Fall For a Trouble.

Capítulo veinte.

Azoté la puerta de casa, sentía aún una rabia incontrolable, pero estaba diluyendose poco a poco por tristeza.

Jordán había elegido a Monica.

Fui directo a la cocina, papá había dejado una nota pegada al refrigerador diciendo que no vendría a comer, que saldría con Karen, al menos ahora lo admitía.

Suspire y comencé a inspeccionar el refrigerador, había pizza fría, enchiladas de pollo y pescado.

Supongo que podría hacer un poco del último.

Estaba preparando la olla cuando unos golpes resonaron en la puerta.

Mi corazón latió...¿podía ser...?

- ¡Hola nena!- grito la voz de Sara desde el recibidor.

Sonreí para mi sintiéndome tonta, ¿quién creerías que sería Erin?

- Sara aquí- dije haciéndole señas.

Fue sonriendo hacia mi de oreja a oreja.

- ¡Por que no me dijiste nada!- se quejó dándome un golpe.

La mire sin saber de que hablaba.

- No se...

- Oh vamos, no te hagas tonta, claro que lo sabes- me dio un codazo- Tu y Damien irán juntos al baile- dijo dando brinquitos.

Alce las cejas comprendiendo.

- Eso...

- Si, eso, ¡iremos al baile! Es nuestro último año, tenemos que disfrutarlo al máximo, ahora mismo dejas de hacer eso que huele mal y vamos a por los vestidos más sexys que tengan en el centro- me guiñó un ojo.

Fue a apagar todo en mi cocina mientras yo la veía procesando las palabras, a veces era muy difícil seguirle la corriente.

- Sara, no quiero un vestido, arriba tengo uno...

- Erin, si no vienes ahora mismo conmigo te juro que tiro todo el chocolate que haya en tu alacena- advirtió.

Trague saliva, me había puesto en una situación muy difícil, no tenía opción más que aceptar.

- Bien, vamos- acepte tomando la bolsa del mueble.

Salí tras de ella hacia su coche, se subió dando brinquitos.

- Alex me invito hace una semana, jamás habido a un baile, ¿sabes? Y no le gusta, solo va por mi- parpadeo soñadora- Erin creo que lo amo- admitió mordiendose el labio.

La mire abriendo mucho los ojos.

- No digas eso- espete.

Frunció el ceño.

-¿Que te pasa Erin? Hablas como si amar fuera lo peor del mundo- rodó los ojos- No todos pensamos así, para alguno de nosotros enamorarse es un milagro- dijo.

Negué.

- Siempre acaba de la misma forma- la mire- Con el corazón roto, no es por romperte tus expectativas, de verdad me encanta que estés enamorada y todo eso, me alegro por ti, pero tienes que aceptar que jamás te quedas con tu primer amor- dije haciendo un mohín.

Sara frenó bruscamente en el rojo.

- Estas siendo una perra, no todos somos unas insensibles- gruño mirando al frente.

Me mordí el labio, tal vez si me había pasado un poco, pero era lo que pensaba, no me quedaría callada, le di mi opinión al respecto...

"¿Enserio Erin?"