Un grupo de jóvenes se encontraban en uno de sus partidos de practica mientras un hombre de bigote junto a un grupo de chicas miraba el mismo.
Tsubasa es increíble, sin duda le irá súper bien en Brasil, decía una de ellas, haciendo que una castaña sintiera su corazón dolerle.
Si, ello es cierto Kumi, Tsubasa es un joven muy talentoso, respondió el entrenador.
Entrenador, ¿ya díganos quien es ese nuevo estudiante que entrara al equipo de fútbol en unas semanas?, decía Yukari, mientras Kumi asentía.
No se los puedo decir chicas pues ni yo mismo se quién es, solo me dijo el director que era un ex alumno del Nankatsu y que además fue parte de él equipo de fútbol de la ciudad que nos representó en el campeonato de la primaria, respondió el entrenador.
¿Entonces no estudio en el Nankatsu?, dijo Kumi.
Pues eso no me lo aclaro el director, acoto el entrenador.
No sea malo entrenador, usted sabe quién ese muchacho, usted me lo dio a entender esa vez, dijo Yukari sonriendo, mientras la castaña parecía ensimismada en sus pensamientos.
Ya falta tan poco para que te vayas, no creo que nada te haga cambiar de opinión, ese es tú sueño, y para colmo hoy es San Valentín, y yo sola, no, no, que estoy pensando, solo somos amigos, aunque los amigos también pueden estar juntos en San Valentín, no, no, no, a quien pretendo engañar, tú eres más que un amigo para mí, tú eres especial, me pude dar cuenta de ello con lo que pasó aquella vez, ahora que pienso en ello, ya no has vuelto a insistir con que hablemos de ello, tal vez pienses que es lo mejor, si es así, de hecho es lo mejor, pensaba la castaña mientras veía a su amigo tomar un balón y empezar a correr con este, al tiempo que a su mente venían imágenes de aquel fugaz beso accidental en los vestuarios, haciendo que su corazón se acelerara y su mente se desconectara por completo de la realidad.
Tsubasa, escucho la castaña, haciendo que la jovencita salga de sus pensamientos.
¡Tsubasa¡ dijo la castaña echando a correr al ver a su amigo tendido en el piso.
No es nada, grave, no se preocupen, decía el joven a sus amigos que lo habían rodeado, mientras él se ponía de pie, al tiempo que su entrador junto a sus tres asistentes llegaban al lugar donde él estaba.
¡Tsubasa¡ ¿te encuentras bien?, pregunto una preocupada castaña.
Si, si estoy bien, aunque no vendría mal un vendaje en el tobillo, dijo Tsubasa mirando a la castaña.
Si gustas, yo te vendo, acoto Kumi.
¡Eh¡ gracias Kumi, pero preferiría que lo hiciera Sanae, ella conoce ya mis lesiones, dijo Tsubasa con calma, mientras sus amigos se miraron entre si y sonrieron.
Sí, eso es cierto hijo, respondió el entrenador haciendo una pausa para decir: Sanae, ¿podrías revisar la lección de Tsubasa y vendarla?
Sí entrenador, respondió la castaña.
Pues entonces vamos al vestuario, dijo Tsubasa.
Sí, yo te apoyo, a llegar, respondió la castaña mientras tomaba un pequeño maletín, donde tenía lo necesario para curar lesiones.
¡Gracias¡ dijo Tsubasa mientras colocaba uno de sus brazos sobre el hombro de la castaña para darse apoyo para caminar.
Ante el contacto, el par de jóvenes sintieron sus corazones latirle a prisa y su cuerpo temblar, pero a pesar de ello continuaron su camino, mientras sus amigos los miraban partir entre murmullos.
Ellos no deben seguir negando lo evidente, decía Kisugi.
Así es amigo, pero que se hace, ambos son muy tercos o tontos, al creer que lo que tienen solo es amistad, añadió Taki.
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"MI LUZ"
RomanceEntre Sanae y Tsubasa, hay una química especial, ellos desde que se conocieron se hicieron grandes amigos, acompañándolo en cada paso que él dará para poder hacer realidad su sueño, "Ser el mejor futbolista del planeta", si quieres saber más de est...