Capítulo 50 || Separaciones

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Saludo a todos una vez entro. Phoebe sonríe discretamente por mi rostro que seguramente muestra menos color del habitual.

Joder.

¿Por qué no me informó que mamá sabía?

Al llegar a casa están sirviendo el almuerzo temprano por orden de papá, quien últimamente abandona antes de tiempo la empresa dejando a Christopher a cargo. Estoy seguro que se trata de su decisión de nombrarlo vicepresidente. El maldito entraría en los récord Guinness como el vicepresidente más joven del mundo. Además, lo he visto involucrado en un proyecto extra que todos desconocemos y papá asegura él comentará cuando lo crea conveniente.

No sé qué se traen esos dos.

Una vez tomo asiento en el comedor el jodido estómago se me cierra haciendo que coma a la fuerza. Intento prestarle atención a las mierdas de Ted, pero es imposible, saber que mamá hablará conmigo me tiene sumamente nervioso. Ni siquiera le doy firmeza al reclamo que le hago al tío Elliot por no estar presente en la inauguración de mi empresa.

Al final los felicito por su matrimonio, la abuela se ve feliz que su hijo haya encontrado nuevamente el amor. La forma en que mira a su esposa es única, se perciben sus sentimientos que no hace el intento por esconder.

En eso es tan parecido a papá.

Todos regresan a sus labores, cuando pienso irme mamá me detiene a escasos pasos de la puerta. Por un segundo me siento como un niño descubierto huyendo de una de sus escenas de travesuras.

—¿A dónde crees que vas? —me giro encontrando a mamá con los brazos en sus caderas y una mirada fulminante que acelera los latidos de mi corazón a mil.

—¿Trabajar? —balbuceo como un completo estúpido.

Al fondo veo a mi pequeña sentada en el sofá, con sus ojos puestos en una revista, pero sus labios tienen una sonrisa que seguramente ha luchado por controlar.

¿Se está vengando de mí? No creo que haya olvidado decirme que mamá sabía de su embarazo, parece a gusto con mis nervios, absolutamente divertida de mi situación.

—Al estudio —suelta mamá en un gruñido que no admite queja.

Se aleja con paso firme.

Inhalo profundamente.

Me recriminaré toda la vida por ser un idiota.

Paso frente a Phoebe que me mira con ojos inocentes.

—Te divierte, ¿no? —La miro con los ojos entrecerrados.

Amplía su sonrisa.

—Esto es de dos, ¿lo recuerdas? —¡Lo sabía! —Ahora te toca tu parte. —Me guiña uno de sus hermosos ojos.

Aprieto los dientes furioso.

—Juro que...

—¡Damon! —El grito de mamá me interrumpe tensando cada parte de mi cuerpo de una manera atroz.

—Si estuviera en tu lugar, iría ya. Está furiosa. —Le envío la peor de las miradas antes de gruñirle y tomar el mismo camino que tomó mamá.

Joder, siento que a cada paso mi corazón se saldrá de mi pecho. Mis piernas se mueven por instinto, el mismo que me pide salir corriendo porque estoy seguro que lo primero que saltará en sus ojos es decepción, lo que siempre me empeñe en jamás hacerle sentir.

Entro después de respirar profundamente y establecer un mantra que logra controlarme. Permanezco en silencio, expectante a lo que dirá, ansioso, absolutamente angustiado.

Damon Grey #3 (Saga Sombras, Grey)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora