterfield, seis Holland, siete con Tessa, un Harries, una Plump y cuatro ______.

-Sólo somos tu y yo.

Sentí como cuatro brazos me envolvían por la espalda con fuerza y dos vices me gritaban "¡FELIZ NAVIDAD!", nunca había encontrado la voz de mis hermanos más dulce que hoy, jamás habíamos pasado este día separados.

-Chicos, ¿Qué hacen aquí?

-Yo juré que vendría todas las vacaciones a verte.- Habló mi hermano que tenía una linda sonrisa en el rostro.

-Sí, a mí y a Ellicia.- Lo abracé, el aroma de mi hermano siempre me pareció curioso.

-Yo vine por Harry.- Tessa me sonrió antes de abrazarme, me dio gracia lo que dijo al igual que a papá.

-Bueno chicos, como sé que no se quedaran mucho por aquí... Iré a ver a Harrison.- Caminé hacia la sala seguida de mis dos hermanos.

-No, no, no, tú me hablarás todo lo que no sé de lo que ha pasado aquí, necesito respuestas.- Tessa me tenía de un brazo.

-Yo voy a ver a Elle.- David desapareció de la sala junto con Kerch.

Tess no me dejó salir de casa hasta que le conté todo, pude resumir lo mas que pude y lo menos que tenía que saber Tessa para que no arruinara sin intenciones esta noche, trataba de no estresarme por tener a esos dos en mi casa, lo único que me tenia tranquila era tener a Harrison aquí.

-Me encanta la pulsera que te dio Jackson, es tan linda.

-Sí. Él es perfecto.- Sonreí, pero al parecer no fue sonrisa de enamoramiento.

-¿Por qué no lo dices feliz?

-Porque no sé si lo soy, antes de ayer mi vida había sido todo lo que había planeado, pero al parecer con Tom en mi vida nada sale igual de como lo planeo.

-¿Tom está aquí?

-Estará aquí. Viene a cenar con su familia.

-Mi padre no me dijo que Harry estaría aquí.- La cara de mi hermana fue la mejor cuando escuchó aquello.- Bueno, entonces le daré una sorpresa, el punto es que, que pasó que no puedes ser feliz por su culpa.

-No es su culpa, es mía, ni siquiera me ha dado aires de querer algo más que mi amistad, ayer amaba a Jack más que a nada y hoy dudo que mi decisión haya sido la correcta, es estúpido que me haga sentir de esta manera.

-Tal vez debas hablar con él, es un buen día para poner en orden tus prioridades.

Después de charlar que era lo que tenia que hacer está noche mi hermana buscó algo en mi armario para la noche, consiguió un vestido gris con unos botines que nunca me había puesto, me sentía cómoda, era lindo traer algo que realmente me gustaba, pasé por mi tocador para ver ese labial rojo en él, lo tome y puse ligeros toques en mis labios.