Blind | Yuta ゆた

39.

— ¿No ha despertado?

— ¿Con cuanta fuerza la tiraste?

—La suficiente para dejarla muerta, aún sigue inconsciente, no se sabe si estos días lograra sobrevivir. — Decía aquel chico sin perder vista alguna en Jaehyun, el cual se encontraba con la mirada seria y brazos cruzados. — ¿Por qué? ¿Te molesta? Te dije que no me importaría si estuviera ella ahí, mira las noticias, incluso mate a la secretaria, no me mentiste, era linda.

—Cuando despierte no querrá ni saber de mí.

—Lo sé, yo te dije, cuando Yuta quiere algo, lo mantiene a su lado y hace lo posible para no dejarlo ir.

Al momento de hablar aquello, Jaehyun paso ambas manos por todo su rostro deseando así poder regresar el tiempo, no dejar que So-Hyun tuviera contacto alguno con Yuta, así como ambos no empezaran a sentir cosas el uno por el otro, sin embargo, lo hecho, hecho esta. No hay vuelta atrás y aun y Jaehyun quisiera cambiar las cosas, sabría que no podría.

—Iré a verlo.

— ¿A quién? ¿A Yuta? — Pregunto aquel sonriendo y cruzando sus brazos. Al escuchar Jaehyun aquella pregunta solamente asintió con la cabeza. — Mira cómo te ha dejado los labios, ¿Quieres acabar más golpeado de lo que ya estás? Yuta no querrá ni verte a la cara, ahora todos te odian, ¿No te das cuenta?

— ¡Claro que me eh dado cuenta inútil! ¡Lo único que quiero conmigo es a So-Hyun y no me importa si herí a Yuta!, de un modo u otro ese era mi objetivo.

—Ya veo, bien...aquí. — Decía el chico mientras estiraba una de sus manos, desde que Jaehyun vio ese movimiento, lo único que pude hacer fue entregarle el cheque que le prometió desde que le dijo que matara a Yuta, o al menos hiciera el intento. — Hasta aquí, desapareceré de tu vista Jaehyun, suerte con tus problemas, yo ya no seré parte de ellos.

Una última sonrisa se hizo presente en los labios del chico, camino hasta el chico para así darle unos pequeños en su hombro e irse de ahí sin dejar pista alguna, así como lo ha hecho en todos sus asesinatos. Luego de esto, Jaehyun quedo completamente solo viendo a los alrededores pensando cuidadosamente como habría sido la reacción de So-Hyun al caer desde el segundo piso, exactamente el piso en el que en estos momentos el chico se encontraba.

Cada momento que el chico analizaba, solo le hacía recordar las veces que estuvo con ella, las veces en las que era feliz, y la vez en la que lo arruino todo, la única y pequeña cosa que le importaba era ella y nunca se dio cuenta...

[—¿Cuánto tiempo has fingido ser buena persona delante mío? ¡Dime!

—Desde que te conocí...]

[—So-Hyun, ¿Sabes que hice hoy? Tal vez no me querrás creer, pero es cierto. — Decía el chico con tanta emoción que el mismo juraría llorar frente a ella, y era obvio, ambos apenas alcanzaban la edad de ocho.

— ¿Lograste ser el capitán del equipo?

— ¡No! ¡Por fin tengo diez en todas mis materias! ¡Mi madre estará muy feliz conmigo So-Hyun! ¿Tú también verdad?

—Por supuesto, ¡Felicidades Jaehyunnie~! — Dicho esto ambos prosiguieron por abrazarse, aunque vaya, el primero que dio el abrazo fue Jaehyun, puesto que sabía bien que su amiga no podía ver. 

El abrazo entre ambos duro mucho tiempo, Jaehyun estaba casi llorando por la noticia y So-Hyun no paraba de sonreír, adoraba ver a su amigo de esa forma, adoraba cada parte de el en especial cuando se ponía cariñoso con ella, lo amaba de una manera inexplicable.]