-¿Cuando iban a decirmelo? ¿Cuando este muerta?
¿Acaso no soy yo la enferma? Mamá dí algo, papá, Sara. ¿porque, porque lo hacen?- Grité mientras jalaba mi cabello y me golpeaba los muslos en un ataque de histeria.-Ya lo sabes Lia- interrumpió Sara
Ahora entendí la llenura que sentía a cada momento, la acidez que me hacía doblarme, los vómitos con sangre que hace tiempo venia ocultandole a Emir y a Steven.
Ahora todo tenía sentido.
Mis padres no podían dejar de llorar.
-Si, ya se que me voy a morir, si hermanita lo se muy bien, pude haber muerto ya, sin saber que fue lo que mató- le respondí a Sara al mismo tiempo que caía de rodillas al piso llorando.
La noticia me hizo pedazos, lloré tanto como me fue posible, me tiré al suelo, maldije mi vida y luego me arrepentí.
-Ya cepillame los diente mami-
-Aqui voy mi amor, o mejor ven tu, vamos abraza a mamita
-Mami, de verdad vas a irte al cielo, mami es cierto eso te iras al cielo, mami diga que no, tu te quedarás aquí
-Claro que si mi amor, mami no va irse a ni un lado sin ti.
La pregunta me mató, sin duda alguna Itzel estaba al tanto de eso, ella lo entendió muy bien. Iba a morirme.
Miles de personas luchan a diario contra esta enfermedad, mientras unos se preocupan por lo que van a ponerse, otras luchan con esta terrible causa, que cobra vidas.
Ahora estaba yo en esa lista, estaba entre las personas que lucharian la terrible batalla contra el cáncer sin saber si la ganarian o no.
Me devastaba el hecho de saber lo que venía, era joven, era madre, faltaban solo unas semana para terminar el año y me mataba el pensar lo que en esos dias podia pasarme.Estudié mucho, quería pasar sin quedarme en ni una materia, fueron dias muy duros, tuve que organizar mi tiempo para mi hija, el estudio, y las citas con el doctor, que me veia muy seguido para asegurarse de que me encuentre bien.
-Lia, ¿vendrás mañana?
-¿Tengo cita?
-No pero quiero verte Lia, dejame invitarte un café en la tarde
-Levent debo ir a clases
-No tengo consultas Lia, al menos dejame verte unos minutos antes de que entres al colegio
-Esta bien, nos vemos mañana al medio dia.
Levent se volvió un fiel amigo, lo veia a diario, solía decir que sea fuerte que en el momento en que lleguen los dolores me ingresaria y me ayudaria.
Por otro lado estaba el dulce y pequeño Emir que me ofrecia la cálidez de sus recien cumplidos 16 años, siempre con sus bromas, sus detalles, su gran esmero por hacerme reir a cada momento, ese aire juvenil que me ofrecia Emir no lo cambiaria por nada de el mundo.En cambio Levent, ya con su titulo en mano, su estilo de vida, su carro y consultorio privado en una clinica me ofrecia algo más que risas en el recreo.
-Los dos son un buen partido Lia- me dijo Lunita riendo
-Luna tiene razon, aunque si fuera tu me quedaria con Levent- acotó Camila mientras comía sus obos
-¿Pero que dices Lu? Ni uno me interesa
-No mientas Lia- prosigió Cami.
Te gusta el doctor pero amas a Emir.-Dayra dijo que te vió bajar del auto del doctor- dijo Lu, con su pícara sonrisa
-¿Que? Claro que no, mataré a Dayra
-¿Matarás a quien? Intervinó Malena que acababa de llegar a nuestro lugar
-A mi porque- murmuró Dayra
Todas se hecharón a reir, Lucía no estaba y fue mi escape de la situación
-¿Han visto a Lucía?
-No, al que si hemos visto es a tu doctor- repuso Malena
Eran las mejores amigas del mundo, las adoraba con mi alma. Agradecí que conmigo no sean falsas como decía Emir.
Me encontraba bien por eso dias a pesar de que notablemente bajé de peso y sin querer tenía enormes ojeras, de vez en cuando tenía fiebres y dolores musculares.Por esos días Hande apareció nuevamente para dañarme el genio, ella y Ana estaban empeñadas en alejar a Emir de mi y sus intentos fallidos las frustraban a menudo.
Decían que por culpa mia Daniel y Emir dejaron de ser amigos, a su parecer los dos estaban enamorados de mi. En realidad si estaban alejados pero no era por mi. O no lo sé.
Jordan en un par de ocasiones me mencionó que yo le atraía pero no se meteria conmigo porque decía saber lo mucho que Emir me quería.
De la misma manera Josue, pero el argumentó que no dejaria a Alison por mi, porque según el al final terminaria cambiandolo por Emir
Pero Daniel núnca me dijo nada y estas dos arpías me fastidiaban la vida.
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Eterna.
Short StoryVa más allá de cualquier cosa, si la vida me pedía, mi vida misma se la daba. Con solo ver sus ojos, decidí entregarle mi vida. Si, era la nueva del salón, pero ¡joder! La estaba esperando. Fue la primera mujer ajena a mi madre, que tras sonreir pro...