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Jungkook le soltó las muñecas y colocó las manos en la cintura de Chaeyoung, donde la acarició brevemente con los dedos antes de subir las manos hasta su espalda. Chaeyoung gimió y le rodeó el cuello con los brazos.
A ciegas, caminó hasta entrar en su casa, y cerró la puerta con la espalda de ella, la apoyó contra dicha puerta y la sujetó mejor.
Sosteniéndola de un abrazo, Jungkook se dirigió hacia su habitación mientras le desabrochaba la bata dejándola tirada a mitad del camino, rompió el beso para quitarle el camisón y aprovechó para verla. Soltando un gruñido la dejó caer en la cama.
Mientras la besaba Jungkook fue quitándose la ropa como un experto, al separarse para quitarse las últimas prendas, vio como ella lo miraba con ojos lujuriosos, como respiraba con dificultad haciendo que su pecho subiera y bajara... excitándolo más.

Introdujo una mano entre la cama y el cuerpo de Chaeyoung y la incorporó haciendo que la espalda de ella quedara pegada a él, Chaeyoung no pudo evitar jadear al sentir la erección de Jungkook, él se inclinó un poco y tras echarle el pelo sobre uno de sus hombros, comenzó a besarle el cuello, haciendo que ella gimiera y se frotara contra él.
Empezó a depositar pequeños besos sobre el tembloroso cuerpo de Chaeyoung, empezando por su cara, siguiendo por su mandíbula, cuello, bajando hasta sus senos... volvió a ascender, la besó en los labios, posesivamente, mientras el beso se intensificaba, ella se dio cuenta que había caído en su juego, eso que estaba evitando desde que llego, esa noche se volvió realidad.

No lo podía creer! Eso no había pasado de verdad. Si, había pasado, y había sido la mejor experiencia que había tenido hasta ahora en su vida sexual.

Chaeyoung aún intentaba normalizar su respiración, su pecho subía y bajaba, se sentía tan bien y a la vez tan mal... aquello no debería de haber sucedido.
Pero a lo hecho pecho.
No podía retroceder el tiempo y evitar el accidente. Cerró los ojos y sintió las lágrimas que hacían sus ojos arder, sentía que había traicionado a su amiga... ¡maldita sea!
Notó la mano de Jungkook alrededor de su cintura y se tensó. Él pareció no darse cuenta pues la abrazó con más fuerza y la pegó contra él. Chaeyoung cerró los ojos para hacerse la dormida, pudiera que así no intentara hablar.

Él la pegó más contra ella. Le gustaba sentir su cuerpo caliente contra el suyo. Dios, era una mujer muy apasionada, pocas de las mujeres con las que se había acostado respondían de esa forma tan apasionada a sus caricias.
Le acarició el vientre mientras le besaba un hombro. Pero no intentó nada más, había visto los ojos cerrados de la chica al volver del cuarto de baño. ¿Dormiría realmente? No lo sabía pero por ahora no la iba a molestar, la dejaría descansar, y reponer fuerzas, la noche era larga. Así que pegó a Chaeyoung más a él y cerró los ojos.

«Gracias por una noche de un buen sexo. Me lo he pasado muy bien. Chaeyoung»
¿Qué?
Jungkook no salía de su asombro, no podría sercierto que una chica se hubiera despedido de él así; dejándole una nota.¿Gracias por una noche de un buen sexo?
No, no era posible.
Normalmente era él quien se despedía, quien decía adiós. Y esta vez no solo no había sido él quien dijera adiós, sino que además, ella había desaparecido sin que él se diera cuenta.
Pero aquello no quedaría así, hablaría con ella.

Chaeyoung daba vueltas por su casa, por fin había podido entrar, el conserje la había mirado de una forma muy extraña cuando había bajado a pedirle la llave, y ahora estaba nerviosa, si, esa era la palabra, estaba nerviosa, le había dejado una nota a Jungkook, aun no se creía lo que había hecho.
Pero no había encontrado otra forma de... expresarle lo sucedido.
Tampoco iba a decirle a la cara que había sido un error. «Un error muy bueno» comentó una vocecita en su cabeza, la cual ellas acudió a la vez que gruñía enfada consigo misma.
De todas formas y a pesar de lo sucedido no iba a retractarse en cuanto a su plan, seguiría adelante. Y si no se confundía, y según lo que le había contado su amiga, Jungkook bajaba todos los días a la cafetería de abajo.
Sin perder más tiempo se metió en la ducha dispuesta a continuar con lo que había empezado.

Jungkook sonrió cuando a través del cristal de enfrente vio a su vecina entrar por la puerta, esperaba que hiciera lo que había hecho hasta ahora. Él se concentró en intentar hablar con la preciosa morena que tenía delante. Era una compañera nueva del trabajo a la que apenas había tenido tiempo de tratar, y al verlo lo había saludado aunque realmente no sabía muy bien de que "hablaban" pero no era lo que más le importaba en ese momento.
Las manos de Chaeyoung no tardaron en rodearle la cintura.
-Hola mi...-
La boca de la castaña fue callada por un beso de Jungkook, quien se había vuelto hacía ella, y le había devuelto el abrazo.
-Ya te echaba de menos, cariño -dijo él- has tardado mucho en bajar.
Chaeyoung se quedó de piedra.
Aquello no iba a ser así.
No. Su plan le había estallado en la cara.
Mierda!
Ignorando la tensión del cuerpo de Chaeyoung, él la volvió a besar, la giró y la puso enfrente de la morena.
-Cariño -le dijo a Chaeyoung- ella es...
-Soojin-dijo la chica con una sonrisa encantadora.
-Soojin, ella es Chaeyoung, mi novia -Chaeyoung se tensó más.
-Encantada -dijo la chica tendiendole la mano.
-Encantada -contestó ella con tal de no quedar mal estrechándole la mano a Soojin.
-Bueno... será mejor que me vaya, mi novio me está esperando en la puerta... Ha sido un placer.
-Igualmente -dijo Chaeyoung con una sonrisa forzada.

Chaeyoung ,estaba indignada y enfadada. Daba vueltas por su casa sus manos acariciaban sus labios de vez en cuando sin poderlo evitar, el sabor de los labios de Jungkook aún la torturaba.
¡Dios, esto no puede seguir!
«Me gusta quemarme, cariño. Tú empezaste el juego, me gustas, y quien ríe el último ríe mejor, esto solo acaba de empezar.»
Las palabras resonaban en su cabeza, sobre todo teniendo en cuenta lo sucedido después; ella había salido enfadada de la cafetería ya que se había dado cuenta de que eran el centro de atención de ese lugar, todas las miradas estaban en ellos. Había intentado escapar hasta su casa, pero en el momento en el que ibaa alcanzar la puerta, Jungkook la había agarrado del brazo, haciéndola girar en sus pies y sin darle tiempo a nada la había besado pegándola contra la pared,sus manos le habían sujetado los brazos para que no se moviera, hasta que ella se había rendido bajo su fiera boca, la había echo perder el control, olvidarse de todo y de todos con ese beso brusco y apasionado, solo habían quedado, ella  y Jungkook, y mucho que sentir.
Hasta que el teléfono móvil de él había comenzado a sonar, rompiendo el encanto y devolviéndolos a la cruda realidad.
Ella había aprovechado el momento en el que Jungkook había contestado el teléfono para abrir la puerta de su casa y encerrarse en ella, escapando.
«Cobarde» Se reprendió. Si, podría llamarse así si quería, pero en ese momento no le importaba, estaba demasiado nerviosa, su cuerpo estaba demasiado vivo, y no se fiaba de si misma.
Poco después escuchó el timbre y supo quien era el que llamaba; Jungkook. Pero Ella se había escondido, había guardado silencio y no había abierto la puerta;no se atrevía. Tenía que aclararse antes.
Tenía que solucionar todo aquel embrollo.
Y no tenía idea de cómo hacerlo.

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[Rosekook]Playing With The FireDonde viven las historias. Descúbrelo ahora