MARTÍA *She used to be mine*

CAPITULO 38

Maria

Tenía muy claro lo que estaba haciendo, hasta hace un minuto.

Reconozco que solo he podido resistirme durante 30 segundos. Pero es que al sentir su boca me ha recordado tanto a casa...
Y yo ahora en vez de estar morreandome con Pablo debería estar preparando mis cosas para ir a Tarrasa, mañana entramos en la casa. Dios no puedo tener mas ganas de volver a entrar, verles a todos, abrazar a Marta...
Joder, MARTA!!

-Para- digo con mi boca aún pegada a la suya y le empujo el pecho, pero se resiste y me muerde el cuello. Le aparto las manos de mi culo para que me deje en el suelo y sigo empujandole.

Como puedo ser tan gilipollas? Estaba tan jodidamente agusto discutiendo con él sobre todo lo que hemos podido que me he olvidado por completo de ella. Y juro que ha sido el único momento que la he sacado de mi mente desde que salí de la academia.

-Que pares coño!- le grito finalmente y me suelta el cuello.
Me mira ofendido y con los brazos en el aire.
-Que te pasa ahora?- intenta cogerme la mano pero me aparto y cambio mi posición para que no pueda volver a acorralarme contra la pared.
-No puedo- empiezo a dar vueltas tirandome del pelo. Es que...no me entiendo muchas veces de verdad.
-Que quieres decir?
-Ya te lo he dicho todo Pablo, y no he cambiado de opinión.
-O sea que vas a tirar a la basura tantos años de relación por haber follado un par de veces con una tía que conoces hace dos meses? Me estas diciendo eso?!- grita.
Me hierve la sangre al escucharle, no ha entendido nada, y me da pena, mucha pena.

-No has entendido una puta mierda, ella...
-Que no?!- me interrumpe- es que a caso crees que cuando salga vais a tener algo?- se empieza a descojonar el solo y cierro los puños a mis costados- no María. Ha sido un polvo pasajero, y tienes suerte de que te esté perdonando tía, no cualquiera lo haría. Seguro que su novio no lo hace y que ella te termina odiando por destrozar su relación, y te vas a arrepentir mazo de todo.

Cuando termina de hablar siento como mi respiración está agitada de la rabia que tengo por dentro. Que una persona que significa tanto para mi me diga esas cosas me parte en dos.
Las lagrimas amenazan con escapar de mis ojos, y me niego a que me vea llorar.
-Sabes? Aun que tuvieses razón, y ella cuando salga me mande a la mierda, que no va a pasar, aun así no volvería contigo, porque eres un puto gilipollas de mierda!- le saco el dedo y salgo de la habitación dando un portazo.
Cojo las llaves del coche, el móvil y salgo de la casa, ya sin contener las lagrimas.

-Afri?- digo cuando oigo un sonido al otro lado del teléfono.
-Dime cariño, que estaba haciendo la maleta- joder, la maleta, no la he cogido.
-Puedo ir a tu casa?-
-Claro amor, estas bien?- pregunta cuando nota mi voz rota.
-No.

Marta

No puedo dormir. No paro de dar vueltas en la cama y aun así no termino de estar cómoda.
Estoy realmente nerviosa por lo que pueda pasar mañana. A ver, obviamente va a ser bueno todo, pero sigo nerviosa.

Mientras examino el techo, no puedo evitar escuchar unos ruidos al fondo de la habitación que despiertan mi curiosidad. Pueden venir o de la cama de Alba o de la de Famous, no hay otra.

Miro a las camas que están a mi vista, y de las que veo, todos están tranquilamente dormidos, salvo una que veo vacía. La de Julia.
Illo illo que esta pasando?

Intentando asomarme a las camas que no veo desde mi litera, casi me pego una hostia.
Marta, no seas torpe, sé una nija, no llames la atención, sé invisible.

Son sonidos como...gemidos? No se, igual tengo mucho sueño y me lo estoy inventando todo, pero igualmente bajo silenciosamente de mi litera sin moverla mucho para no despertar a nadie, que duerma abajo.

Comienzo a caminar de puntillas en la oscuridad con cuidado de no hacer ningún tipo de ruido, acercandome a la cama donde claramente, ahora sí, veo la silueta de dos personas bajo la sábana.

-Que haces?-me susurran y me tocan el hombro desde atrás provocando que pegue un brinco y chiye como una psicópata.

-Ahhhhh!!-Grito y me doy la vuelta, entonces Julia se asusta también y comienza a gritar conmigo.
-Joder! MARTA! Que pasa?!- todos se levantan de sus camas aterrados y alguien enciende la luz.

Que cojones acaba de pasar?

Miro a Julia con los ojos como platos y la mano en el pecho para que no se me salga el corazón. Y ella me mira a mi como si estuviese loca.

-Que coño pasa?!- pregunta Miki acercándose a nosotras- estáis bien?
Las dos asentimos con la cabeza.

-Que hacías?- me pregunta Julia, y yo, tratando de articular palabra, miro hacia la cama de donde provenían los ruidos, y veo a Alba y a Natalia mirándonos con la boca abierta.
Joder, la que he liado en un momento.

-Nada, iba al baño...- miento.
-En dirección contraria?- me señalan la puerta, justo al otro lado y yo asiento.
-Marta, te encuentras bien?
-Si, si. Y tu que haces? Que casi me matas de un susto.
-Yo venía del baño, por la puerta...- me señala de nuevo la puerta para recordarme que yo andaba para el otro lado justamente.
-Ya, lo he pillado, estaba dormida vale?- digo y se ríe.
-Sois conscientes de que casi provocais el paro cardiaco a toda la habitación?- nos riñe Miki apagando de nuevo la luz.

Vale. Genial. No he podido ser mas discreta, como siempre.

Pero tenía razón, no estoy loca. En esa cama estaban pasando cosas...

Me empiezo a reír yo sola de la situación tan horrible, y Julia se pone de puntillas para asomarse a mi cama.

-Cariño, te preparo una tila? No estas bien...- me vacila y le doy con la almohada en la cara