Capítulo 20

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En el dormitorio de los Gryffindor, un invitado poco aceptado por el resto de la Casa, conversaba con sus amigos sentado en la cama de Harry con él.
- Tú tío es auror - informó Draco a Dean - lo vieron en la oficina de mi padre. El otro día cuando pregunté mi padre no quiso responder, pero uno de los elfos que sabia de mi interés, comentó a Popsy sobre un auror llamado Kingsley Shacklebolt que se presentó en la mansión.
- Si es auror tal vez mi padrino lo conozca y entonces decides si escribes o no - dijo Harry.
- Pensaba esperar hasta las vacaciones, para conocer la verdad junto a mi mamá... Pregunta por favor, entre más referencias tenga mejor. Si es un purista pueda que no me convenga ponerlo al tanto de mi existencia - comentó Dean con Seamus mirando nervioso.
- Te recomiendo que no lo hagas, mi madre nunca me dijo que la abuela fuera de carácter explosivo. Escribí una carta por curiosidad y la respuesta fue tremenda, me fue mejor con Oliver que con el resto de la familia - Seamus se movia inquieto.
- Pues bien, entonces preguntaremos ya mismo - Harry se levantó de su cama y busco su espejo.

En otra parte del castillo, Morgan jugaba al ajedrez con sus amigos y compañeros de dormitorio, el premio era una semana de postres doble.
El tiempo pasó, Morgan continuó con sus pequeños proyectos, Voldy no dio más señales de vida, Harry junto a Neville iban bien, su vida estudiantil era "normal", salvo Snape que continuaba tratando de intimidarlos. Dean estaba ansioso por conocer a su tío, su madre quién respondió su carta de forma tardía, apoyaba la iniciativa de su hijo. Draco recibió directivas de su madre de no separarse de la vigilancia de su padrino. Morgan encontró el espejo Oesed y no vio nada, solo su reflejo, fue la mayor sorpresa de su vida actual, se supone que el espejo refleja el más profundo deseo del corazón. «Debe de estar descompuesto» fue la idea que pasó por su mente.
Se sentía un poco egoísta, en teoría Harry debería reflejarse en el espejo, pero ¿y si se ponía triste? ¿la experiencia sería para bien o para mal?, en eso escuchó chasquidos provenientes de una pared.
Veloz cambio de humano a felino y se ocultó bajo un escritorio.
- Homenum Revelio - Dumbledore invocó el encantamiento en la habitación. Luego conjuró un zona de silencio para no ser escuchados fuera de esa habitación.
- Estamos solos Albus, nadie viene a estas aulas - dijo su acompañante.
- Es por precaución, además no pierdo la esperanza que el niño venga.
- Tonto, olvida al niño, no vas a lograr que te siga. Te dije desde un principio que debiste llevarlo a casa.
- De haberlo criado nosotros hubiésemos formado lazos, cariño y no dejariamos que enfrentará su destino - respondió Dumbledore.
- Agh, Albus amor, te niegas asumir el liderazgo de la comunidad mágica britanica, ¿cuántas veces te has negado a ser ministro? ¿mm? Y no puedes liderar el mundo desde las sombras. Fracasó mi visión y me costó años asimilarlo, ahora no puedo salir libre sin que me reconozcan, me sentenciarian al beso del dementor si me descubren. No cometas mis errores.
- Cariño, mi caso es diferente. No quiero dominar el mundo, sólo pretendo mejorarlo, Tom es un riesgo y la profecía...
- ¡Albus, basta! Esa bruja es una alcohólica, su don no es certero, la profecía pudo hablar de cualquiera, no necesariamente tiene que ser el hijo de tus alumnos consentidos. El mundo es grande, magos y brujas van y vienen.
- Lo sé, pero todo coincide... Por favor, no me impidas ayudar, yo sólo quiero que se haga lo correcto. Todo es por el bien mayor Gellert - se escuchó decir al director.
«¿Gellert? ¿Gellert Grindelwald? ¿En serio? Se supone que está preso en Nurmengard» Morgan se adelantó agazapado para ver mejor, 2 hombres de cabello blanco se abrazaban, besos, más besos, el chico se sentía cómo un fisgón, y entonces lo descubrió, el profesor Gregson era Grindelwald disfrazado.
«Hablan o se van, por favor no me hagan pasar por esto. ¿Acaso no piensan en el prójimo? ¡Vayan a su habitación!»
- ¿Gellert, escuchaste eso?
- ¿Qué cosa? - preguntó el ex mago oscuro, teniéndolo entre sus brazos y besando el cuello del otro.
Morgan se preguntaba si no le molestaba tanto pelo, no imaginaba cómo no lo afeitaba.
- Se escuchó cómo un quejido.
- Deben ser los sirvientes, mejor vamos al dormitorio, parece que te distraes mucho, antes lo hacíamos en las aulas y no parecias escuchar nada más que a nosotros.
- Homenum Revelio - el encantamiento se dispersó y Morgan no fue descubierto, daba gracias a Dios que su naturaleza impidiera ser detectado por ese tipo de encantamientos - Deben ser los nervios, cambiaré el espejo de lugar.
- Creí que dijiste que ese criminal no regresaría este año.
«Vaya, un loco hablando de otro» Morgan paró bien sus orejas.
- No lo hará pero debo mantener las apariencias. Al final del año le diré a Nicolás que la piedra fue robada o lo convencere de lo peligroso de su existencia, ya veremos. Consideró que la piedra filosofal debería estar en un lugar mejor.
- Cómo tu bóveda privada Albus.
- Ahora que lo mencionas, ¿por qué no?... Sólo espero que Harry se interese por la piedra y vaya a buscarla, despertar su espíritu de aventura. Pedí a Hagrid no hablará con el niño sobre los secretos de este año, por tanto es seguro que sí contó todo al niño y sus amigos.
- No te iusiones, el niño no está sólo, tiene familia, ese chico Sallow es su primo, primo lejano si no escuche mal. Mantiene a tu prospecto de héroe ocupado en cosas de niños, el niño confía plenamente en él.
- Lo sé y estoy con las manos atadas, Nicolás se las ingenio para hacerme jurar no inteferir con los asuntos del chico. En ese entonces no sabía que sus asuntos tenían que ver con Potter.
- Paciencia, tarde o temprano podrás guiar al niño cómo deseas... ¿Qué hay de sus amigos?
- El joven Longbottom aunque valiente, fue criado por Augusta, mujer desconfiada cómo pocas. Sus otros amigos no son del tipo líder, mantienen bajo perfil... Quizás podría hablar con aquellos de la Orden con hijos, los Weasley pueden ayudar.
- Percy Weasley es amigo de Morgan Sallow, comienza por ahí. Black esta tomando fuerza, si quieres recuperar su apoyo y confianza, comienza por ganar buena imagen con los más jóvenes. Ronald Weasley comparte dormitorio con Potter, debe haber cierta relación cordial al menos.
- Gellert, yo espero lograr la confianza de Harry para que cumpla con su deber... Debo hablar con los Weasley.
- Hum... Albus, cariño, hay algo que me molesta desde que Potter llegó... sé qué pretendías resolver el tema de la posesión a tu manera, pero... ¿no crees que es raro que el niño no reaccionará? La primera vez que lo vi de bebé, supe que había residuos de magia oscura. Pero ahora, no queda nada, está limpio y su famosa cicatriz no está, ¿qué pasaría si estás equivocado? - preguntó Gellert.
- El niño derrotó a Tom.
- Su madre lo hizo - interrumpió el otro - magia de sacrificio o algo así, magia antigua. Sin embargo...
- Gellert, no tiene sentido pensar en eso, es cierto que es extraño la disminución de su cicatriz, pero sigue siendo el elegido - respondió obstinado Dumbledore.
Minutos después de que los magos se fueron, Morgan se asomó y olfateo para asegurarse que no habia nadie.
«Interesante información, esto plantea muchas dudas» él se regresó a la Torre de Gryffindor.

Un mago inusualDonde viven las historias. Descúbrelo ahora