Vigésimo primero

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Shelsie está intensa sobre mi vida matrimonial, cree que es algo divertido, al contrario de Perrie que se siente incómoda con toda mi situación y no es la que lo vive.
Si supieran que el verdadero drama lo estoy viviendo aquí.
En este lugar sentadita, mientras mi corazón se acelera y siguen con los exámenes de mi abuelo.
Le pregunté a Rhett si tenía algún conocido que pudiera ayudarme a conseguir una cita médica pronto y me dió el número de un señor que al final me ayudó a llegar a este lugar.
La abuela no quiere que entre con ellos a la atención. Pero sé que necesito escuchar, ¿Quién es la que los va a apoyar?
-Mi niña, fíjate que somos dos adultos con canas y arrugar. En serio, te puedes quedar aquí tranquilita.
Ella cree que me va a convencer.
-Mire señora, yo no soy su chófer. Soy su nieta. Y hasta ahora la que está siendo adulta, esto es algo de los tres, porque así es, entraré y punto.
-Dios, es que me pregunto a quien saliste tan terca.
-Si se mira en un espejo tiene respuesta.
El abuelo nos ignora, cierra los ojos y suspira. Siempre está cansado, creo que es por que es tan viejo como las carreteras.
No sé.
Llaman el nombre del abuelo, y como el dicho "tres son multitud" así se siente la mujer que nos detiene la puerta mientras pasamos al consultorio. Tiene todo tan blanco y pulcro.
El doctor combina totalmente con el lugar, cabello blanco demasiado blanco para la edad que aparenta, pero lo luce orgulloso.
-Buenas tardes.-estrecha las manos de todos con amabilidad, me mantengo de pie, mientras mis abuelos se sientan uno junto al otro frente al doctor.-Señor Alonso, solicité que sus exámenes fueran entregados a mí con carácter urgente. Y gracias a muchas intervenciones... aquí los tengo.
El doctor abre la carpeta en sus manos y suspira, uno profundo y pensativo.
-Me gustaría me dijera que es lo que pasa, nadie nos dice nada. Solo veo los moretones que le parecen a mi abue en sus extremidades y no me dan respuesta.-digo con algo de desesperación.
-Señora de Gutierrez, entiendo. Y por favor de un amigo en común hago esto, quiero apoyar. Entiendo su desesperación.- se quita los lentes y masajea el puente de su nariz.- Señor Alonso, le hablaré claro y sin tapujos.
Mi abuelo asiente, así le gustan las cosas.
-Usted hable.-la seriedad en su voz solo me confirma que sabe lo que dirá el doctor.
-Usted tiene leucemia linfática crónica, lastimosamente por su edad y condición física no puede ingresar a tratamiento, sería muy agresivo...
Las próximas palabras que salen de su boca caen en un vacío que las degrada hasta volverlas susurros inentendibles.
Si mi corazón estaba en mi pecho, subió a mi garganta y ahí se quedó.
Siento como se me aprieta la vida entera.
Mi mente resucita al escuchar la voz de mi abuelo.
-Bueno, muchas gracias doctor. Que tenga buen día. Vamos, es hora de despedirse.-dice con su ronca voz.
Yo no puedo casi ni levantarme y él está tan calmado.


Llegamos a casa de una manera en que ni siquiera noto como sucede, no sé como no tuve un accidente de camino a casa.
La abuela se encierra en su habitación con el abuelo, entiendo. Quiere aprovechar que aún lo tiene a su lado.
Caigo en el sofá y me estremezco.
La puerta de enfrente se cierra de manera estrepitosa, Rhett y Scar se asoman juntos platicando bastante natural, parece que hicieron las pases.
Scar camina a mí, pero algo en mi rostro hace que se detenga.
-Hola Cami.-se limita a decir y se apresura a su habitación.  Solo asiento , no creo que las palabras me fluyan.
-Camila...-Rhett se sienta junto a mí.-Te ves horrible, ¿Qué sucede?
No sé que parte de mí me domina, pero imito su acción de anoche.
Con su rostro entre mis manos, hago que nuestros labios colisionen.
Él parece algo asustado por la decisión, pero no se detiene.
Y eso hace que encuentre lo que busco: compañía.

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Hola, no quise dejarlos sin cap hoy por eso le traigo esto. He tenido un mes de locos académicamente hablando, ya que tengo nuevos retos un poco más pesados y locos. Estar en ambos lados ha sido difícil. Pero quiero terminar esta historia y no quedaré tranquila hasta que ustedes lean eso.
Gracia por leer, xo

 

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