Capítulo 2: "Nuevos amigos"

917 50 12
                                    

Un grupo de niños entrenaban en un campo de juego bajo la orden de una niña castaña mientras a lo lejos un hombre de cabello ondulado, lentes y bigote, que sostenía una botella en la mano, los observaba, sobre todo a uno de ellos que había llamado su atención.

Es extraordinario, esa chilena le salió perfecta y apenas es un niño, pensaba el hombre mientras veía a un niño de cabello negro desordenado sonreír tras una extraordinaria chilena.

Bien, tómense un descanso, decía una niña castaña tras haber hecho sonar un pequeño silbato que sostenía en una de sus manos.

¡Gracias jefa¡ ya estábamos agotados, decía Ryo mientras los demás niños asentían al tiempo que el hombre de lentes se acercaba a ellos.

Niños, ¿no necesitaran un entrenador?, dijo el hombre mientras se acercaba al grupo de niños.

¿A poco usted es entrenador?, pregunto Manabu en tono dudoso, mientras el niño de cabellos desordenados miraba al hombre como inspeccionándolo.

Bueno, yo...., decía el hombre.

Roberto Hongo, si, tu eres Roberto Hongo, el famoso jugador Brasileño......, decía Tsubasa con una amplia sonrisa en sus labios mientras los niños se miraban entre sí.

¿Roberto Hongo?, dijo Sanae.

Bueno, tampoco es que sea famoso niño, solo hago lo que me gusta hacer jugar al soccers,,...., decía el hombre sonriendo, empezando una amena plática con el grupo de niños.

Minutos después:

¿En verdad quiere entrenar a mis amigos?, decía Sanae, haciendo una pausa para decir: Mire que no tenemos con que pagarle.

Eso es lo de menos niña, yo quiero entrenarlos y más ahora que sé que tienen un campeonato tan cerca, respondió Roberto.

Sanae, deja que nos entrene, él es muy bueno, con su apoyo mejoraremos mucho, decía Tsubasa.

Si jefa, deja que nos entrene, decían los demás niños.

Está bien, total, que les puede enseñar una niña a ustedes, ¿verdad?, respondió Sanae con nostalgia.

No digas eso Sany, tú eres muy buena entrenadora, es más podrías apoyar a Roberto, ¿no?, respondió Tsubasa mirando al mencionado.

Claro, claro, dijo el hombre sonriendo.

Bueno, siendo así, entonces le presento al grupo,......, respondió la castaña mientras empezaba a presentar uno a uno a los miembros de su equipo.

Dos horas después:

Hay mis piernitas, se quejaban los niños mientras solo uno de ellos seguía de pie dándole de pataditas a un balón mientras platicaba con su entrenador.

Entonces, mi padre lo conoce, decía Tsubasa.

Si Tsubasa, es más me quedare en tu casa por un tiempo, ...., respondía Roberto mientras la castaña los miraba.

Días después:

Un grupo de niños platicaban en un campo de juego mientras esperaban la llegada de su entrenador.

Y eso me dijo Wakabayashi, decía Ryo.

Déjalo, él ni siquiera imagina que tenemos a un extraordinario jugador con nosotros además a un gran entrenador, respondió una niña castaña.

Sí, es cierto, acoto Manabu, al tiempo que un niño de cabello desordenado llegaba junto a ellos.

Roberto fue a recoger unos estudios que se hizo, me dijo que nuestra jefa vaya dirigiendo el entrenamiento que ella es su asistente, decía Tsubasa mientras miraba a la castaña.

"MI LUZ"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora