Fall For a Trouble.

Capítulo cuarenta y ocho.

Estoy sentada entre sus piernas, recargando mi cabeza en su pecho mientras susurra algo en mi oído.

Algo que no puedo entender.

- No entiendo cuando murmuras- susurre aun sin verlo.

Pero esta vez no contesto, me di la vuelta lentamente, preguntándome por qué no me había contestado, odiaba cuando hacia eso, en el momento en que mi rostro encontró el suyo un grito desgarrador corto mi garganta.

No era el rostro de Jordan el que veía...era el de Paul.

- ¡No!- grite intentando alejarme pero sus manos me tenían aprisionada.

Para siempre.

Me levante con el grito resonando aun en mis oídos y lagrimas cayendo por mis ojos.

Trague saliva dificultosamente llevándome la mano al pecho, el corazón me latía desbocadamente mientras los residuos de la pesadilla se iban desvaneciendo, los cabellitos se pegaban a mi cien, mi cara completamente sudada.

Había sido una pesadilla. Solo eso, nada había sido real, Paul no me tenía y jamás lo haría.

Por que mañana todo saldría bien.

Por que solo había sido un mal sueño.

Me quite la sabana de encima y baje ambas piernas de la cama lentamente, el despertador marcaba las nueve de la mañana, mi celular sonaba en el buró y fui a tomarlo sabiendo ya lo que encontraría.

Un recordatorio, sonreí ante este: "cumpleaños de Jordan, arriba, arriba"

Me levante de un salto y estire como un gato antes de ir a ducharme, el sol brillaba detrás de la ventana augurando cosas buenas, después de todo, era el cumpleaños de la persona que mas amaba en el mundo.

El día debía ser perfecto.

Me duche a una velocidad sorprendente, lave mi pelo con ese shampoo que había comprado en la despensa de ayer, uno que olía a fresas y dejaba mi cabello bastante suave, me gustaba muchísimo.

Salí dejando una estela de gotitas tras de mí antes de poder enredarme en una toalla limpia y comenzó la dificultosa tarea de desenredar mi cabello, al final triunfe y solté una risita maniática en señal de victoria.

Estaba tarareando la canción de mi tono mientras me embutía en unos jeans ajustados y colocaba una chaqueta de mezclilla sobre mi blusa roja de botones.

Trenza rápidamente mi cabello y me calce mis botas antes de bajar casi bailando las escaleras.

Este sería un día taaaan bueno.

- Buenos días- dije a papá entrando a la cocina.

Papá me miro extrañado.

- ¿Por qué tan feliz?

Me encogí de hombros.

- Jordan cumple años hoy- avise.

Sonrió.

- ¿Si? ¿Ya sabes que le regalaras?

Me mordí el labio.

- Si- admití- Lo mande a hacer hace un mes, me llego ayer- conteste.

- ¿Bueno? ¿Y qué es?

Le guiñe un ojo.

- Eso es información confidencial- dije.

Soltó una carcajada.

- Muy bien, ¿harán algo?

Asentí.