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Capítulo 45: Esperanza de corazón

- Pero que emotivo.- Kioshi pronunció sarcásticamente - Te terminaste enamorando de alguien insignificante.

El lugar de nuevo se distorsiono, habían llegado de nuevo al lugar donde se habían encontrado por primera vez.

La dimensión Shinsei.

- Te prohíbo que te refieras a ella de esa manera.

Ella se levantó, ambos se mantuvieron de pie y parecían que no vacilaban.

- Vengan por su destino.

Y otra vez se le vio, pero esa vez en la torre alta y él se encontraba orgulloso; e irguiéndose sobre los estribos gritó, con una voz más fuerte y clara que la que oyera jamás ningún mortal.

- ¡Vengan por una copia del antiguo rey!
 
Y al decir esto, creo dos espadas de sus manos.

- ¡Tch!

Kiyoshi pareció enojarse al escuchar esas palabras, y él fue el primero que avanzó.  En el caos de la batalla Kioshi nunca perdió de vista a (tn)__________, pero Kiyoshi le saltó encima, enfrentándolo con sable en mano. Dejó caer el acero con todas sus fuerzas, pero dio en el vacío. El brutal impulso empleado en la estocada desequilibró a Kioshi, quien se fue hacia delante, tropezó, cayó de rodillas y su espada se golpeó contra el suelo, y se partió por la mitad. Con un grito de triunfo, Kiyoshi levantó la lanza y traspasó a su propio hermano de lado a lado, pero no alcanzó a completar otro ataque porque un golpe en la nuca lo tiró y lo dejó inmóvil.

- ¡Kiyoshi!

Al verlo en el suelo, decidió correr a él.

(Tn)______________ empujó su katana a "Aira", pero ella salto hacia atrás, logrando salvarse. Sorprendentemente había esquivado varios ataques más, pero (tn)__________ se quedó quieta al sentir el aire asfixiante.

- Jah, por lo que veo has visto lo que hay en el aire.

- ¿Qué has hecho?

Kioshi mostró una esfera.
Era una de las bombas que Kiyoshi fabricaba.

- Gracias a mi hermano, logré esparcir el veneno en el aire. 

Después no dijo nada, Aira se acercó a ella e impacto el cuerpo de (tn)___________ contra una torre, dejando que su mano tomará fuertemente su cuello.

- Mira nada más. Creo que te estás dando cuenta cuál es la diferencia entre tú y yo.

Kioshi en el suelo, rebato la espada de su costado, pero no sé levantó. Empuñando la espada se acercó a Kiyoshi.

-Yo seré el primogénito, el legítimo heredero...

Aira lanzó a (tn)__________ a un lado, sin embargo, no quiso siquiera gritar al sentir el golpe. No era necesario desperdiciar el aire puro que aún le quedaba.

- Tan simple que no hace falta que lo veas para entenderlo.

Levantó su rostro, miro como con ambas manos Kioshi sujetaba el mango de la espada.

Cuando se quiso levantar para salvar a Kiyoshi del trágico destino que su hermano quería para él, Aira la detuvo y en movimiento rápido...

¡(Tn)_____________ sólo vio oscuridad!

Su cuerpo temblaba, de sus ojos hasta su mentón había un hilo de sangre, ella sintió el dolor intensificarse en sus párpados.

Había perdido ambos ojos. Ya no podía ver más.

Escuchó su grito desesperado, corrió tratando de conseguir llegar hasta él. No podía ver y ya no tenía a nadie que la guiará, sintió su garganta secarse por tanto correr, tosió varias veces y fue entonces cuando cayó.

Su cuerpo impacto de manera brusca contra el suelo, aún así ella no se quiso detener y con la fuerza que le quedaba se comenzó a arrastrar.

- Derrotada, débil y con la ligera esperanza de que todo se salvará.

Se colocó delante de ella y piso con fuerza la mano de (tn)_________ que utilizaba como guía.

- Que patética.

Sintió su mano crujir ante aquella pisada. Y antes de que dijera o hiciera algo sintió como su piel fue cortada e inmediatamente el olor metálico inundó el lugar.

Su voz no fue suficiente para que gritara, sólo jadeo de dolor.

Ella tocó su abdomen, sus manos se humedecieron al instante pero lo que más resaltaba era la hoja de un kunai que estaba incrustado.

- ¡Vamos principito! ¡Tú princesa espera!

No hubo respuesta. La voz de Kioshi sonaba burlona y ella se preocupó más. Y aún con el dolor en todo su cuerpo, captó cuando él la tomó del mentón y levantó su rostro.

- Entrega lo que me pertenece.

- Entregaré... el Uranai a los verdaderos legítimos... gobernantes.

Su rostro, exactamente en la mejilla, comenzó a arder y su cabeza giró un poco a un lado.

- Más vale que me lo entregues.

Ella ya no siguió negándole más, así que sacó su flor de cristal, y se la extendió. Está brillo en un tono de color violeta.

- Cuando se cumpla la profecía, todo ser bajo la técnica maligna de la oscuridad será liberado. El pueblo será monárquico una vez más.

- Muy bonito, pero nunca se cumplirá.

Sonrió, ella no lo vio, pero sabía que seguramente estaba sonriendo.

- Nadie sabrá que hacer.

Escuchó sus pisadas alejarse.

- Aira.

- ¿Sí?

- Matala.

- Como desee.

Ella pensó que acababan de terminar cuando (tn)____________ le alargó una furiosa estocada a Aira que, de no haber dado un salto hacia atrás de nuevo, hubiera sido probable que esa fuera su última vez.

(Tn)____________, por alguna razón se sentía sin energías para terminar ese asunto.

Pero debía continuar hasta el final.

Sobrellevando sus límites.

Por el bien de todos.

Hasta el final.

Fue entonces que tomó una espada y se puso gravemente en guardia.

- ¿Qué? ¿Piensan irse?

- ¡No antes de haberte matado, cobarde! - gritaba Aratani mientras hacía frente lo mejor que podía y sin retroceder un paso.

Pero Aratani no sabía con qué clase de testaruda tenía enfrente. Uchiha (Tn)_____________ no era mujer que pidiera merced nunca. El combate continuó, algunos segundos todavía; por fin, Aira, agotada dejó escapar su espada que un golpe rompió en dos trozos. Otro golpe que la hirió ligeramente en la frente, la derribó casi al mismo tiempo toda ensangrentada y casi desvanecida.

- ¡Aira!- Aratani grito con desesperación.

- Esa Aira no se compara con la que yo conocí. Está no es nada.

Sin embargo, el dolor regreso. Ella se retorció mientras sentía que su cuerpo se estrujaba.

- ¿Ves?- Aratani preguntó con burla - Intentaste derrotarme, pero no lo lograrás- formó una sonrisa maliciosa - ¡Por mucho que luches yo como una Diosa te derrotare todas las veces que te levantes y pelees!-

¿En verdad... este era el fin?

Sí... se había acabado todo.

Uchiha Hiden: Una Historia Jamás ContadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora