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Seiya salía del hogar de Serena cuando de la nada ve a un auto deportivo aparcando frente a él, no le tomó importancia hasta que una voz le llamó:-Kou ¿Qué haces aquí?-.

Al verlo de cerca se dió cuenta de que era Haruka y molestó, sus palabras salieron como veneno:-qué rayos te importa, es la casa de mi novia y yo puedo venir cuando quiera, es más, tú que haces aquí-.

Haruka sonrió con arrogancia:-tampoco te importa-, pero, justo después de decir eso puso un semblante muy serio y de su auto sacó un sobre sellado a la vez que decía:-que bueno que estás aquí, hay un asunto que quiero tratar contigo-.

Seiya lo ignoró y se iba a marchar cuando Haruka se puso directamente frente a él acorralándolo frente a su auto:-te odio es cierto, tal vez es por algo de lo cual no tienes la culpa, pero también, es cierto que cabeza de bombón te ama, fui demasiado..., hice mal lanzándote todo mi odio pero ahora necesito que la cuides mucho, ella te necesitará más que nunca-.

Seiya lo apartó de él a la vez que le decía:-no tengo tiempo de oírte y no necesito que me digas eso, yo la protegeré cueste lo que cueste de cualquier persona incluyéndote a ti-, lo miró desafiantemente.

Haruka se alegró de esas palabras, pero con mano firme le puso el sobre en el pecho empujándolo un poco:-sea como sea, esto te implica a ti también, tómalo, es algo que debes saber-.

Seiya lo empujó y tiró el sobre:-no caeré en tus trampas, no me importan tus injurias, de ti solo recibo falsedades, no se que intentas, pero no te haré ningún caso-.

Haruka lo tomó del cuello de la camisa y exaltada le dijo:-¡eres un necio!, aunque...-, soltó su agarre y siguió:-yo me lo busqué, he estado algo mal emocionalmente hablando y no me excuso por ello, pero, supongo que eres un buen hombre, solo, no la dejes sola, lee la información, enserio necesitas leerla-.

Ella levantó el sobre y volvió a ponérselo en el pecho, Seiya pudo ver que aquello lo decía con sinceridad pero no podía creerle del todo, tomó el sobre pero siguió hablando con desdén:-ya te dije, no creeré en tus mentiras, cuidaré a Serena de todos incluyéndote-, con esas palabras la señaló y sin querer la tocó cerca del pecho.

Haruka abrió sus ojos inmensamente y roja de vergüenza y coraje le metió tremenda bofetada, a la vez que lo tiraba al suelo y levantando su puño mientras decía:-no me vuelvas a tocar infeliz-, estampando su mano a un lado de la mejilla de Seiya quién se sorprendió por el acto y la fuerza que "él" ejerció.

Haruka respiro agitadamente y se dió cuenta de lo que estuvo a punto de hacer, sabía que no podía reaccionar así ante cualquier error, pero no se había podido contener, lo miró a los ojos con temor, no por él si no por ella y sin despedirse ni nada, subió a su auto casi corriendo y llena de nerviosismo, encendió el coche y se fue, a la vez que hacía una llamada y dejaba a Seiya más que confundido, ya eran dos veces que actuaba así, pero esta vez había sido más agresiva que la anterior.

Se levantó y tomó el sobre, no quería verlo pero se lo llevaría aún así, aún no comprendía la actitud de aquel sujeto y eso lo molestaba en demasía pues no comprendía que debía hacer o como actuar, así que  sin más, se marchó de ahí...

Por su parte Haruka llamaba a Neflyte utilizando para ello un manos libres diciéndole lo que había hecho, a lo que éste de inmediato la cito en su consultorio, pues aquello era una respuesta que no debería tener con el tratamiento que llevaba y con su sesión de la vez anterior, preocupándolo un poco.

Ella asintió y se marchó hacía aquel sitio, presa de un inmenso dolor y un extremo nerviosismo, sin embargo, mientras iba conduciendo el ataque de nervios se intensificó y de un momento a otro perdió el control estampando su auto en un poste de luz dejándola inconsciente ante la mirada atenta de algunos testigos, entre ellos, Yaten que aún caminaba sin rumbo, reaccionando rápido y llamando a una ambulancia, a la vez que se acercaba a ver la condición del conductor, cuando..., se dió cuenta que era Haruka quedando en shock, mientras el sonido de sirenas se hacía presente en la cercanía...

Bombón, ella y yoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora