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Vaya que las dos noches en Londres pasaron como un abrir y cerrar de ojos.  ¿Quién diría que las noches ahí acabaran tan rápido? Aunque eso sí, solo  se trataba de pasar dos noches. Solo eso. Sin embargo, pasaron muy  rápido. 

Su vuelo saldría a las seis de la mañana por lo que estarían en Estados Unidos ya en la tarde. Cosa que fue bien para Yuta, ya que el viaje  duraría ocho horas y no sería tan largo como lo fue el de Japón hacia Inglaterra.

Mientras ambos recorrían por última vez las calles de Londres, So-Hyun se notaba cansada. Sin embargo, aun podías ver esa sonrisa en su  rostro. Si, puede que todo el día estuviese caminando, pero eso no impide que la chica siga siendo feliz viendo cosas que nunca antes había visto. 

Ahora mismo se encontraban pasando por el Tower Bridge, el cual fue hermoso para So-Hyun. Ambos caminaban tranquilamente agarrados de las manos. Yuta simplemente  miraba hacia el frente sintiendo como el aire chocaba con su cabeza, así como el mismo aire se encargaba de mover su cabello. El ambiente era realmente pacífico y esto causando una verdadera tranquilidad en Yuta. En So-Hyun...no tanto. 

—Yuta... — Hablo So-Hyun con un tono de voz verdaderamente ligero. Yuta, al escucharla solamente la miro indicándole que siguiera con su palabra. — ¿Alguna vez has bebido en bares de Londres?

—Vine una vez con Yang-mi... cuando vine con mi padre. Recuerda que ella era mi secretaria así que... obviamente debía estar conmigo. — Dijo Yuta sonriendo ligeramente al pronuncia aquel nombre. 

— ¿Se divirtieron?

Claro que lo hicieron. No fueron solamente tragos o bailes con las demás personas en el bar. No. Luego de eso ambos habían ido a la habitación de su hotel para terminar teniendo una noche llena de placer y diversión. ¿Quién diría que aquellos buenos recuerdos los hizo una persona hacia la que nunca pudo admitir su amor? Lo único que espera Yuta es que ella de verdad este descansado como se lo merece. Fue asesinada y eso cualquiera no lo puede perdonar. 

Yuta asintió con la cabeza sonriendo ligeramente. Miro a So-Hyun de reojo. Una mirada tranquila y a la vez unos ojos húmedos. El tiempo que paso con la chica causo que pudiera reflejar más sus sentimientos. Vaya que esto se pudo notar. Cuando Yuta recordó aquellos  acontecimientos con Yang-mi  solo hizo querer llenarse de lágrimas. Con tan solo pensar en esa  persona que jamás creyó perder lo hacía sentir mal, sin embargo, como toda persona debe seguir adelante. 

— ¿Podemos ir a un bar?

— ¿Qué? — Exclamo el chico asombrado. 

—Quiero...divertirme...así como...se divirtieron tú y Yang-mi.

—So-Hyun...

— ¡Por favor! — La chica menciono mirando a Yuta directamente a los ojos.

El chico, mirando a esta de la misma manera que So-Hyun  a él. Yuta se sintió un poco extraño, ¿Por qué de repente su chica  empezaba a querer ir a lugares de ese tipo? Probablemente haría sentir a Yuta en el pasado. Aquel pasado en el que cuando su padre no estaba en el edificio, este tomaba un "descanso" en la bodega de la empresa con  Yang-mi. Incluso cuando salía temprano de trabajar iba a un bar a descansar bebiendo y conociendo varias chicas. Las cuales solo les decía unos cumplidos y les prometía citas, lástima que nunca cumplía su palabra. 

—Bien. Vamos

Al decir aquello, Yuta camino hacia el bar que había ido anteriormente con Yang-mi y el más cercano. Cada que Yuta volteaba a ver a la chica para sonreírle, ella le devolvía la sonrisa. Sin embargo, cuando So-Hyun dejaba de ver al chico siempre borraba esa sonrisa. Ya quería decirle. A pesar de todo ella no es capaz de ocultarle algo al chico.

Blind | Yuta ゆたDonde viven las historias. Descúbrelo ahora