Capítulo 6

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Camilo estaba que se moría de celos y de rabia por ver a Mónica feliz con su hijo y por no ser él quien estaba besándola. Apostaría todo por probar el sabor de los labios de Mónica.

-¿Interrumpo? - dijo Camilo entrando a la sala y acomodándose la camisa...

-¿Papá? ¿Qué haces aquí?

Mónica se tocó la frente porque no creía lo que acaba de pasar. Estaba cabreada con Camilo por lo que había hecho.

-Rafa, olvidé decirte que estaba aquí tu papá. -Se levantó del sofá- Entró al baño y como tú y yo nos quedamos platicando se me pasó. 

-No importa Moni. - le dijo Rafael y se levantó para después abrazarla.

-Sí hijo es que me preocupó un poco la forma en la que Mónica se fue. Además dejó olvidada su iPad en la oficina y decidí traérsela. Ahí está parte de mi vida.

-Bueno. Papá  ¿Qué crees? Mónica dejará de ser tu incondicional día y noche porque ahora es mi novia- dijo Rafael con una sonrisa de oreja a oreja.

-Me da muchi gusto hijo. Mónica es una mujer excelente y mi hijo Mónica es un gran hombre- Mónica estaba más confundida que nunca- déjenme felicitarlos.

Camilo se acercó a donde estaban y abrazó a Rafael y después  se dirigió a Mónica. Ella no estaba muy convencida de ceder al abrazo pero no se pudo resistir pues Camilo sin previo aviso la tomó de la mano y la jaló a su cuerpo para abrazarla. 

-Me va a importar muy poco que sea mi hijo. Pero aquí sólo puede haber un ganador y ése seré yo- le susurró muy despacio al oído.- Felicidades- dijo después en voz alta mientras se separaba.

-Gracias señor- Dijo Mónica con una sonrisa falsa.

-Papá ¿te parece si nos vamos? - preguntó Rafael- recuerda que hoy quería ir a tu casa para convivir con mis hermanos. 

-Hijo encantado me iría pero tengo que ir a una cita con el licenciado Herrera. Quedamos de ir por unos tragos para revisar los últimos detalles de un focus ¿Verdad Mónica que me agendaste cita?

-Sí, sí señor.

-Bueno, entonces me retiro- dijo Rafael- Adiós pá- se acercó  a Camilo y le dio un rápido abrazo- Adiós amor- se acercó a Mónica y le plantó un beso en los labios.

Camilo al ver el beso apretó los puños.
Rafael se fue y en cuanto se fue Mónica se dejó caer sobre el sofá preocupada y confundida por lo que acababa de pasar.
Se hizo presente un silencio incómodo durante unos minutos hasta que Mónica decidió romper con él una vez que había procesado todo lo que había sucedido entan solo 20 minutos.

-Bueno -se levantó del sofá y se acercó  a Camilo hasta que quedaron de frente- ¿Qué pretende don Camilo? No estoy entendiendo nada de lo que está pasando aquí- se señaló y después señaló a Camilo- explíqueme. Primero me arrincona en si oficina y me ofrece una relación clandestina, después viene aquí a buscarme y también me atrapa intentando algo más e incluso me dice que va a luchar contra su hijo y que será el ganador ¿qué lo hace estar tan seguro? - se le puso a la altura enojada y él sonrió.

-Primero te diré que te ves tan hermosa enojada- sonrió- y segunda es que me encantas Mónica...

-Ay Camilo por favor, no sea tan mentiroso, eso que se lo crea su mamá. ¿Usted cree que yo no sé que lo único que quiere conmigo es sexo? - se dio la vuelta cruzándose de brazos.

-No Mónica, yo no quiero sólo sexo contigo...

-Camilo - se volteó y quedó frente a frente de él- mejor váyase y no se aparezca más por aquí. 

-Mónica déjame decirte lo que tanto he querido gritar desde hace mucho tiempo- le tomó la mano.

-No don Camilo- se soltó y le pasó por un lado caminando hacia la puerta y abriéndola- mejor váyase con sus mentiras a otra parte y nos vemos mañana en la oficina ¿No? - le guiñó el ojo.

Camilo asintió y con la cabeza agachada se salió del departamento, justo cuando Mónica estaba a punto de cerrar la puerta, metió el pie para evitar que la cerrara.

-De una vez te digo Mónica... esto no se va a quedar así.  Algún día tendremos que aclarar todo esto que nos pasa, porque no sólo a mí me pasa, he visto cómo tiemblas cuando me acerco o cómo tu respiración se agita.

-¡YA VÁYASE! - gritó Mónica y Camilo sonrió. 

Camilo quitó el pie y Mónica azotó la puerta del enojo que traía. 

《¿Y éste estúpido qué se cree? Será que piensa que sí le voy a creer y que voy a caer en su juego, está muy equivocado...》

Camilo se fue y estuvo pensando en la situación camino a su casa. Estaba decidido a luchar por Mónica, ya estaba cansado de estar en esa situación. No podía seguir atado por más tiempo a alguien a quien no ama y estarse engañando a sí mismo y a una mujer buena que podría ser feliz con alguien más. También pensaba cómo decirle a Rafael que él ama profundamente a Mónica sin herirle el corazón a su hijo. Camilo estaba teniendo una lucha interna entre decirle y hacer lo que sea por tener el amor de Mónica o luchar en silencio por ella para que ella decida si quiere estar con Rafael o con Camilo.
Camilo por primera vez estaba decidido a hacer algo para cambiar su vida. Descubrió que Mónica le importa más de lo que creía y que no está dispuesto a verla en brazos de otro, aunque sea su hijo. Sentía un poco de egoísmo, pero él en el fondo estaba seguro que Mónica también lo amaba, pero sus valores y su personalidad no le permitían luchar por él. 

Mientras tanto Mónica estaba más que agustiada por todo lo que había sucedido. Ella ama a Camilo pero también quiere a Rafael. Le sorprende cómo esta vez su corazón no está ahí únicamente para Camilo. Estaba cansada de entrgarse a Camilo al 110% no podía estar más así. Su tiempo se estaba yendo en MediaLink, su vida se hizo ahí y no como se debía. 

Camilo llegó a su casa decidido a pedirle el divorcio a Diana.

-¡PAPÁ!- gritó Nicolás mientras iba a la entrada a abrazar a Camilo.

-Hola Nico- lo cargó y abrazó. 

-¿Qué onda pá? - dijo Rafael- pensé que tardarías más...

-No, me habló el licenciado que tuvo un problema y que mañana quedemos para desayunar para revisar el focus. 

Rafael asintió un poco incrédulo. 

-Camilo amor hola- salió Diana de la cocina y fue a darle un beso a Camilo que él no correspondió. 

-Diana, tengo que hablar contigo- Bajó a Nicolás- Nico,ve a jugar con Rafa.

-¿Qué pasó amor? - lo agarró Diana del brazo.

-Ven, acompáñame al despacho- le dijo Camilo subiendo las escaleras.

Una vez llegando al despacho Camilo se sentó en su escritorio, suspiró hondo y se decidió a hablar con Diana.

-Diana, te amo como lo que eres, la madre de nuestros hijos, te quiero mucho, pero hace mucho tiempo que dejé de amarte como mujer- Diana lo veía fijamente con los ojos llenos de lágrimas- me costó mucho tomar esta decisión, por nuestros hijos, no quiero que sufran, pero me decidí pensando en ti en mí- Diana no hablaba, sólo lo veía- creo que no es justo que nos engañemos de esta forma o al menos que yo te engañe de esta forma. Seguir a tu lado es darte esperanzas de amor. No es justo para los dos.

-¿Tienes a otra mujer?- preguntó Diana- Contesta Camilo ¿Tienes a otra?

-No Diana. No la tengo, no te he engañado físicamente pero con la mente sí, tengo 20 años enamorado de alguien más...

-¿Quién  es Camilo? ¿QUIÉN ES? -Gritó Diana.

-Diana, perdón,daría lo que fuera para no hacerte sufrir de esta forma pero, no pude hacer nada para evitar hacer sentir al corazón.

-Camilo, sólo  dime ¿Quién es?

-Mónica...

Peligroso amor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora