El Audi de Robert aún estaba en el parking del club así que continuamos andando en dirección Allianz Arena.
-Oye, ¿Le darás mi camiseta a Mario para que me la firme? -Pregunté entusiasmada-
-Se la darás tú cuando vengas al entrenamiento, ¿No quieres que te la firme yo también?
-A ti te voy a ver todos los días, no la quiero. -Bromeé-
-¿Todos los días? -Preguntó extrañado-
Por un momento había olvidado que la relación entre Robert y yo era sólo de amigos y que él era un hombre muy ocupado y no tendría tiempo para mí, de hecho, a mí no me tendría que dar su tiempo, para eso ya estaba Anna.
Agaché la cabeza avergonzada y Robert separó su mano de la mía para pasarme su brazo por el cuello.
-Nos veremos todos los días sólo si tú quieres. -Dijo él tras ver mi cara sonrojada-
Levanté la mirada del suelo y pude ver una bonita sonrisa dibujada en su boca, verle sonreír de esa manera era una de las cosas más bonitas que había visto nunca.
Eran las 20:15 cuando llegamos al estadio para recoger el coche de Robert y cogidos de la mano entramos al parking. Cuando me percaté de que alguien del club podía vernos separé mi mano bruscamente de la suya, Robert se asustó y me miró.
-Puede haber cámaras. -Susurré-
Robert se limitó a reír mientras metía sus manos en los bolsillos de su pantalón. Mientras nos acercábamos al coche pude ver como Mario bajaba las escaleras vestido con unos pantalones negros y una chaqueta gris y se acercaba a su Bmw.
-¡Robert!
Inconfundible, su voz. Mario desvió su camino acercándose a nosotros.
-¿Fichas mañana? -Preguntó dejando su mochila Nike en el suelo-
Robert asintió y Mario continuó hablando.
-¿Has hablado con Marco?
-Sí, todo listo para cuando venga.
-Bien, cuando llegue a casa hablo con él y hablamos, ya ha tenido que acabar su entrenamiento. -Concluyó Mario mirando su reloj-
Se despidieron con una palmada y nos montamos en el Audi R8 mientras veía como Mario abría su Bmw a unos metros.
-¿Va a venir Reus a Múnich? -Pregunté extrañada a Robert mientras le guiaba hasta mi casa en coche-
-Tú nunca has escuchado esa conversación, ¿Entendido? -Dijo concentrado en la carretera-
Llegamos hasta mi casa y Robert aparcó el coche al lado de mi puerta y sacó mis bolsas de su maletero.
-Oye... Mañana tengo que ir a firmar, ¿Quieres venir? -Preguntó-
Asentí contenta pero Robert continuó.
-Será algo más oficial... Saldrás en la televisión. Ya sabes, van a confundirte. -Dijo preocupado-
Agaché mi cabeza preocupada mientras cogía las bolsas y Robert puso su mano en mi cuello haciendo que le mirase.
-Recuerda, sólo si tú quieres. -Dijo mientras se acercaba lentamente a mí-