💖 EXTRA II 💖

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Olivia

Decir que tengo una vida perfecta, sería una mentira. Ya que nada es perfecto en este mundo, pero si les puedo decir que soy inmensamente feliz. Me siento completa, siento que encontré mi misión en esta vida, siento que mi paso por el mundo no fue en vano. 

Tengo una hermosa familia, tengo unos hijos hermosos, tengo un marido que amo. Analizo mis palabras y es inevitable pensar en lo afortunada que soy. 

¿Cuántas personas son infelices? ¿Cuánta gente hay sin amor? 

Soy afortunada de tener todo lo que tengo y  estoy muy agradecida. Por supuesto que hay cosas que no están tan buenas, en la familia hubo algunos problemas, pero es parte de la vida. Las rosas son preciosas pero tienen espinas, el durazno es delicioso pero tiene pelusa. Siempre habrá algo que corte. Pero imaginemos que todo fuera ideal, el mundo sería muy aburrido. 

En mi familia, no falta amor, no falta respeto, dignidad, nobleza. Y eso es algo que muchas personas envidiosas lo quieren sabotear. En todos estos años de matrimonio, pasamos cosas complicadas con Brando. En todos los sentidos,  pero aquí estamos, luchando por nuestro amor por nuestra familia. 

Tengo la triste noticia de compartir que hemos perdido un embarazo, estaba muy ilusionada con ese niño en camino. Pero al parecer nuestro destino no era estar juntos, la naturaleza decidió que sigamos caminos distintos. 

Nos choco mucho con Brando, iba a ser nuestro cuarto hijo, el más pequeño de nuestra familia. Pero no pudo ser, estaba ilusionada a más no poder. Pero me duro poco esa ilusión, cuanto estaba de siete meses los médicos nos informaron que era probable que el bebé solo este con nosotros unos días. Me dieron la posibilidad de abortar, pero de ninguna manera lo iba a hacer. Los meses siguientes ya no eran lo mismo, estaba en mi esa melancolía, esa tristeza. Pero también sabía que este bebe, iba a ser nuestro angelito. Sus hermanos estaban muy emocionados, todos en la familia lo esperábamos. 

Pero finalmente llego ese día, rompí bolsa. Toda nuestra familia estaba en el hospital, no falto ninguno, hasta vino Sammy de Alemania con sus hijos. Vera vino con León en su vientre, Sofi con su bebe recién nacido. Todos estamos unidos, mi marido jamás se  fue de mi lado, siempre sostuvo mi mano. 

El parto fue por cesárea, ya mi cuerpo seguido del embarazo de mi tercer hijo, no podía más. Los médicos me programaron la cesárea y así fue. Todo sucedió en un abrir y cerrar de ojos, tenía a Brando a mi lado con el pequeño Rafael en sus brazos. Los médicos tuvieron que ponerle una especie de turbante en su cabecita, ya que su mollera no se había terminado de formar. 

Ese momento jamás me lo voy a olvidar, su rostro, sus pequeños ojos, sus manitos, su respiración, como le latía su pequeño corazón, todo esto quedo grabado en mi corazón, en mis recuerdos. 

Pero esto también es parte de la vida, estas son las espinas de las rosas, estas son las cosas que no son tan lindas. Pero no por eso uno debe bajar los brazos, teníamos tres hijos que amar, teníamos una familia y Rafael siempre será parte de los Harrit. Solo estuvo con nosotros por cinco días, luego se despidió y fue un momento inolvidable. 

Recuerdo cada momento y es inevitable soltar mis lagrimas acumuladas, ya pasaron dos años desde que Rafael no está entre nosotros. Fue duro, pero supimos salir adelante, como familia, como matrimonio. Y eso es lo más importante.

-Hola bonita mía -siento las manos de Brando alrededor de mi vientre.

-Bonito -giro mi rostro y lo observo, su rostro sigue igual, apenas tiene algunas arrugas, pero son mínimas. Beso su mejilla. 

-Vivimos momentos de todo tipo cariño, felices, tristes, buenos y malos. Pero aquí estamos, al pie del cañón. Y siempre juntos, no quiero que volvamos a discutir, odio estar paliado contigo. 

-A mi tampoco me gusta estarlo, no puedo ignorarte, ni estar enojada contigo. No me gusta que durmamos dándonos la espalda. 

-Joder, no -esta semana estuvimos discutiendo muchísimo.

-¿Maridos? -me regala esa sonrisa que me derrite.

-Maridos -besa mis labios y me acerca más a su cuerpo. No encontramos en el jardín de nuestra casa, nuestros hijos están en sus respectivas actividades y solo somos Brando y yo. El personal tiene su día libre, bien merecido. Me acomodo sobre su cuerpo y apoyo mi cabeza en su pecho. 

-¿Estabas pensando en Rafael? -asiento con mi cabeza, me acurruco aún más. Sus brazos rodean mi pecho y aquí es dónde me siento en mi hogar, protegida y amada. 

-Nunca olvidare su rostro, quedo gravado en lo más profundo de mi corazón. Pero ahora es nuestro angelito, tal como su nombre. El ángel Rafael -una lágrima se me escapa, pero Brando la sostiene con su pulgar. 

-Gracias por estar a mi lado, en lo bueno y en lo malo -beso sus labios.

-Prometí siempre estarlo y pienso cumplirlo, hasta mi último respiro.

-Ahora solo disfrutemos de nuestra compañía, mañana debemos volver a la rutina.

-Esta semana tenemos el viaje a Argentina -me recuerda mi marido. 

-Mis padres estan muy emocionados, ya prepararon la casa. Ninguno de nuestros hijos armo su maleta, mañana pienso poner un poco de orden en esta casa -se le escapa una pequeña carcajada.

-Esa es mi mujer. 

-Me preocupa Bell, esta muy triste, observo rencor en su mirada. Ella no era así, este chico la lastimo muchísimo. A veces me recuerda a mi con Benjamín.

-Ni me lo menciones, estoy que hecho humo. Se metieron con mi princesa, mi pequeña bonita. 

-Eso ya lo se y se lo dejaste bien en claro. 

-Joder, que no fui el único. Sus tíos supieron ubicarlo y ni te menciono a sus primos. 

-Amo a nuestra familia. 

-Formamos algo hermoso, ¿Quién lo iba a decir?. Pensar que con mis hermanos sufrimos tanto, ahora solo vivimos el día a día, amando a cada uno. 

-¿Quién iba a decir que te ibas a volver tan tierno y reflexivo? -es inevitable aguantar la risa, ambos reímos. 

-Tu fuiste la causante, joder, no me importaba nadie. Y ahora solo puedo pensar en ti y en mis hijos. 

-Te amo mi amor.

-Yo te amo a ti, más que a nada en este mundo.

-Tengo ganas de hacerme un tatuaje -creo que corte el momento tierno, su rostro se tenso de golpe. 

-¿Qué te gustaría hacerte?

-Es una sorpresa -me hago la misteriosa. 

-Luego de nuestro viaje, podemos pedir un turno en mi lugar.

-Joder si. 

-Me dejas intrigado bonita.

-Solo espera, tu no vas a ser el único en llevar al hombre de nuestros hijos y el mío. 

-¿Te vas a tatuar mi rostro?

-Quizás -ambos reímos. 

-Joder -carcajeo más fuerte. 

-Venga ahora quiero mimos y besos -me acurruco más todavía. 

-Claro que si mi amor, pienso adorarte durante toda la noche y el resto de nuestras vidas. 

🌺👄🌺👄

Mis bonitos hermosos este es otro EXTRA de esta hermosa historia, espero que les guste. También deseo que todos estén muy bien, muchas gracias por leerme, por comentar y votar. Por seguirme en mis siguientes libros y por mandarme esos mensajes hermosos. 

Los adoro Bonitos 





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