La resaca de la fiesta de cumpleaños de Tony Stark le duró a Sharon, al menos, tres días. A pesar de que no tenía autorizado beber, se las había ingeniado para escapar de su perro guardián, es decir, Pepper. Además de haber encontrado un aliado, el tal coronel Rhodes, amigo íntimo de Stark, quien había fungido como tapadera y guía en asuntos masculinos, al menos por esa noche. Sharon se había encargado de sacarle información fingiendo que tenía pequeñas lagunas mentales. Juntos habían pasado una noche agradable, aunque no pudo evitar preguntarle si conocía a Steve, el coronel apenas le pudo decir que había oído de él, uno de los "mejores capitanes de SHIELD" dijo. Sharon había sonreído y querido saber en que estaba trabajando ahora, pero su fuente de información dijo no estar al tanto. La noche terminó en un cuarto de hotel, si tuvo sexo o no con las tres chicas que subieron con ellos a la habitación, no podía recordarlo.
Lo que Sharon no sabía era que Rhodes le había suministrado un sedante, a su vez, dado por el Dr. Strange, quien había sido disuadido por Pepper, la bella pelirroja a la que no podía negarle nada; y que su resaca, la que atribuyó a una noche fantástica de juerga (de la que no recordaba ni la mitad), había sido provocada por aquel medicamento.
—¿Qué es esto?
Días después, medianamente recuperada, mientras desayunaba en la cama, y entre las cosas que le habían subido, como el periódico (a pesar de que no lo leía todo, buscaba alguna nota de sociales que mencionara a Tony Stark), encontró un sobre dirigido a Tony. Le dio la vuelta entre los dedos, pero lo único que había en él era el nombre del destinatario escrito con caligrafía dorada. Estaba a punto de abrirlo cuando la puerta se abrió, Pepper entró y sin decirle nada le arrebató el sobre.
—¿Oye qué...?
—No es para ti. Fue un error dártelo.
—Dice mi nombre.
—Ese no es tu nombre, querida.
Sin más, Pepper salió de la habitación dejando a Sharon con un rosario de palabrotas en la punta de la lengua.
Más tarde, ese mismo sobre y Pepper entraron al taller de Tony en industrias Stark.
—Noticias de Bruce—dijo al dejarlo sobre la mesa cerca del brazo de Tony. Y luego, comenzó a leerle directamente de su Tablet, los pendientes de la empresa de los que requería su opinión, mientras caminaba en círculos detrás de él.
—¿Brucie? ¿No estaba en Helsinki? — Tony la interrumpió y arrastró el sobre hacia él.
—Sí, de hecho, quiere que vayas. Es una invitación para que des una conferencia.
—¿Qué? No puedo dar una conferencia.
—O en su defecto asistas a la suya como apoyo. Hablará de su investigación allá.
Tony abrió el sobre y revisó la nota, estaba membretada con el logo de la universidad. Era una invitación formal para que asistiera como invitado especial al congreso dónde Bruce daría una ponencia, más una pequeña nota de su amigo, pidiéndole asistir como soporte emocional.
—En otras circunstancias no sería problema—dijo Tony —. ¿Crees que pueda aplicar el mismo truco que en Japón?
Pepper se encogió de hombros y caminó hacia él, pisó algo que crujió bajo la suela de su zapatilla y bajó la vista. Luego, recogió una bolsa vacía de moras deshidratadas del suelo. Suspiró al incorporarse y miró a Tony reprobatoriamente.
—Tony, creo que tienes un problema con estás cosas.
—Tienes razón—le dijo Tony desde la mesa del taller, inclinado aún sobre la carta de Bruce y sólo volteando un poco para ver de que eran esas cosas.
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El inesperado despertar a tu lado
FanficTony tiene un accidente. Steve vive con un accidente. San Pedro es muy voluble. Y bueno, los pecados no siempre se pagan en el infierno. STONY Segunda portada por cielispeed (@Dianithaspeed) Tercera portada por @diaboros Cuarta portada por @Sever...