Respira, suspira y repite. {Aristemo}

Aidan. {Amigable17}

Aidan Vallejo.
18. Diciembre.

No hay peor ironía que sentirse solo cuando tienes mucha gente a tu alrededor. Mis padres trabajan todo el día, así que la casa es mía la mayor parte del tiempo. No tengo hermanos, ni primos o alguien que me acompañe. Estoy yo con mis aparatos: mi tableta, mis consolas de videojuegos, mi computadora y teléfono. No puedo escudarme, soy algo geek. Pierdo mi tiempo viendo videos en YouTube sobre cómo programar, o cosas de mis juegos. Tengo mucho tiempo. La escuela es sencilla. Lo tengo todo, pero algo me falta, lo siento en mi estómago. Veo las parejas que hay en la escuela y me dan envidia, quisiera algo así, alguien que se preocupe por lo que hago o qué me aplauda lo que puedo hacer en una computadora. Las mujeres me rechazan, odian a los tipos como yo, al parecer no les gustan muy inteligentes, o las aburro. Y los hombres es lo mismo, no se fijan en mi.
Aristóteles Córcega pasa delante de mi, es muy atractivo, el es mi persona favorita que puedo ver en los recesos, hoy tiene puesto su uniforme de basquetbol, aunque tiene lastimado el brazo sigue siendo un excelente capitán, la temporada había terminado así que solo los juntaba para entrenar. El estúpido de Cuauhtémoc lo ignora, no sé qué le ve Aristóteles que lo trae como su perrito, yo no lo ignoraría, estaría pendiente de él, de cada una de sus palabras. ¿Que tiene ese renacuajo? También Jerry estuvo detrás de él. Me planteé la teoría de que les da algo de comer para traerlos así de estúpidos, es lo único lógico que cuadra en mis explicaciones.

-¡Cuauhtémoc espera!- Grita Aristóteles. Me pongo en medio de su camino y me sonríe. Este chico podía sonreírme todo el tiempo que quiera. -Hola...¿Amigable? Disculpa en serio no se me queda tu nombre.

-Aidan, me llamo Aidan.- Digo nervioso. Se ve tan bien en uniforme que quisiera sacarle una foto, seria una más a mi colección. -Me preguntaba si tú... si tú y yo. ¿Salir? Yo te invito, a donde me pidas.

-¿Neta? Wow, sería súper.- Se ilumina mi rostro, acomodo mis gafas. Y antes de que pueda decir algo rompe mi burbuja de felicidad. -Pero tengo planes con Temo.

-Cuando no estes ocupado, puedo esperar.

Aristóteles me ve y me da otra sonrisa. Me da un abrazo y siento que me derrito al sentir sus bíceps. Estoy sonrojado, quiero decir otra palabra y sale corriendo para alcanzar a Temo. Los veo discutir, están cerca de la salida, Temo manotea y se da la vuelta, Aristóteles se regresa para tomar su mochila y corre por el. ¿Qué te pasa Temo? Yo quisiera estar en tu lugar y que Ari me ruegue así. Mi reloj vibra con una notificación:

Número desconocido.
Hola ex-compañero. ¿Por que esa cara?

You.
¿Ex-compañero? ¿Me estás viendo? Quién eres, y cómo tienes mi número.

Número desconocido.
Tranquilo fui tú compañero de clase, y si, logro verte
estoy en la entrada. Voltea .

Alguien en moto me saluda, tiene un casco polarizado. Sé lo quita y veo a Jerry. Empiezo a sudar. ¿Tiene mi número? ¿Se acuerda de mi?

Jerry😍❤️.
¿Una vuelta en moto y platicamos?

Me subo a su motocicleta y hace que lo rodee con mis brazos para poder sujetarme a él, me da un casco. Eso es tan emocionante.