CAPITULO 2.12

818 55 11
                                    

Marta

Sus besos no me dejan terminar la frase, e incluso cuando habla ella, lo hace sobre mis labios.

-Sabes que puedes venir a casa, no?- insiste la rubia por quinta vez.

Asiento provocando el roce de nuestros labios, y ella aprisiona mi nuca para hacerlo más profundo.

-Y aún así piensas dejarme allí sola, con esa cama tan inmensa, con esa cantidad de cervezas que tengo, con...

-Mari- la freno- no seas mala- en el fondo sé que hacía eso por mí. Aún está preocupada por mis insomnios, a pesar de lo mucho que le he insistido en que el viaje me ha ayudado a relajarme. Me lo tomaré con calma, pero tengo una casa y debería empezar a darle uso antes de que Alba me eche. Y ahora después de lo que me viene debo empezar a dormir sola más que nunca.

-Como tú quieras- se deshace de nuestro abrazo y camina enrrabietada hasta el salón.
Tiene exactamente tres añitos.

La sigo con una risita al ver su cara de frustración mientras se despide de Alba.

-Me piro rubia- dice dándole un beso en la coronilla. Esta levanta la cabeza del respaldo del sofá para mirarnos.

-Ya? No te quedas a cenar?-

-No, aquí no se me quiere lo suficiente- se queja mirándome de reojo. En serio? Ahora vamos con esas?

-Yo no te he dicho que no te quedes, te he dicho que me tengo que quedar yo- le doy una palmada en el culo para que no encuentre mala baba en mis palabras, y aún así niega rotundamente. Más cabezona no la hay.

No quería que se fuera. No ahora. Tan solo quedan dos días, y por muy cerca que hubiéramos estado esta semana, ahora nos tocaría estar lejos.
Aún así lo hizo, y la charla que tuve con Alba antes de irme a dormir no me ayudó mucho para esa tarea.

< La miraba sin saber muy bien lo que esperarme. Es una caja de sorpresas, y por mucho que a mí me gusten tenía que estar preparada también para las malas noticias.

-Ayer me llamó Carlotta, mi amiga de los Hinds, te acuerdas de ella?- dijo abriendo mucho los ojos. Le rebosaba ilusión por todos los poros, y su sonrisa se me contagiaba sin querer.

-Claro- asentí.

-Pues han estado de gira por Latinoamérica, ahora están en Nueva York haciendo cosas nuevas, es flipante como trabajan- de vez en cuando apretaba su mano sobre mi muslo para que supiera que la escuchaba- están preparando una colaboración con un grupo indie con el que comparten discográfica- siguió- y le enseñaron a su vocalista videos que tienen cantando conmigo. Al principio fue por pura casualidad que les enseñaran un clip en el que yo estaba, pero se interesaron y le acabaron enseñando actuaciones mías- intenté intuir en mi interior cual iba a ser el final de esta historia, pero realmente no sabía lo que pensar- mis amigas les dijeron que tengo que hacer un single antes de que acabe el año y se han propuesto a componer conmigo y producir mi música en América! Es una oportunidad enorme Marta, Carlotta me ha dicho que ese tío tiene miles de contactos y que sus discos han sido Top 10 en ventas durante varias semanas- mi mandíbula rozaría el suelo si no fuese por que mi shock era mayor que mi sorpresa. Era increíble.

-Le dije que el indie no es de lo que tengo pensado para mi música, pero eso no va a ser ningún problema. Me han escuchado y tienen mazo de ideas para mi estilo...- ella continuó hablando, pero mi cabeza ya viajaba por otros sitios, me costaba prestar atención a lo que decía y a todos y cada uno de los detalles que me daba sobre el grupo, sobre sus ideas y sobre lo feliz que estaba. Eso si que no hacía falta que me lo jurara, sus ojos hacía tiempo que no reflejaban estar orgullosa de ella misma. La rubia siempre está tan pendiente de los demás que a veces le cuesta darse cariño a ella misma, y por mucho que yo intente compensarlo, es ella la que se debe prestar más atención.

MARTÍA *She used to be mine*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora