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Cuando regresó a su departamento Minghao aún estaba ahí. 

—Me gustaría no tener que escondernos de la gente, de nuestro hogar—murmuró la mujer acurricandose contra Jun, ambos en el interior del coche de ella. —pero aún eres demasiado joven. 

Y demasiado gay.  Pensó con algo de humor lográndose una pequeña sonrisa para si mismo.  Porque en realidad él nunca se sintió atraído por ninguna mujer, su primera erección se la había regalado Hong Joshua, cuando este aún le hablaba, la primera vez que llegó a Corea. 

El que fuera gay no hacia ni mejor ni peor su situación, quizás para los demás si, ya que si él dejara claro que no sentía ninguna atracción por las mujeres entenderian un poco su desagrado a las acciones de su maestra.  Pero su madre se sentiría completamente decepcionada.  Claro que la homosexualidad era bien aceptada para su madre, mientras que no fuera alguno de sus hijos. 

¿Que diría su profesora si se enterara?  ¿Ella lo dejaría en paz? 

—¿Mi edad importa? — preguntó más para si mismo que para ella.

Ella lo miró por un largo momento, su lindo rostro mostrando una clara seriedad en el momento mezclado con una preocupación. Dios, Jun la empujaría lejos mil y un veces si pudiera. 

—Si realmente nos amamos... — ella dijo, completamente segura de que eso era verdad.  —No importa. 

La mujer tomó mano de Jun entre la suya, su mirada repleta de un curioso enamoramiento.  Si tan solo tuviera el valor de empujarla e irse, si tan solo fuera tan fácil como decir que no y apartarse. Cerró los ojos y apretó el estómago para contener las náuseas, se acercó y besó su mejilla en un gesto tierno para que ella estuviera feliz y se fuera pronto. 

Un celular sonó y la profesora hizo una señal de espera para tomar la llamada, ella no se movió de ahí, su rostro cambió y Jun logró comprender de quien era la llamada. 

—Hola, amor— El esposo de su maestra.  —estoy cenando afuera con una amiga... Ya, sabes que me encantaría salir contigo, yo también te extraño...

"Pobre hombre" Pensó Jun. "Pero...  Si él pudiera controlarla yo no estaría en esta situación"

"Eso es machista" Dijo una vocecita por debajo de sus pensamientos. 

"A la mierda con eso"

—Adiós amor, te amo— ella colgó, Jun le restó importancia, la mujer pareció no notar el desinterés de Jun, ella lo tomó de la mano y le sonrió.  —no estés celoso, Junnie.

—regresaré a casa, tengo cosas que hacer.

Y solo se fue. 

¿Minghao sentiría asco si supiera que la mano de Jun estuvo sobre la piel de su profesora?  ¿Sentiria asco de Jun?  De cualquier modo ¿que lo había hecho sentir tan mal?  ¿Que lo hizo sentir peor que antes?

"Te amo"

Ah, era eso. 

...

Leyendo sus comentarios me siento tan mal por el Jun de la historia. Pero pues ni modo, es lo que toca :/ ni como defender.

Íntimo [JunHao]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora