Sarahi Lee Walker, es una estudiante de segundo año de preparatoria cuando una maestra de literatura les pide a cada uno de los chicos de su clase incluida ella escribir una carta a un soldado, la maestra pasa una urna con papelitos en los que se en...
Son las 5 am, debo levantarme, hoy es 25 de agosto y adivinen quien cumpleaños, si, mi Teniente, me prometí prepararle una sorpresa, para el día de hoy, así que soy yo quien va a preparar su torta y su fiesta, soy su novia después de todo, quiero que sea lo mejor de lo mejor, se lo merece después de todo los sacrificios que ha hecho por nosotros los ciudadanos americanos.
Lavo mi rostro y bajo a la cocina, mama y Robert parece ser que estuvieron ocupados hasta bastante tarde, por que casi no me dejaron dormir, si saben a lo que me refiero, enserio es complicado dormir con tus padres teniendo sexo por toda la casa, me pongo un delantal y saco los ingredientes frescos que compre la noche anterior.
— Harina, huevos, café instantáneo, leche en polvo, leche liquida, polvo para hornear, azúcar, sal, vainilla, chocolate y por supuesto aceite, ¿me olvido de algo? Oh si, mantequilla, azúcar glas, mas chocolate y chocolates Ferrero Rocher, muy bien, manos a la obra — tomo un vaso de agua fresco y sujeto mi cabello para lavar mis manos y comienza la fiesta.
[...]
— Hornear durante 45 minutos o una hora, perfecto — miro mi reloj en el teléfono que tiene de bloqueo de pantalla la foto que me tome con Ken, Ian y Claribelle, la pantalla de inicio, somos mama, los gemelos Kyan y Keath y yo — Bien, así que a las 7 am debe estar lista — me digo sacudiendo mis manos y poniendo café en la maquina, preparo unas crepas con chocolate y frutas para el desayuno y huevos estrellados.
Amo, la cocina, sin duda alguna, es una parte de mi y cuando termine la preparatoria, quisiera estudiar algo relacionado, sin embargo, hay algo que me preocupa, hoy hace un mes que Ken esta aquí, son 5 meses desde que le envié las cartas y es poco menos de un mes desde que somos pareja, pero mi estomago se revuelve con solo pensar que debo dejarlo ir otra vez, tengo miedo, pero es lo que el ama hacer y es en si su esencia y no puedo quitarle eso.
— Buenos días, Sara — dice Robert acomodando su traje de Giorgio Armani, sonrío y le limpio la mejilla donde mama dejo la marca de su labial — Ay, Dios Robert espero que hayas disfrutado la noche — digo sirviendole una taza de café y su desayuno
Robert sonríe, y es en esos pequeños detalles que se lo mucho que ama a mi mama, sino créanme que de alguna manera hubiera hecho fracasar dicho matrimonio, me siento junto con el en la mesa, mientras tomo un capuccino — Rob, se que amas a mi madre, gracias por eso te agradezco que hayas llegado en momento mas oportuno — digo y el sonríe — Sara, no somos las personas, son las circunstancias, unas nos alejan y otras nos vuelven cercanos a las personas— dice sorbiendo su café— Por eso, yo, bueno, se que jamas has intentado reemplazar a mi padre y eso es algo que quiero agradecerte — digo, el sonríe amablemente y me insta a que siga hablando — Veras, yo quería saber sino te molesta que comience a decirte "papa" — Termino y sus rostro es como si se iluminara, y lo entiendo.
Papa, en el vídeo de mi cumpleaños #17 me había dejado en claro que si mama había encontrado a alguien debía aceptarlo, jamas había rechazado a Rob, pero no me había animado a decirle "papa", sentía que traicionaba a mi padre y esa no era mi intención, pero sin duda alguna, había comprendido que aunque las regalías del ejercito por lo que le paso a papa, eran parte de lo que había ayudado a desarrollar mi vida, Rob siempre ha estado allí.
— Me haría muy feliz, si lo hicieras, y quiero que sepas que te cuidare bien si me das la oportunidad — dice — quiero que tu padre vea que estas en buenas manos — añade con una sonrisa y termina su desayuno.
— Bueno, papa, no dejes que tu agenda se retrace — digo y el deja un beso en mi frente, mientras se levanta de la mesa — Esta bien, papa, yo lo hago — digo tomando los platos de la mesa y llevándolos a la cocina.
[...]
Una vez la torta esta lista y esponjosa, me dispongo a preparar la crema y la decoro, mientras lo hago un mensaje ilumina mi teléfono.
— Buenos días, nena ¿tienes planes para hoy? — pregunta Ken
— Lo siento, si los tengo, pero ¿podría verte en la tarde, tan pronto termine todo? — pregunto
— Claro, siempre estaré aquí, NO me iré a ningún lado — dice, me encantan cuando dice eso, se que el luego tendrá que irse y que parecerá que nuestro amor solo fue algo del verano, pero para mi y se que para el siempre sera algo mas, esa es su forma de decirme que sin importar adonde el vaya, siempre estaremos juntos
— ¿Lo prometes? — digo con una sonrisa mientras escribo
— LO Prometo — dice — Supongo que tendré que salir con Ian al parque, ¿quieres que lleve a los gemelos?, supongo que tu madre querrá descansar, y me vendría bien algo de amigos para Ian — dice y parece como si hablásemos de nuestros hijos y mama los cuidara.
— Se lo diré — digo con una sonrisa — Le diré que los tenga listos en media hora, ¿te parece? — pregunto
— Suena a que tenemos un plan, sargento — me dice y yo río — Bueno, me parece que seria buena idea que lo ejecute, Teniente — digo y me envía una carita sonriente y yo hago lo mismo, así hasta que mama aparece por las escaleras cargando las dos sillas de auto de Kyan y Keath, camino hacia ella y le sonrío.
— Debes estar exhausta mama, ¿por que no descansas hoy? — digo y ella rueda los ojos, yo río — Ken, dijo que se encargara de ellos por hoy, para que descanses — digo y ella abre los ojos con agradecimiento y me entrega las dos sillitas mientras los gemelos de 3 años bajan las escaleras
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— Allí están mis hermanos favoritos — digo haciéndolos reír — Dala, tenemos hamble — dicen y yo me río — Jajajaa, no les daré desayuno — digo y hacen una carita triste — Aww, me rindo, me rindo — digo levantando mis brazos — Corran a la mesa, si quieren desayunar — digo.
Me giro hacia mama — Puedes irte a dormir, mama, me encargare de ellos hasta que venga Ken — digo y ella sube las escaleras medio dormida y los gemelos comienzan a reírse.
— Kyan, Keath, Kenneth, los llevara al parque a jugar con Ian, en el parque, así que por favor, pórtense bien — digo y ellos asienten saludando — Si, mi capitan, afidamtivo al civil — dicen con sus vocecitas enredadas y entonces les sirvo su desayuno.
