34.

4.2K 293 0
                                    

Alfonso|

Verla salir de esa manera me puso mal, todo este tiempo, todo este dolor y sufrimiento había sido causado por Maite, de la última persona que sospecharía, pero la misma mujer en la que Jessica desconfiaba desde el momento en que se conocieron. Todo esto me estaba cayendo completamente de peso y no pude hacer nada para evitar que Jessica no se fuera;  Me lo merecía por mi culpa Maite había alejado a Edgar de su lado a ese pequeño que no tiene la culpa absolutamente nada.

Me senté a la terraza, no sé cuántas horas pasaron, pero sé que fueron mucha. Quería irme de ese lugar, lo único que lo lograba era pensar que ahora Jess no tenía donde iba a ni siquiera por sus cosas.


Jessica|

—¿Mamá? ¿Hola? ¿Está mi papá contigo?

—Si hijo, ¿pasa algo?

—Comunícamelo ¿si? Por favor.

Rebeca lo hizo, supuso que de su esposo si lograría sacar información.

—¿Alfonso? ¿Qué pasó hijo? Hay novedades.

—Sí, pero no como yo las quisiera, ¿les importaría si me voy unos días con ustedes? Necesito arreglar unas cosas, pero te explico cuando nos veamos.

—Claro hijo; te conozco —Orlando suspiró y le habló a Alfonso—, sé que algo te está incomodando, pero esperaré a que llegues y hablamos.

Alfonso colgó y fue a preparar una maleta, pero antes de llegar a la habitación cruzó con la de Edgar, el sentimiento le ganó y entró.

—Perdóname hijo, nunca pensé que esto iba a pasar, tal vez yo no sea totalmente responsable, pero si seré quien te traiga de regreso a casa.

—¿Señor? —Silvia entró a la habitación—. ¿Se encuentra usted bien?

—No Silvia, no me encuentro bien.

—¿La señora? —preguntó extrañada Silvia.

—No está y es todavía algo duro para mencionar en voz alta, no quiero hablar del tema Silvia —Alfonso se levantó de la mecedora—. Necesito hacer una maleta, ¿Me podrías ayudar?

—Claro señor.

Ambos fueron y en cuestión de media hora, la maleta ya estaba hecha, comió algo y después marcó el número de Jonathan, su hermano.

—¿Hermano? ¡Hola! Necesito un favor... ¿Puedes venir? Yo sé que te ibas ir al rato a la Ciudad de México, ¿puedes hacerlo ahora? ¿Y llevarme? En el camino te explico todo.

Alfonso colgó y bajó con su maleta, fue a su estudio, tomó algunos papeles y cosas, esperó la llamada de Jonathan que luego de unos minutos, recibió, le dio algunas cosas a Silvia y pidió marcarle a Jessica diciéndole que él ya no estaba, que podía volver. Silvia no entendía completamente, pero sabía que Alfonso tenía algo, su expresión y sus ojos llorosos se lo decían todo.

—Ahora si me puedes decir, ¿qué es lo que pasa Alfonso?

—Edgar está en la ciudad, necesitamos irnos para allá.

—Pero ¿cómo supiste?

—Arranca, te lo contaré todo.

Jonathan lo hizo, tenían 8 horas de carretera para hablar y planear algo; Jonathan le aviso a las personas que tenía a su cargo que no llegaría ese día, sino hasta uno después.

—¿Ella? 

Hablaron de lo que había pasado, pero más aún Jonathan le estaba dando consuelo a Alfonso, hablaron más del lado nuestra relación.

Un nuevo Amor ||COMPLETA||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora