Capítulo 16

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El pastel casi les rompió los dientes, pero Harry y Neville fingieron que les gustaba, luego sin que Hagrid los viera deslizaban trozos al interior de su manga, que iban luego a parar disimuladamente al bolsillo de su túnica.
Hagrid esta felíz de escuchar todo lo referente a sus primeras clases, el perro de él, Fang, tenía la cabeza apoyada sobre la rodilla de Harry y babeaba sobre su túnica, Neville se mantenia renuente y acariciaba con cuidado su cabeza por amabilidad, el perro casi era fe su misma estatura, podría arrancarle un brazo de una mordida con sus fauces.
Las anécdotas que el semigigante tenía sobre sus padres hicieron que el tiempo pasará volando.
Los chicos se quedaron fascinados al oír que Hagrid llamaba a Filch "ese viejo bobo"
- En lo que se refiere a esa gata, la Señora Norris, me gustaría presentársela un día a Fang. ¿Saben que cada vez que voy al escuela me sigue todo el tiempo? No me puedo librar de ella. Estoy seguro que Filch la envía a hacerlo.
Harry de repente notó el periódico en la mesa, un título fue el que llamó su atención.
"RECIENTE ASALTO EN GRINGOTTS
Continúan las investigaciones del asalto que tuvo lugar en Gringotts el 31 de julio. Se cree que se debe al trabajo de oscuros magos y brujas desconocidos.
Los goblins de Gringotts insisten en que no se han llevado nada. La cámara que se registró había sido vaciada aquel mismo día.
"No vamos a decirles qué había allí, así que mantengan las narices fuera de esto, si saben lo que les conviene", declaró esta tarde un goblin portavoz de Gringotts."
Ese día fue su cumpleaños, Harry estuvo en el Callejón Diagon, fue al banco y no vio nada raro, debió ser por la tarde, pero cómo todos estaba también intrigado del caso, escuchó decir muchas veces que Gringotts era uno de los lugares más seguros del país.
- Chicos espero que puedan volver a visitarme pronto, y conocer a Morgan, lo he visto de lejos y me saluda, pero siempre va con su grupo de clase - dijo Hagrid despidiéndose de los niños que debian regresar ya al castillo.

El fin de semana, Morgan tuvo unos momentos libres para pensar su situación. Subió a la lechucería para visitar a los búhos como hacia todos los días, desde ahí contempló los terrenos de la escuela, podía ver que algunos niños ya estaban despiertos corriendo cerca del lago, otros leyendo bajo un árbol, mientras disfrutaba del viento en la cara, se daba cuenta de lo insólito y absurdo que era todo, no hace mucho tiempo vivía una vida "muggle", dónde este mundo era parte de la imaginación de una escritora qué plasmó en papel una de las sagas más famosas, que aún después décadas sigue vigente generación tras generación. Luego de improvisó su mundo cambio, su entorno fue otro, él fue otro; se adaptó y enfrentó su día a día, hasta que volvió a una vida "normal", es decir que asimilo el cambio. Olvidó que no siempre fue así y conservo sus recuerdos como una parte dormida de sí mismo, que surgía cada tanto; se concentró en vivir, aprender y disfrutar, luego tuvo la oportunidad de ayudar a mejorar la vida de un niño. Este niño, era Harry Potter, el personaje principal de una de sus sagas favoritas, conocía el destino que debería enfrentar, sus "aventutas", y sin embargo, para él era sólo un niño, alguien a quién llegó a ver cómo un hermano, parecía irreal que fuese la misma persona o personaje que acompañó sus momentos de lectura.
Sabía que tenia una oportunidad de cambiar a su favor el "tablero de juego", el tema es ¿cómo?, dudaba que pudiera eliminar definitivamente a Voldy, al menos no ahora, todavía existían horrocrux con esquirlas de su alma. Para ser sincero tenia miedo, confiaba en sus poderes, es cierto que teoría no es práctica, y práctica en los estudios no es experiencia en campo, si tocaba pelear temía no lograrlo.
Pero, su meta más próxima era deshacerse del espíritu de Voldy que anidaba en Quirrell, no parecía la gran cosa, aún así no iba a subestimarlo, tenía hasta Halloween par lograrlo, evitando así la entrada del trol a la escuela, y su potencial peligro.

Morgan buscó su mesa ideal en la biblioteca, una que no se viera simple vista pero desde ahí lograra ver la entrada y salida de las personas, en silencio intercambio algunas sillas para que todas fueran iguales y cómodas, sabia que más de alguno iba a invadir su espacio, pero prefirió confiar que estaría bien.
La biblioteca se convirtió en un punto de reunión común, la vorágine de la primera semana no les permitió reunirse tan seguido como esperaban, diferencias de horarios dejaban solo los descansos.
Hermione, Theodore y Blaise siempre andaban juntos, los 2 sangre pura se acostumbraron a ignorar el hecho que su compañera y amiga fuera hija de muggles, sus padres no estaban contentos con esta amistad, sin embargo, especularon una justificación, pensaron qué quizás sus hijos usaban a la "sangre sucia" para sobresalir o ella era una bruja sangre pura adoptada por muggles, no seria la primera vez que herederos fueran ocultados entre la chusma por temor a la guerra, es posible que su familia hubiera muerto y quedará sola entre los muggles, por ejemplo nadie sabia qué ocurrió con la familia del mago Héctor Dagworth-Granger, el pocionero que fundó la Rimbombante Sociedad de Amigos de las Pociones, la niña bien podría ser su descendiente. Hermione Jean Granger demostraba ser talentosa, un sangre sucia no podía tener ese nivel de magia sin robarla, rumor que suponían ridículo porque si no tienen magia no pueden orquestar ningún ritual oscuro para "robar magia", en caso de que existiera la ínfima y minúscula posibilidad de que se pudiera.

Un mago inusualDonde viven las historias. Descúbrelo ahora