Blind | Yuta ゆた

28.

So-Hyun cerro sus ojos, el aire empezó a hacerse presente y esto hacía que poca brisa del lago se sintiera cerca de ellos, la chica no había dicho nada después de lo que Yuta le dijo, se había quedado callada, había entendido todo, pero no fácilmente iba a estar con él, si, para ella aún sigue siendo su jefe, aún sigue siendo esa persona egoísta y grosera que conocido al principio, aunque bien dicen, todo a su tiempo.

Yuta ya había separado su brazo del de la chica después de lo dicho, ahora mismo tenía sus piernas completamente estiradas en el pasto solo dirigiendo su vista al anochecer, una ligera sonrisa se formaba en sus labios, quería que la chica al menos por una vez viera el anochecer, incluso la llego a mirar de reojo, sin embargo, esta se encontraba solamente con los ojos cerrados sintiendo la brisa del lago, a Yuta en verdad le encanto esa imagen.

—So-Hyun... ¿Recuerdas que te dije que había una chica de la que me enamore? — La chica asintió con la cabeza al escuchar tal pregunta. — Creo que...fue lo único feliz que tuve, aunque...cuando llegue a esta secundaria, hubo una cosa que me gustó mucho.

— ¿Qué...que era?

—Simple, la cancha de fútbol, era en lo único que me entretenía luego de que terminaran las clases. — Yuta sonrió entre dientes así como respiraba profundamente para pasar su mano por su cabello. — Era lo único que hacía que despegara mi mente en todos los problemas que tenía.

—Debes sentirte...bien al recordar todo eso. — La chica sonrió ligeramente.

—Claro que si...demasiado feliz.

— ¿Sabes Yuta? A veces pienso que...tienes una sonrisa hermosa.

—Por Dios So-Hyun, tengo una sonrisa hermosa, probablemente es la mejor parte de mí.

La chica solo soltó un suspiro combinado con una sonrisa, a decir verdad esta nueva personalidad de Yuta la hacía sentir confortable, no se estaban gritando el uno al otro como normalmente suelen hacerlo, o no estaban discutiendo acerca de los problemas de otros, eso al menos hacía sentir a So-Hyun en otro mundo.

Pronto, esta prosiguió por estirar una de sus manos, buscaba el rostro de Yuta y cuando lo consiguió, solamente respiro profundo dando señal de que se sentía tranquila, a pesar de que sus ojos se encontraban abiertos, todo era oscuro, aunque a decir verdad, a ella no le importo, el hecho de tener su mano sobre la piel de Yuta, la hacía sentir diferente, tal cosa que luego de esto, comenzó a recorrer su mano en el rostro del chico como si te una manta se tratase.

—Tu piel...es muy delicada...Yuta.

Tan pronto termino de decir esto, Yuta solo la miraba a los ojos, enserio no podía creer como esos ojos podían existir, esto solo hizo que el chico tomara el rostro de la misma manera que esta, el veía todo su rostro, sin embargo, la chica solo lo sentía, esa manera de ver y sentir era diferente para ambos, ahora mismo Yuta comprendía el tipo de chico con el que trataba, ya no era solo su empleada.

—So-Hyun...enserio...amo tus ojos.

— ¿Por qué?

—Su color miel...me gusta mucho...probablemente...tú también...

Al decir esto, la chica separo su mano del rostro del chico, no quería ni siquiera tener una relación profunda con el chico, ¿Y es que como hacerlo? So-Hyun sigue con la idea de ser diferente no puede estar con alguien que puede ver, sin embargo, no es solo eso, con tan solo recordar lo de Jaehyun, solo la hacía pensar que en verdad no podía estar con él.

—So-Hyun...al menos... ¿Me dirás que pasa con Jaehyun? — Dijo el chico después de tomar una de las delicadas manos de la chica.

—El...él es un idiota, enserio...el... ¡Él es un idiota! — Reclamo la chica en cuanto se le dio la oportunidad. — ¡¿Sabes lo que se siente amar a una persona para que solo te diga que no es la persona que siempre era contigo?! ¡Lo odio Yuta! ¡Lo odio!