With You; (Park Chanyeol)

14

Estás llena de algo que me hace arder con facilidad.

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Yoon

Cuando Chanyeol se fue de mi casa a eso de las 11 de la noche, apenas había podido tomarme el tiempo de leer mi celular.

Jong-dae.
-¿Nos vemos mañana en el café?

No podía evitar que Chen hacía que la emoción recorriera mi cuerpo, después intentando deshacerme de la tensión que había entre nosotros, le dije que sí.

☾

Cuando llegué a la escuela, sobre mi asiento había una cajita de leche de fresa y una nota.
Era por parte de Chen, sonreí como boba al ver ese detalle, después solo pinché el popote en la bebida y comencé a tomármela.
Después de rato llegaron los tres, Baekhyun, Chen, y Chanyeol. Este último me miró sonriente y decidió sentarse a mi lado, pude notar a kilómetros los celos de Chen, su mirada lo decía todo, pero cuando pasó justo a un lado de mi, le dije gracias por la leche de fresa, y de un instante a otro, sus celos habían desaparecido y me sonrió cariñosamente.

-Interesante.- murmuró Chanyeol mientras su mirada iba por cualquier lado, menos hacia mi rostro.
-¿Se te ofrece algo Park Chanyeol?- Dije burlesca.
-No nada, es solo qué ustedes me dan...

Chanyeol lo pensó por un momento, y después de varios segundos en silencio, decidió continuar.

-Me dan ganas de vomitar.
-No seas tan dramático. -Le dije rodando los ojos, y en una oportunidad, le pregunté a Chanyeol:
-¿Ya todo está bien entre ustedes?
-No, Baekhyun intenta reconciliarnos, pero no le hablo en lo absoluto.
-Parecen niñas. -Me reí
-Basta que tú también eres igual de orgullosa.

Y era cierto, en momentos el orgullo no carcomía mi ego.
Durante toda la clase Chanyeol no dejó de observarme, no me resultaba incómodo, nos dedicábamos algunas miraditas y nos reíamos al hacer esto.

-Ey...- Chanyeol dejó un papelito arrastrándolo con su mano hasta llegar a la mía.
Lo abrí y decía:

Te echaba de menos.

Esto me puso roja y feliz, yo decidí anotar algo también.

Yo también te eché de menos, orejón.

Cuando Chanyeol leyó el papelito, comenzó a carcajearse, y el profesor nos regañó.

-¿Quiere compartir algo con la clase, señor Park?
Chanyeol tragó gordo y negó con la cabeza. Yo apreté los labios intentando no reír y me tape la boca, pero el profesor lo noto instantáneamente.

-¿Y a usted qué le causa gracia? Dígalo para que todos nos riamos también.- El profesor ya estaba molesto.

Yo no pude evitar reír y no supe por qué, el rostro de aquel maestro me hacía estallar de risa.
Al ver que él miraba con mucha atrocidad a Chanyeol, no pude imaginar lo que pasaría después.

-Si no piensa contestar, salga de mi clase, señorita Yoon.- Me quedé sin palabra, y me levanté de mi asiento.
-¿Alguien quiere salir también con ella?-El profesor iba a sacar sus sermones esos de: ¿No verdad? Entonces manténgase callados, no interrumpan mi clase... pero para su sorpresa, el chico más alto de la clase, no lo pensó ni 3 segundos, alzó su mano y espetó:

-¡Yo!

El profesor se quedó estupefacto y solo gritó:               -¡Fuera!

Chanyeol y yo salimos rápido, y antes de cerrar la puerta grité:

-¡Su cara era la causa de mi risa!- mi rebeldía no me dejaba quedarme callada.

Cuando cerré la puerta solo escuché algunas risas por parte de mis compañeros.
Chanyeol y yo nos reímos también.

-Te hubieras quedado.- Le dije avergonzada.
-No te dejaría sola, ¿te parece si hacemos algo divertido?

Asentí y Chanyeol tomó mi brazo, me jalo y corrimos hasta la salida.

Salimos del colegio, decidimos ir por ramen, sodas de cherry cola, dulces y cosas de más.
Chanyeol me llevó en su moto a toda velocidad mientras recorríamos las hermosas calles de Seúl, y yo gritaba como loca.

-¿Te quieres divertir?- Reté a Chanyeol.

Él sonrió y me dijo que si.
Fuimos a comprar unos globos, y unas botellas, nos dirigimos a un parque con fuentes salidas del pavimento y comenzamos una guerra acuática.
Le lanzaba tantos globos como podía y él también a mi, corríamos por todo el lugar como niños locos. El clima, el sol, la calidez del momento me hacían disfrutar al máximo todo.
En ocasiones Chanyeol me tomaba por la cintura y me cargaba, después iba y me ponía en el chorro donde saliera el agua de aquellas fuentes, me empapaba toda.

Yo no podía cargarlo a él, pero lo jalaba de las orejas y lo llevaba a mojarse conmigo.
Empapados y con cierto frío recorriendo nuestro cuerpo, volvimos a subir a la moto y otra vuelta dejó que nuestras ropas se secaran rápidamente.
Chanyeol me llevó a un karaoke, pero no pudimos tomar nada debido a nuestra minoría de edad, aún que con nuestras sodas era suficiente.
Cantamos como locos "Oh" de girls' generation, run devil run, y 'got a boy'.

Chanyeol imitaba los bailes y actuaba como ellas, eso hacía carcajearme, entre tanta emoción la garganta ya me dolía.

Bajando la intensidad de la música, Chanyeol decidió poner "Chocolate CherryBomb", una canción particular.

-Por alguna razón esta canción me recuerda a ti, a nosotros.- Dijo sin quitarme la mirada.

-"Cherry"- Dije sonriente.
-Así es.- También sonrió.

Los dos nos sabíamos la canción, yo cantaba la parte de la chica, y él la acelerada parte del chico, el rap. No le costó nada de trabajo.

"Friday feeling deep inside you"-Comencé.
"Algo se siente nuevo en ti"
"Una noche dulce de cereza, chocolate químico"
"Haciéndome volar alrededor del cielo."

Chanyeol continuó:

"Digamos que planee verte a las 3
así que mi corazón empieza a latir desde las 10.
Cuando se trata de citas, no puedo ser estimado, no sé cómo jugar juegos.
El viento se siente lo suficientemente fresco, hoy te miras más bonita.
La escena que miramos juntos, es diferente cuando la miro solo ¿Quieres ir a caminar?"

La canción nos conmovió a los dos y la cantábamos felices, cuando terminó, Chanyeol me sonrió y puso su brazo al rededor de mi hombro, así mismo se recargó en el.
Yo estaba demasiado contenta.

-¿Brindamos? - Dije divertida, tomando mi lata de cherry cola.
Él se levantó y tomó la suya también, las chocamos y bebimos.
Después Chanyeol la dejó sobre la mesita, ahora solo estaban las luces del karaoke rodeándonos y una baja melodía escuchándose.

Él me miró, yo lo miré, las hormigas deambulaban por mi cuerpo. Ya tenía las mejillas color cereza, él me sonreía sin despegar sus labios.

Él se empezaba a acercar, yo me quedé en mi lugar, estaba segura de lo que pasaría después, solo me deje llevar y dejaría que él llegara hasta mis labios, Chanyeol cerró los ojos, yo también lo hice. Su eterno acercamiento era lento, pero eso me causaba miles de sentimientos exprimidos en mi ilusión.

Cuando tan solo estábamos a unos centímetros de distancia...

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