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Capítulo 23: Reminiscencia

Ya estaba anocheciendo, sin embargo a él no le importaba cuánto tiempo se tardará en llegar a casa.

¿Qué podía pasar en tiempos así? En donde ahora podías ir a cualquier lugar sin preocupaciones, eso era lo que había necesitado desde hace ya tiempo, aún con una corta edad junto con sus pequeños hermanos habían experimentado la Guerra Shinobi que cobró la vida de muchos inocentes.
Incluso su clan había sido uno de los tantos que se habían ido a la guerra en busca de la paz, que ahora ellos tanto gozaban. Debería estar agradecido, ¿No? Al menos toda su familia aún estaba con vida, pero... ¿Qué decir de todos aquellos que perdieron a alguien?

Él no podía imaginarse cuando alguno de sus padres o hermanos se fueran, sería un golpe muy duro que quizá no lograría enfrentar.

De repente escucho un ruido muy fuerte, eso hizo que él se extrañara. Estaba cerca de casa, pero, ¿Qué era eso que se escuchaba? Podía sentir un presentimiento, miro a todos sus alrededores e incluso al cielo, y ahí fue cuando observó aquella majestuosidad: una aurora boreal estaba en su máximo esplendor.

Otro estruendo se escuchó, fue como si algo aterrizó con fuerza en el duro suelo, luego más y más veces se escuchaba. Corrió hacia su hogar, con el corazón latiendo muy rápidamente, estrujó entre sus brazos el encargo que llevaba desde un pueblo cerca de Kirigakure.

Corrió con desesperación, sus pensamientos de antes ya habían sido eliminados y cambiados por las dudas que surgían al llegar a pensar que otra guerra surgiría.

Cuando llegó se dio cuenta que todos estaban dentro de sus respectivos hogares, todos los locales estaban cerrando y todos se disponían a descansar. Pero él... Él aún tenía un presentimiento horripilante.

- Que bueno que llegaste - hablo su madre con una tierna voz al escuchar la puerta abrir y cerrar - Pensé que llegarías mucho antes-

- Perdón... tuve un imprevisto- dijo dejando aquél encargó sobre la mesa de la cocina al mismo tiempo que soltó un suspiro.

No podía dejar de pensar en lo que había escuchado y visto antes. Dentro de su casa se encontraba todo en silencio a excepción del pequeño tarareo que provocaba su madre mientras arrullaba a su pequeña hermana.

Quizá no había sido nada y él sólo estaba exagerando.

Estaba apunto de irse a su habitación cuando el grito fue tan claro como si hubiera sido un llamado;

- ¡He-hey! ¡¿Qué está pasando!-

Él se acercó a la ventana más cercana y abrió las persianas. Cuando observó el exterior retrocedió al ver como algunos comenzaron a realizar sellos para detener a los invasores. La tierra temblaba, el fuego aparecía... ¡llamas color carmesí! El lugar se quemaba.

¿Que era todo lo que estaba pasando?

Sentía que se desmayaría en cualquier momento, que sus piernas estaban muy débiles a comparación de siempre. Los extraños se movían de aquí para allá buscando algo.

- ¡No se interpongan!- exclamo uno de los extraños.

Él vio como varias personas eran puñaladas y caía ya sin vida. Eso definitivamente era una pesadilla. Su visión no podía dejar de ver cómo la muerte se acercaba.

Sin embargo cuando reaccionó notó que sus piernas se movían con rapidez y con sigilo entre las ramas secas del bosque. Giró su cabeza hacía donde antes era su hogar pero ahora sólo habían llamas, se escuchaban gritos, golpes, estruendos e incluso se podría decir que se podía sentir el ambiente más pesado...

Uchiha Hiden: Una Historia Jamás ContadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora