Weak Heart (KrisTao)

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“Decías que todo estaba bien...
Pero el mundo se te caía encima”

— Tienes que estar tranquilo. Si Tao te ve así se va a poner mal y... —Suho se quedó callado y miró el suelo, siendo incapaz de repetir lo que el doctor había dicho.

— ¿Y qué...?, ¿Y va a morir?

La voz de Yifan se quebró y comenzó a reír con amargura, mirando el suelo. Suho suspiró y tocó su hombro.

— En lugar de estar aquí afuera, debería estar con el... te necesita. —Yifan levantó la mirada y apretó los labios, su hermano continuó:— Sé que te duele, créeme, a mi también. Tao es demasiado importante para nosotros, pero, Yifan, no es su culpa.

— ¡¡Trató de ocultarlo!! —Gritó desesperado, las personas que iban pasando los voltearon a ver, pero a Yifan no le importó— ¡No iba a decirme lo que le pasaba!

— ¡¡No quería hacerte daño!! —Le devolvió el grito su hermano, y el frunció el ceño, molesto— ¡Y tú estás haciendo todo lo contrario, idiota!, lo estás lastimando.

Desvió la vista mientras negaba, Suho suspiró de nuevo.

— Ve con el —animó empujándolo levemente hacia la puerta del hospital— Pero antes, dame eso. —Le arrebató el cigarro que tenía en sus labios y su hermano gruñó molesto— Lo siento, hermano, pero ni a mi ni a Tao nos gusta verte fumar. Además, está prohibido dentro del hospital.

El menor volvió a bufar y comenzó a caminar al interior, para después entrar a la habitación el la que se encontraba Tao. Éste estaba dormido y Yixing sentado junto el, lo abrazaba, acariciando lentamente su cabello.

Siwon ya no estaba en la habitación.

Yixing, cuando miró a Yifan, rápidamente se levanto y le sonrió, después de darle un beso en la frente a Tao, se acercó— No seas duro con el —suplicó y comenzó a caminar hacia la puerta, para posteriormente, salir, dejándolos solos.

Se acercó lentamente y cuando estuvo junto el, se sentó y acarició su rostro.

— ¿Por qué sufres tanto, amor? —Susurró con voz temblorosa.

Besó la frente de Tao y éste se movió un poco.

— No te lo mereces. —Volvió a susurrar y Tao abrió los ojos.

— Tú no mereces que yo te haga sufrir de ésta manera —lloriqueó acariciando la mejilla de su novio.

Yifan se acurrucó contra ésta y negó lentamente.

— No es tu culpa... —Y besó su mano.

— Entonces... ¿por qué actúas como si lo fuera?

El corazón del mayor se encogió al escuchar el dolor que cargaban las palabras de su novio, se acercó y lo abrazó, sintiendo una inmensa culpa.

— Lamento tanto haber actuado como un idiota, estaba... estoy asustado, demasiado, Tao. —Los ojos del mayor se cristalizaron y cubrió sus labios tratando de ocultar un sollozo— Temo perderte... temo tanto perder al amor de mi vida... tengo tanto miedo de que ésto que tenemos acabe.

Tao, sin poder evitarlo, comenzó a llorar de la manera más desgarradora que pudieses imaginar, destrozando aún más el corazón de su novio, quien comenzó a negar.

— Mi amor, lo siento... —Lo tomó de las mejillas y le dio un corto beso— Tienes que estar tranquilo.

— ¿Cómo quieres que esté tranquilo?, no quiero que sufras...