Capítulo 29

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En marzo el partido de Quidditch entre Hufflepuff y Gryffindor, fue un éxito, Cedric perdió la snitch a unos centímetros frente a Harry, Oliver ya veía la copa en sus manos, Gryffindor estaba repuntando en el tablero de clasificación de los equipos. A pesar de ser otra vez Snape el árbitro, el equipo reconoció que esta vez fue justo en su arbitraje.
Morgan saludó a Remus para desearle felíz cumpleaños al igual que en noviembre para el cumpleaños de Sirius. Fue por el pasadizo al sótano de Honeydukes, recolecto varias piezas de chocolate de la selección especial del negocio, el precio era alto pero la alegría de Remus lo valía, dejó el pago en una bolsita con la planta de una pata pintada en una tarjeta.
Hizo una caja decorada y encima de un papel lila colocó los chocolates, luego de atarla con una cinta con corazones convocó a Kiki para que la llevará a su novio.

Durante el desayuno un gran cuervo negro se posó en el respaldo de la silla de Morgan.
- Menfis, hola, ¿qué traes ahí? - tomó la carta y el ave grajo. Morgan buscó un sándwich y quitó la carne para dársela al cuervo.
Morgan vio el sello y sus ojos cambiaron a unos felinos de brillante pupila delgada, abrió el sobre.
"Mi espeon. Necesitamos hablar con urgencia, envía lugar y hora. Nundu."
Morgan simuló que tenia lápiz y hoja en su pantalón, pero en realidad los hizo aparecer bajo la mesa. Luego escribió:
"Mi Nundu. Casa de los gritos, 12 hs. Di amigo, y entra. Espeon."
Cerró el sobre y colocó su pulgar en el sobre y un sello igual al de la primera carta apareció.
- Menfis, lleva esto a tu ama - luego de grajar tomó con el pico el sobre y se fue.
- ¿Quién te escribió? - preguntó Percy.
- Mi prima, viene al país y quiere verme, respondí enseguida pues es muy ansiosa - respondió simulando gracia.
Harry se tensó, recordaba a la dueña de ese cuervo, conocía a Morgan y sabía que esa carta no eran buenas noticias, y no fue el único, en la mesa de profesores, un mago de oscura mirada lo observaba.

Electra leyó la nota y se alistó colocando sobre sí su púrpura capa oscura con capucha, regalo navideño de quién consideraba familia. Apareció en las afueras de Hogsmeade, sabia los rumores de la vieja casa llamada Casa de los gritos, camino a paso normal, los habitantes estaban almorzando y habia pocas personas en la calle.
Llegó a unos pasos de la entrada.
- Mellon - dijo en voz alta, una línea como un aro que rodeaba la propiedad se iluminó en el suelo. Electra sonrió para sí, fue una de las excentricidades del pequeño gato usar como contraseña parte del acertijo de la puerta de Moria, recordaba su cara de sorpresa cuando ella dijo ser seguidora de J.R.R. Tolkien.
Ingresó a una sala austera, se quitó la capucha, dio un vistazo al interior y fue al sillón a sentarse a esperar.

Morgan se separó de su grupo a la hora del almuezo, y salió afuera para usar el pasadizo del sauce boxeador, sin saber que un murciélago con dificultad lo seguía en vuelo a tropezones con las corrientes de aire.
Minutos después llegaba a su destino, abrió la puerta y se encontró a Electra que corrió a abrazarlo, tiempo justo para que cierto quiróptero lograra pasar y ocultarse de la vista.
- ¿Qué ocurre? - preguntó preocupado.
- Atacaron a mi padre, casi no sobrevive. Morgan, nos vamos a Nigeria, es posible que luego nos estableceremos en Uganda para estar cerca de mi hermano que trabaja en la escuela. Debes venir con nosotros, la familia se reune para evitar la guerra con la manada sanguinaria - Morgan estaba confundido - El abuelo fue la oveja blanca de la familia, toda familia oscura tiene una; hace años se dedicó a cazar "criaturas oscuras", mató a un cruel hombre lobo que tenía un hijo adoptivo, un mago adolescente, en ese momento el abuelo no sabía de él, pero luego tuvo noticias, ese adolescente se convirtió en alfa luego de diezmar la competencia.
- Ve al punto por favor - dijo Morgan sentado con ella tomados de las manos.
- Ese licantropo juró venganza, vivimos años sin problemas porque tenia otras cosas que hacer. Pero su amo, por llamarlo de alguna forma, está buscando un necromante o experto en artes oscuras, y...
- ¿Y?
- Y bueno, mi tienda se hizo más concurrida por los ingredientes de basilisco... puede que reconociera a uno de los mortífagos que escaparon de Azkaban.
- Un momento, ¿escaparon mortífagos de Azkaban?
- No fue anunciado, el ministro no quiso desatar el pánico. Uno de mis amantes es auror y me lo dijo... el punto es que no se crece en una familia oscura sin saber ciertas cosas, como por ejemplo, la creación de homúnculos - el adolescente palideció - Vino a comprar ingredientes a mi tienda y reemplace algunos con otras cosas, como pelo de zorrino, huesos de perdiz en polvo en vez de colmillo de basilisco, en fin, cometí una travesura que reavivó el conflicto con la manada sanguinaria.
- ¡¿Qué?! Acaso no se te ocurrió mejor aturdirlo y entregarlo a las autoridades.
- Eso daría mala reputación a mi negocio - respondió la bruja.
- Ay, Electra... bueno, lamentó los problemas en los que estás , no sé cómo pueda ayudar... un momento, ¿por qué debo irme también?
- Llevas mi sangre, eres de nuestra familia. Estás cerca del mayor enemigo del señor oscuro Voldemort. Corres peligro, trae a tu cachorro contigo y tus amantes.
- Electra, agradezco el ofrecimiento. Aún así, no entiendo en concreto cual es el peligro y porqué.
La bruja suspiró y fruncio el ceño tratando de simplificar el asunto.
- Resulta que ese mortífago fue hacer el pedido, pero quién pago fue el alfa de la manada sanguinaria, que debía entregar los ingredientes al señor oscuro Voldemort. Resultado, parece un elfo doméstico con piel de vela derretida, y apesta horrible porque siempre está enojado... uno de mis esbirros trajo la información... el alfa se llama Fenrir Greyback , conocido como "el hombre lobo más salvaje del mundo", su comportamiento general es repugnante. Es un sádico que goza en atacar a los niños, su objetivo es transformar tantas brujas y magos como sea posible en hombres lobo bajo su mando. El señor oscuro Voldemort le prometió 'hijos e hijas' a Greyback a cambio de atrapar magos y brujas para él... Morgana quiera que nunca tengas que estar frente a él, tiene una voz áspera como un ladrido, huele a sangre, sudor y mugre, tiene la piel peluda, es tan desagradable.

Un mago inusualDonde viven las historias. Descúbrelo ahora