Ya había pasado más de una semana desde que Tsubasa estaba entrenando junto a sus compañeros para el torneo que se jugaría en su país, una semana durante la cual, él al igual que sus compañeros habían permanecido dentro de las instalaciones de la federación sin tener ningún tipo de comunicación con personas que no pertenecían a está, si bien esto les causaba nostalgia a los miembros del equipo juvenil, ellos bien sabían que tenían que permanecer concentrados y sin tensiones del exterior para poder lograr su objetivo, y Tsubasa, a pesar de sentir nostalgia por no poder comunicarse con su novia y familia, era uno de los que tenía muy en claro ese objetivo, el cual era salir campeones de ese torneo y así poder cumplir uno de sus sueños, también sabía que para conseguir lo que uno se traza en la vida a veces se tiene que hacer algunos sacrificios y pues estás semanas sin contacto con el ambiente exterior era uno de esos sacrificios y él estaba dispuesto a soportarlo, pues él confiaba en que todo al final valdría la pena.
Por su lado Sanae, desde que supo que su amado estaba en Japón, tuvo ganas muy grandes de verlo, pero ella bien sabía que esto era imposible, por las restricciones de la federación en referencia a las visitas, por ello, ella había decido aprovechar los días que quedaban para el inicio del torneo para junto a sus amigas crear algunas porras de aliento a su selección.
Federación Japonesa de Fútbol:
Un grupo de jóvenes platicaban en un vestidor luego de un duro entrenamiento.
Estoy ansioso por ese torneo, decía uno de los jóvenes.
Pues en un par de días, tú ansiedad te calmara amigo, respondía otro.
Tenemos que ganar este torneo muchachos, decía Tsubasa con el rostro radiante de alegría.
Claro que si amigo, acotaron un par de jóvenes que estaban junto a él, al tiempo que el entrenador entraba al vestuario, haciendo que todos guarden silencio.
Chicos, ya no abra más entrenamiento por hoy, mañana por la mañana haré una práctica final, dijo el entrenador.
Bien, dijeron a coro los jóvenes.
Una vez que el entrenador se retiró, un joven cara de mono, dijo: Tsubasa, te noto extraño desde que llegaste, pero no he tenido oportunidad para preguntártelo, por ello recién lo hago, ¿te pasa algo?.
No, claro que no, yo estoy extraño, respondió sonriendo Tsubasa.
La verdad amigo, a mí al igual que a Ryo también me parece que hay algo que te está teniendo inquieto, y la verdad no creo que sea el torneo, pues a ti los encuentros deportivos, te emocionan, los esperas con ansias, más no con inquietud, acoto Taro.
Si, ello es cierto, tú estás acostumbrado a los retos, ellos nunca te dan miedo, dijo Genzo sonriendo, mientras sus demás compañeros de equipo que estaban en el vestuario que habían oído la plática asentían.
Está bien, hay algo que me tiene ansioso, y no es precisamente el torneo, sino algo que quiero hacer pero no sé si pueda,...., decía sonriendo Tsubasa.
¿Qué amigo?, dijeron sus compañeros de equipo.
Lo que sucede es que...., decía Tsubasa mientras sus amigos y compañeros de equipo lo escuchaban con atención.
En tanto:
Un grupo de chicas estaban sentadas en el suelo escribiendo con pinturas de colores en una banderola.
Creo que nos quedó muy bien, decía una peli roja.
Si, acoto una joven de cabello corto.
Ya tenemos todo listo, solo nos queda esperar el día del inicio del torneo para animarlos, decía emocionada la castaña.
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"MI LUZ"
RomanceEntre Sanae y Tsubasa, hay una química especial, ellos desde que se conocieron se hicieron grandes amigos, acompañándolo en cada paso que él dará para poder hacer realidad su sueño, "Ser el mejor futbolista del planeta", si quieres saber más de est...