Rojo y Negro.

Durmiendo juntos.

Mo sé despertó abrazando algo extraño, que no conseguía saber que era aunque decidió enfocar su vista con la poca luz que se colaba por las persianas de los ventanales, cuando se dió cuenta que esa cosa suave, dura, desnuda y que respiraba era He Tian se deshizo rápidamente de el agarre. El pelirrojo sin que supiera le agarraba de la cadera y el pelinegro le agarraba a el del cuello.

-¡¿HE TIAN!? ¿¡Qué coño hago yo aquí!? ¿¡Porque mierda estaba yo así con ese subnormal!? Joder, joder, joder. ¡PIENSA!- Pensaba Mo exaltado al encontrarse tan expuesto con He Tian.- ¡ENCIMA ESTA DESNUDO! ¡¿Que me hizo!? Si cuando estaba despierto me besó cuando estaba dormido...¿Me violó? No no no imposible.- Seguía pensando, mientras salia de la cama, cada vez más nervioso tanto que se empezaba a marear.- Llevo ropa.- Eso le tranquilizó un poco.

Salió de la habitación al baño para beber agua, su garganta estaba demasiado seca.

- ¿Que hora es?- Volvió a pensar el pelirrojo.

Recordó que el único reloj que había en casa de He Tian era su móvil. Volvió irritado al cuarto del moreno, visualizó el móvil encima de la mesilla al lado de la cama pero cuando iba a desbloquearlo se despertó He Tian.

- ¿Que haces?- Preguntó He Tian medio dormido, sentándose en la cama dejando a descubrir su pecho desnudo.

- ¡EH! Ah eh esto... Quería mirar la hora, nada más.- Dijo Mo un poco avergonzado.

Mo cogió el móvil del moreno desbloqueando el iPhone Xs y pasando bastante envidia de que el se pudiera permitir ese móvil y Mo no se pudiera permitir ni el más barato.

"8:00"

-¡¿LAS OCHO DE LA MAÑANA!? ¿Cuánto e dormido?- Pensaba el pelirrojo exaltado.- ¿A qué hora me dormí?- Le Preguntó al moreno.

- Te dormiste ayer a la tarde como a las cuatro y media.

- ¡QUINCE HORAS Y MEDIA HE DORMIDO!- Pensaba cada vez más asustado Mo.

Desde que Mo tenía ocho años no dormía más de tres horas es más lo más normal para el era dormir una hora y media o dos horas, la ansiedad causada por su situación familiar le provocaba insomnio.

- Oye ya que estás aquí hazme el desayuno mientras me ducho.- Dijo tranquilo el pelinegro saliendo también de la cama

- Si me pagas más lo haré.- Contestó el pelirrojo frunciendo el ceño.

- Lo haré, precioso~- Decía sonriente He Tian haciendo que Mo se sonrojara y metiéndose en el baño.

Mo estaba haciendo arroz frito con zumo de naranja para que desayunaran los dos, después de eso iría a su casa a cambiarse de ropa pero sobretodo tenía ganas de contarle todo lo sucedido a Xiaoqing.

- ¿Cómo es que he dormido tanto? A ver la cama es mucho más cómoda, que la mía o que el sofá pero no creo sea eso. ¿Es por estar con He Tian? No no no, es imposible que sea eso, IMPOSIBLE. Pero nunca, desde lo que pasó con mi padre, nunca me había sentido tan relajado.- Pensaba Mo.

Mientras estaba absorto en sus pensamientos el arroz se estaba quemando el arroz, eso hizo despertar al pelirrojo que intento quitarlo del fuego pero desgraciadamente se quemó.

- ¡JODER MIERDA!- Chillo el pelirrojo al quemarse.

He Tian salió con una toalla enrollada a la cintura, lo primero que hizo al salir fue escuchar el grito de dolor que nada más en escucharlo se fue directo hacia Mo, cuando llegó a la cocina lo vio agarrándose con una mano la muñeca, el pelinegro instintivamente le agarró de la muñeca.