We Are Family //Larry Stylinson//

Capitulo 35

Volvió a acomodar su camisa blanca por segunda vez, hacia calor y había pasado todo el día con hambre, no había podido comer nada desde el desayuno, hace seis horas. Sin contar que tuvo que ir a las cinco y media de la mañana. Y no estaba siendo un buen día, su jefe estaba de mal humor y Zayn buscaba cada momento para acercarse.

Y si debía admitirlo, él también estaba de mal humor.

Estaba concentrado en intentar ordenar la semana de su jefe, quien, estúpidamente había pedido más reuniones de las posibles. ¿Cómo alguien tan idiota podía manejar una oficina? lo único que esperaba era un maldito aumento.  La voz de una chica a un lado suyo lo asusto, levantando la vista rápidamente para suspirar cansado.

-Hey Natalia-saludo amablemente.

-Algunos del trabajo vamos a ir a comer ahora, y se que no pudiste ir hoy. ¿Quieres acompañarnos?

-Seguro, estoy muerto de hambre. Deja que guarde las cosas-la castaña asintió dándose vuelta para llamar a alguien con la mano. Guardo todo rápidamente antes de tomar su celular y la billetera.

Caminaban por la acera con calma, el ruido de los autos pasado a su lado junto a lo que podría ser algunos pájaros volando sobre sus cabezas. Natalia hablaba de como había sido mudarse de lejos y que le había costado entender el idioma. Había viajado desde América Latina.

-Ser una mujer negra y latina me esta dando un buen golpe aquí, por suerte encontré un buen lugar para trabajar-agrego.

-Los blancos tienden a ser idiotas.

-¿No eres blanco tu?-la chica lo miro, Harry le sonrió.

-Sí, pero lo admito. Parece que tienen la cabeza vacía-Natalia carcajeo antes de parar frente a un pequeño restaurante, empujando la puerta y sosteniéndola para dejarlo pasar.

Carcajeo mientras daba un sorbo a su agua, habían terminado de comer hace cinco minutos y ahora estaban esperando que el resto termine su postre.

-Deberíamos irnos un día de fiesta-Phil hablo emocionado.

-¡Sí! siento que me muero de aburrimiento en mi casa-Natalia dio otro mordisco a su tarta de queso-¿Qué dices Harry?

-Suena bien, tengo los fin de semana libre.

-¿No tienes hijos?-Phil pregunto alzando una ceja.

-Van con su otro padre esos días.

-No sabía que estabas divorciado-Hannah hablo de la nada.

-Oh, sí. Nos divorciamos hace cuatro años-acomodo el moño de sus rizos.

-Wow, fue hace tiempo. ¿Se llevan bien?

-Nosotros...-suspiro pensándolo un poco- sí, ahora si-sonrió.

-¿Y cuantos hijos tienen? estoy sorprendida.

-Son tres solamente.

-Que lindo, yo quiero tener uno, super pequeñito-Hannah sonrió emocionada.

-Es un no para mi, dentro mio no va haber ningún niño-Natalia habló segura de si misma. 

-En fin, ¿Si vamos a salir? porque entonces denme sus números y hago un grupo.

Para cuando volvió a la oficina tuvo que volver a encerrarse en su propia mente, terminando más rápido de lo pensó, camino hasta su jefe, golpeando suavemente la puerta para ser recibido. Dejo los contratos y su lista sobre el escritorio para que aquel señor lo deje irse antes a casa. Y con una sonrisa bajo las escaleras, su nombre fue gritado a mitad de camino, obligandolo a girar para fruncir el ceño.

-Hey... ¿te vas antes?

-Sí, ¿Sucede algo Zayn?-apretó más contra si mismo su maletín.

-Solo quería hablar contigo... no quise enviarte mensajes por si te enojabas conmigo.

-Demonios Zayn-suspiro pasando su mano por su cara- mira, desde el comienzo aclaramos que era solo sexo. Nada más. Eres una persona hermosa y estoy seguro que vas a estar bien. Pero eres joven, tengo veintinueve años ¿si? y tres hijos, tu... tu no deberías querer algo conmigo, sería amarrarte.

-Me gustas ¿si? eres divertido y muy hermoso.

-Lo siento Zayn...

-¿Volviste con Louis?

-¿Qué?

-Solo si... volvieron, ¿cierto?-sus ojos oscuros lo miraban aterrado de la idea, y le daba pena.

-No se que te hace pensar que nosotros hemos vuelto.

-Cuando te vi con él, no sabía que era tu esposo. Hasta que vi como se tratan ¿bien? lo entendí, 

-Él no es mi esposo... 

-Actuaban como una pareja casada, y esta bien. Suele pasar.

-Bien, no importa si crees que volví con él, no paso. No va a pasar.

-¿Seguro de eso?-lo miro a los ojos directamente, no sabía que responder.