Konoha se distingue por ser verde, tener unos excelentes restaurantes y ser en términos generales, una ciudad que gusta a grandes y chicos, llena de orgullo a los que nacieron ahí y no aburre a los extranjeros.Dentro de la economía de la también llamada "Ciudad entre las hojas", se pueden hallar a las empresas familiares más poderosas de todo el país del Fuego como el Grupo Hyuga, cuyos ingresos suben anualmente 10% gracias a la estrategia del líder y su visión de expandir sus hoteles recreacionales a todas partes. Otro de los grupos más poderosos es el de los Nara, cuya industria de inteligencia artificial ha sido proclamada como el mejor invento luego del ramen y los Sarutobi quienes tienen bajo su poder al periódico Konoha News, la revista Voluntad de Fuego y al canal de TV KS.
No obstante, a pesar de la riqueza que puede sostener la ciudad, las escuelas y universidades son para todos. Los hijos de los millonarios asisten a la misma clase que los pertenecientes a familias regulares sin problema alguno, e incluso se sabe que admiten estudiantes de pueblos pequeños de las afueras de la metrópoli como el clan Hikari, conocidos por ser los guardianes de algo así cono la versión antigua de Konoha y vivir en casas que se elevan por sobre algunos metros del suelo, con techos enroscados en las puntas y tejas rojas o amarillas.
Los Hikari, amantes de la paz y en su mayoría, vegetarianos, tienen una historia muy rica y admirada por muchas familias antiguas como los mismos Uchiha, quienes al igual que los Senju (hoy en día casi extintos si no fuera por la ex alcaldesa Tsunade) son los fundadores de la ciudad.
Por esa razón, no es de extrañar que algunos niños Hikari cuyos padres deciden mudarse a Konoha, se hospeden en el mismo vecindario que los Uchiha y muy cerca de la casa de la ex alcaldesa.
Hikari Meiri admiraba eso de Konoha: la facilidad con la que uno podía integrarse y es más, estaba muy agradecida con el alcalde Kakashi por la oportunidad de crear puestos de trabajo en alianza con las empresas privadas. El caso era que Meiri no solo vivía en el complejo Uchiha alquilando habitación, también trabajaba en la empresa de seguros y alarmas contra robos que esa familia dirigía. Estaba rodeada de gente de rostro fino, mismo color de ojos y cabello; se sentía en casa y capaz de mezclarse.
En la universidad, Meiri estudiaba arte clásico, pero los cursos básicos los llevaba con futuros profesores de artes marciales, con chicos que querían ser veterinarios y hasta con un par que eran buenos en números, como Shisui e Itachi Uchiha.
A Shisui lo había conocido al ser vecinos y ayudar juntos a algunos ancianitos que regresaban del mercado con cargas pesadas. Además solían practicar algunos estilos de pelea en el bosque trasero del vecindario, pues el área Uchiha era la más alejada de la ciudad y la más grande también. Itachi había llegado a su vida por el primero. El día que conoció al famoso Itachi, rostro de la tienda departamental He's mine, había sido a la medianoche en el cumpleaños número 25 de Shisui. El chico había decidido celebrar el hecho que al fin había optado por hacer algo con su vida tras tomarse muchos años sabáticos y como era de esperarse, a la reunión invitó a mucha gente desconocida para ella, entre ellos a su mejor amigo y compañero de viajes por 2 años antes de sentar cabeza: Itachi.
Itachi era callado, pero tenía una mirada dulce que transmitía todo lo que sus labios silenciaban. A Meiri le había parecido cómico ver cómo algunas chicas (incluso chicos) suspiraban por él cuando el muchacho apenas lo notaba. Tenía perfil bajo para ser modelo, eso le había dicho en los primeros cinco minutos que lo conoció.
-¿He's mine, cierto?
Itachi que bebía un jugo de frutas, distraído, mientras Shisui había ido por algunos bocaditos, casi se atoró.
-¿Te lo dijo?
Ella había negado de inmediato para contarle lo fácil que había sido reconocerlo por tener un rostro muy bonito y él, sin poder evitarlo, había apartado la vista sonrojado.
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Kimi ga suki | Tú me gustas
FanfictionSon escasas las cosas que le gustan a Sasuke, y al contrario son muchas las que le desagradan. Tiene un sueño, o más que eso, una ambición: Asesinar a un hombre. Es por esa única razón que no está dispuesto a morir y mucho menos de una forma nada di...