BONITO

Capítulo 28

-Melody por favor, deja de llorar. Estuviste toda la noche llorando y esto perjudica al bebe -intento calmar a Melow, pero es imposible. Desde que llegamos que está tirada en la cama llorando sin parar; Brando vino y ni a él lo escuchó, Lili intentó animarla pero nada. Me estoy preocupando,  ya que no me quiero imaginar cómo estuvo durante los días anteriores. 

-Olivia, estoy cansada. Nunca me cuenta nada, nunca lo comparte conmigo. Cuando le pregunto respecto a sus viajes de "trabajo" siempre me dice lo mismo, "son viajes de trabajo Melody, nada más". Y luego se va o cambia de tema.

-Melody por favor, tienes que calmarte. Cariño así no puedes estar -le digo. Ya no sé qué más hacer. Más tarde llamaré a mi hermano, para ver qué le sucede al capullo.

-Olivia, quiero estar un momento sola, por favor -voy a respetar lo que me pide, pero le voy a traer un té.

-Bueno, pero voy a traerte un té.

-Gracias Olivia, en cuanto me estabilice te llamo. Pero necesito pensar -simplemente asiento con la cabeza y le doy un beso en la frente y una caricia en su panza.

Una vez que estoy fuera de la habitación, me encuentro en el pasillo del segundo piso, sola. El cuarto de los niños está en este piso también, pero observo que la puerta está cerrada, quiere decir que están abajo.

Bajo las escaleras y me encuentro en el salón a Brando con los peques. Decido no mirarlo a él, ya que estoy enojada y no quiero andar diciendo cosas que no son. Los niños están dormidos en su pecho, él se encuentra con la computadora, que raro...

Cuando llego a la cocina, comienzo a hacer un té para Melody, uno que me recomendó el médico. Las chicas me quieren ayudar, pero les digo que estoy bien. Luego coloco una bandeja sobre la mesada, apoyo el plato y luego la taza. A un costado coloco unas barritas de chocolate y una servilleta; coloco el té en una taza. Comienzo a preparar un té para mi y me retiro.

Cuando paso por la sala, observo que Brando no está y los peques tampoco. Seguro se fue a su oficina y los pequeños deben estar durmiendo en sus cunitas.

Cuando llego al segundo piso, le toco la puerta a Melody y le dejo sobre la cama la bandeja. Por suerte ya paró de llorar, pero está tan triste que me parte el alma verla así. Pero ella me pidió espacio y bueno, se lo voy a respetar.

-Gracias Olivia, te amo -dice bajito.  

-Te amo Melody y ya sabes que estoy para lo que necesites, llámame cuando estés lista.

Simplemente asiente con la cabeza.

Cuando salgo de la habitación junto a mi super taza de té, decido ir al jardín a pensar; por suerte la noche está agradable. Apenas salgo, me encuentro con Toby correteando por todo el jardín. Es tan hermoso y creció tanto desde que estamos juntos.

Me siento en mi lugar favorito, el jardín se encuentra vacío, lo único que escucho es a Toby correr y el sonido de la fuente de agua junto a la pileta. Me siento y me acurruco junto a la frazada. Observo el horizonte y dejo que mi cabeza se vaya lejos por un rato.

Pero no pudo irse tan lejos, ya que mi celular comienza a sonar. Por un momento pensé que era Melody, pero cuando observé la pantalla vi el nombre de Brando. Decidí no contestarla, además siento que me está mirando desde algún lado. Pero no tengo ganas de girarme y encontrarme con él.

Tiempo después, escucho unas pisadas fuertes por el pasto. Es obvio que es Brando, escucho su fuerte respiración.

-Olivia, ¿por qué no me contestas el teléfono? -se sienta en la silla frente a mi.

-Porque estoy enojada y no tengo ganas de discutir.

-¿Y por qué estás enojada Olivia?

-¿Qué sabes de mi hermano, Brando? -lo estoy mirando directo a sus ojos. Noto que su semblante cambia por un momento, pero el muy inteligente cambia su cara, pensando que yo no me di cuenta; pero obvio que me doy cuenta.