Blind | Yuta ゆた

44.

Ver eso beso fue lo que menos espero, aunque vaya, ¿Qué podría hacer sabiendo que ambos han estado desde pequeños apoyándose, así como amándose el uno con el otro? Ver a Jaehyun tomando las manos de So-Hyun para poder despedirse de ella, ver la mirada que este le dirigía a la chica, así como escuchaba cada palabra que le decía, solo lo hacía pensar, ¿Por qué las cosas terminaron así para que finalmente él se fuera? Yuta creía haber ganado, pero ahora más que nada se siente egoísta.

So-Hyun no hizo nada al sentir el contacto de los labios de Jaehyun sobre los suyos, este bajo sus brazos lentamente hacia las caderas de la chica, ya que así este la acercaría más a ella, si, el beso no era perfecto puesto que era el primero beso de la chica, sin embargo, Jaehyun lo sabía más que nada, por esta misma razón lo dejo pasar.

—Adiós...

Jaehyun le sonrió a la chica, enserio deseaba que ella lo pudiera ver, por esto mismo inmediatamente salió de la habitación, claro, no sin antes mirar a Yuta, cuando ambos cruzaron miradas, Yuta se dio cuenta que esto en verdad le dolía al chico, estaba llorando porque ahora mismo dejaría a la chica con la que siempre estuvo desde pequeños.

—No tengo el mínimo descaro de pedirte disculpas, pero...si es lo más importante para ti ahora, por favor, cuídala por mí, ¿Quieres?

—Claro que lo haría...seria...de lo único que me preocuparía.

—Gracias.

Dicho esto, Jaehyun dio media vuelta para irse corriendo de ahí, quería volver y llevarse, por más que quisiera lo haría...

Al Yuta voltear para ver a la chica, pudo notar que está aún seguía de pie, por la expresión que tenía So-Hyun, Yuta pudo ver que estaba llena de sorpresa, aunque en esta misma expresión también había lagrimas recorriendo sus suaves y tiernas mejillas, todo estaba siendo duro para ambos.

— ¿Se ha ido?

—Se ha ido.

Se ha ido. Las únicas palabras que pasaban por la mente de So-Hyun, la chica inmediatamente se hecho en lágrimas, sus sollozos eran los que se escuchaban más que nada, por esto mismo Yuta se acercó inmediatamente a ella para poder abrazarla. Tomo aquella cabeza para poder recargar esta misma en su pecho, los sollozos de la chica no paraban y Yuta lo comprendía, lo hizo desde que los vio despedirse, nunca había visto tanto amor en tan solo segundos.

Acariciaba la cabellera de la chica de una manera tierna, quería tranquilizarla, pero al momento de que So-Hyun le devolvió el abrazo lloro más, después de todo, las cosas siempre pasaran por algo. Si, la vida conlleva de seguir adelante, no existen maquinas del tiempo en la vida real.

. . .

Al salir del hospital, la primera cosa que hicieron fue despedirse de Taeyong, aún seguía en este después de todo, quería saber que había pasado entre Yuta y So-Hyun, y al verlos juntos, pudo irse en paz.

Las horas pasaron más rápido de lo esperado, Yuta preparo una ligera cena para la chica, mientras comían todo estaba en silencio, era claro que las cosas en el hospital habían sido demasiado duras. Aunque vaya, suerte que la cena paso rápido, ahora ambos se encontraban en la habitación del chico, So-Hyun acostada, tenía sus ojos dirigidos hacia la ventana donde ya se veía la luna, mientras tanto Yuta se hacía cargo de ponerse su pijama, después de todo era olvidarse de todo y por fin poder dormir en paz.

—Yuta... ¿Cómo esta...Yang-mi?

Al escuchar tal pregunta Yuta cerro sus ojos, así como tensaba su mandíbula, ¿Ahora qué le diría? Apenas ambas chicas comenzaban a llevar una mejor relación, aunque vaya, So-Hyun le tomo cariño a la chica desde que le consiguió trabajo, por esta misma razón Yuta no sabía qué hacer, es cierto, la verdad es dura, pero So-Hyun es la única cosa más débil que ha conocido que no quiere lastimar.