Capítulo 40 -Será un bonito reencuentro

2.4K 129 6
                                    

-No, nada. -Respondió Marcel muy breve-

-¿Nada?

-Nada, solo que Anna...

Antes de que Marcel continuara, Marco lo interrumpió.

-Mañana a las diez viene Mario y Ann, Marcel, ¿Me acompañas al aeropuerto?

Ambos giramos rápidamente hacia él y Marcel se acomodó.

-Sí, claro. Mañana ven a buscarme a y vamos juntos.

Marco asintió y Robert caminaba hacia nosotros a pocos metros acompañado de Robin.

Robert extendió sus brazos hacia mi y yo me agarré a ellos, a lo que Robert tiró y me levantó de la toalla de un movimiento.

Robin se tumbó en su toalla aún mojado. De nuevo, los tres amigos estaban tumbados en sus toallas mientras miraban al frente.

Con un gesto, Robert me invitó a bañarnos en el agua, a lo que yo respondí con una sonrisa.

Bajé mis shorts de piscina rosas y lo tiré en mi toalla con mi pie, con tan mala puntería de dar a Marcel en sus piernas.

Marco y Marcel me miraron al instante, mientras Robin jugaba con su móvil y Robert miraba al frente esperandome para ir al agua.

Marcel agarró el short y lo dejó en mi toalla.

-Lo siento. -Dije riendo-

Me quité mi camiseta y la hice un bola, esta vez apuntando mejor y dejandola en el centro de mi toalla junto a los shorts.

Robert se giró y vio como Marcel me miraba atento aun teniendo sus gafas de sol puestas.

Pegó una patada al suelo levantando arena hacia arriba haciendo que cayera encima de Marcel y su toalla.

-¡¿Qué haces?! -Se quejó Marcel mientras sacudía su torso-

Robin apartó la vista de su móvil y Marco miró a Robert.

-Cuidadito, Marcel.

Robert señaló a Marcel con su dedo índice y este apartó la mirada de él con desprecio.

Ajusté mi biquini sin que ninguno de los tres me viera y pegué una leve patada a Robert en su pierna.

Este se percató y comenzó a andar hacia la orilla, a lo que yo le seguí.

* * * *

Después de pasar la mañana en la playa, fuimos a comer, y varias horas después, bajamos a visitar Ibiza.

-¿Te he dicho que mañana a las diez vienen Mario y su novia? -Pregunté insegura mientras caminaba agarrada de la mano de Robert-

-No. -Rió Robert-

-Pues mañana a las diez vienen Mario y su novia. -Reí repitiendo lo dicho anteriormente- Van a ir Marco y Marcel a recogerlos al aeropuerto.

-Qué pena que no lo vayamos a ver.

-¿El qué? ¿A Mario? Podemos verle por la tarde.

-No, no. -Interrumpió Robert- El reencuentro.

-¿Qué reecuentro?

-Coño, el de Mario y Marco. -Respondió Robert elevando la voz-

-Ahhh. -Exclamé- ¿Por qué lo dices?

-Los reencuentros entre Mario y Marco siempre son bonitos. -Rió- Los abrazos que se dan nada más verse y lo felices que son cuando se ven...

-Me gustaría verlo.

-Te recomiendo verlo. -Dijo Robert serio-

-Y, ¿Qué tal se llevan Marco y Ann? -Pregunté curiosa-

Robert pensó su respuesta por varios segundos.

-Bien... por parte de Marco... bien. -Respondió tras varias pausas-

-¿Y por parte de Ann?

Robert volvió a tardar en contestar.

-Ya lo verás con tus propios ojos. -Respondió- Es difícil que te lo explique si no conoces a Ann.

-¿Qué tiene esa chica que todo el mundo no sabe contestar cuando se pregunta sobre ella? -Me pregunté a mi misma en mis pensamientos-

-¿Y qué tal le caes tú?

-¿Vas a preguntarlo todo? -Se sorprendió Robert-

Asentí con la cabeza mientras apretaba su mano con fuerza.

Robert alborotó su pelo mientras pensaba una respuesta.

-Supongo que bien. -Rió- ¿Acaso Lewandowski le cae mal a alguien? -Preguntó soberbio-

-A mi. -Respondí riendo-

-Es broma, olvídalo. -Rió- La conozco desde hace mucho, y aún no me acostumbro a su forma de ser.

-Tengo ganas de conocerla. -Dije convencida-

Robert no respondió a mi comentario y se limitó a asentir con la cabeza.

De tanto escuchar hablar de Ann, cada vez me entraban más ganas de conocerla y hablar con ella, seguro que había algo de ella que aún no me habían dicho. Las risas de Marcel, el respeto de Robin, las pausas dramáticas de Robert...

* * * *

Tumbados en la cama mientras esperabamos a que dieran las nueve y media para bajar a cenar al buffet libre, Robert me enseñaba fotos en su móvil y sus redes sociales.

-Esos fueron los chicos que vinieron al hospital cuando Marco se lesionó. -Dije señalando la foto que Robert me enseñaba-

-Mats y Kevin. -Conretó Robert-

Asentí tras recordar aquella noche y la de jugadores que había allí, cuando pasó a una foto de un chico rubio con unos ojos azules difíciles de olvidar.

-Y este es... -Intenté recordar-

-Erik Durm. -Concluyó Robert-

Ambos nos quedamos mirando la foto varios segundos.

En ella salían Marco, Erik y Robert, bien vestidos con traje y corbata y con unas poses muy graciosas.

-¿Has visto qué ojos tiene ese chico? -Pregunté tras mirarlos un rato-

-Sí, muy bonitos. -Afirmó Robert- Nada comparado con los tuyos. -Sonrió-

Robert levantó su cabeza para mirarme mientras esperaba un beso, a lo que respondí besando sus labios mientras vi como cerraba sus ojos sonriente.

-Vamonos a cenar. -Dije levantandome de la cama-

Robert me imitó y bloqueó su móvil.

Ambos nos cambiamos de ropa y salimos de la habitación dirección al ascensor.

La puerta del ascensor se cerró y Robert se miró al espejo.

-Mira qué pelos llevo... -Se quejó mientras lo intentaba peinar con sus dedos-

-Anda que los mios...

Saqué mi móvil y apunté con la cámara a nuestro reflejo en el espejo.

Rodeé la cintura de Robert con mi brazo mientras este sacaba la lengua posando para la foto.

-Perfecta. -Dije mientras recortaba la foto para ponerla de fondo de pantalla-

Entramos al buffet libre y, tras buscar varias veces a Robin y Marcel, no los encontramos en su mesa habitual. Así que tras seleccionar nuestra cena del mostrador, nos sentamos para cenar tranquilos.

See you again (Robert Lewandowski)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora