Capítulo 7

426 35 11
                                    

-Diana, perdón,daría lo que fuera para no hacerte sufrir de esta forma pero, no pude hacer nada para evitar hacer sentir al corazón.

-Camilo, sólo  dime ¿Quién es?

-Mónica...

-¿Mónica? - se levantó Diana de la silla- Camilo esto es una broma ¿verdad?

-No Diana. Desde que conocí a Mónica he sentido algo por ella pero... no me animaba a decírtelo ni a hacérselo saber a ella.

-Ahora entiendo- se limpió las lágrimas- ahora entiendo tu comportamiento cuando Mónica estaba con Rafael, te morías de celos, por eso tu enojo- empezó a caminar de un lado a otro llorando- no puedo creer. Ya lo imaginaba, ya creía yo que había alguien más en tu mente pero ¿Cómo no me di cuenta de que era Mónica? Debí saberlo Camilo... por eso en ningún evento faltaba, por eso le llamabas hasta el fin de semana y yo de estúpida creyendo que era por trabajo. Y ella, es una desgraciada malagradecida...

-No Diana, a ella no le digas nada...- la interrumpió Camilo.

-Le abrí las puertas de mi casa, le di mi confianza desde hace 20 años... tanto así que hasta se tomó la libertad de enredarse con mi marido.

-DIANA, DIANA- le gritó Camilo para calmarla- Mónica y yo jamás hemos tenido nada.  Ella está ahorita en una relación con Rafael.

-¿Y entonces? ¿Por qué quieres el divorcio? Quédate a mi lado y luchemos por este matrimonio Camilo,yo te amo.

-Diana no puedo, perdón, pero no puedo seguir silenciando lo que siento. Amo a Mónica, no sé cómo pasó pero me enamoré.

-Pues de una vez te digo que no Camilo, no te daré el divorcio...

Diana se salió del despacho azotando la puerta y Camilo se quedó ahí dentro decidido aún a cambiar su destino. Ahora su preocupación era decirle a Rafael lo que siente por Mónica.  Sería una tragedia que rivalizaran por el amor de una mujer, sin embargo, todo señalaba a que así sería. 

-Pá ¿interrumpo? - entró Rafael al despacho.

-No hijo ¿qué pasa? Dime.

-Necesito hablar contigo. Es algo que me ha movido la cabeza desde hace días pero hoy tuve más sospecha que nunca- Camilo no decía nada, sólo lo observaba- ¿A ti te gusta Mónica? - soltó y Camilo abrió los ojos como plato.

-Rafa- suspiró.

-Pá, me he dado cuenta los celos que tienes cuando yo estoy a su lado y cómo la vez cuando ella está distraída...

-Sí hijo. Amo a Mónica desde hace 20 años. Tengo 20 años con este amor aquí dentro- se señaló el corazón una y otra vez- pero nunca he hecho nada por luchar por ella. Porque está Diana y están mis hijos y bueno ahora que estoy decidido a hacer algo por ella, tú estás a su lado...

-Mira pá, a mí Mónica me encanta, me enamoré de ella desde el primer momento en el que la miré.  Los dos la queremos, pero al final ella decidirá con quién debe quedarse-Rafael  decidió no contarle a Camilo que Mónica también sentía algo por él- yo sólo te pido algo pá, respeta mi relación con ella , por favor.

-Sí hijo. Te prometo respetar lo que ustedes dos tienen.

-Va papá.  Ya me voy, jugué un rato con Nico, al parecer es el único que me quiere- se rió- Ni Barbie, ni Regis y mucho menos Cristóbal se interesaron por mi presencia en la casa.

-Déjalos, con el tiempo apreciarán el gran hombre que eres hijo.

-Gracias pá. Nos vemos mañana en la oficina.

Peligroso amor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora