Nuevo.

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Habían pasado ya dos mese desde que Mo se fué definitivamente del instituto, también habían pasado dos meses desde que discutió con su madre y no volvió a hablar con ella. Estos dos meses había estado viviendo de casa en casa esa noche había dormido en casa de Zhan Zheng Xi que  habían estado jugando junto a Jian Yi al Devil May Cry 5 hasta las cinco de la mañana. Hoy tenía el juicio con su padre, tendría que ver a Yuga después de dos meses y para variar la semana que viene se iba a Irlanda durante todo un año. Respecto a su relación con He Tian no había avanzado nada, a pesar de que el moreno quería follar y el pelirrojo eso ni se lo planteaba porque le parecía imposible les iba bastante bien.

- Suerte.- Le dijo Zhan Zheng Xi a Mo cuando se iba de su casa para dirigirse a los juzgados.

- Gracias.- Le sonrió Mo.

Mo tenía mucho sueño, se durmió junto a esos dos a las cinco de la mañana, pero se tuvo que levantar a las nueve de la mañana y tenía que estar en los juzgados a las diez y media de la mañana, lo bueno de todo es que ya no tenía ansiedad gracias a He Tian.
Se fué a los juzgados en autobús y luego en metro, el pelirrojo suponía que ahí se encontraría con su madre a pesar de estar dos meses sin hablar ni siquiera por teléfono.
Después de estar casi hora y media por el metro y los buses consiguió llegar encontrándose a su madre.
Mo pensaba que Yuga le iba a ignorar pero al contrario se acercó a él y le dió un fuerte abrazo.

- Gracias.- Dijo Yuga mientras le abrazaba fuertemente.- Pensaba que no ibas a venir.

- Perdona por lo hace unos meses.- Contestó el pelirrojo correspondiéndole el abrazo.- Te quiero.

- Yo también te quiero.- Le respondió la madre dándole un beso en la mejilla.

Entraron juntos a ese enorme edificio estuvieron esperando bastante tiempo hasta ver entrar a Mo Sying haciendo que los dos se tensaran. Cuando llegó el padre metieron a los tres en una sala donde comenzó el juicio.
A Mo se le estaba haciendo eterno primero testificó Yuga después Sying y por último le tocó a él.

- ¿Puedes contar tú versión?- Preguntó la jueza a Mo viendo lo nervioso que estaba.

- Si.- Contestó nervioso Mo.

El pelirrojo empezó a testificar viendo como su padre empezaba a llorar, eso le sorprendió bastante al fin de al cabo solo lo había visto llorar cuando estaba borracho y porque se frustraba no porque estuviera triste.
Cuando Mo terminó de hablar toda la sala se quedó en un triste silencio. Después de un rato salieron de ahí.

- Hey Shan~- Le saludó He Tian a Mo que le estaba esperando fuera.- Hola señorita Mo.- Saludó también a la madre cuando se percató de que también estaba.

- Llámame Yuga.- Le sonrió  la madres.- ¿Te vienes a tomar algo con nosotros?- Le preguntó.

- Está bien y me contáis que tal os ha ido.- Contestó el pelinegro.

En una cafetería cercana se pusieron a comer, el juicio se había alargado por más de dos horas. El pelirrojo y la madre le estuvieron explicando al moreno como había ido el juicio mientras comían.
Después de comer los tres se fueron a dar una vuelta por las calles que había por ahí. Estuvieron hablando del viaje a Irlanda y Botsuana.

- Bueno nosotros nos vamos.- Dijo el pelirrojo después de estar más de dos horas hablando.

- ¿Te vas?- Preguntó sorprendida Yuga.

- Si Ma, me voy con él.- Contestó Mo refiriéndose a He Tian.- Vamos a estar un año sin vernos así que quiero pasar la última semana con él.

Rojo y Negro.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora