v e i n t i o c h o

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Roger:

La casa se sentía muy sola desde que _______________ y Felix no estaban. No escucha sus risas o el buenos días de ella o no tenía aquellas “charlas” con Felix y sobre como cuidar a su madre.

La había cagado horrible lo admito. Me deje seducir y ahora lo estaba pagando horrible, y eso que solo llevaba dos semanas así. Veía a Felix, pero a ______________ no.

Seguía en la sala, mirando los papeles de divorcio que ella había solicitado hace dos días. No los podía firma y no quería, necesitaba hablar con ella, pero me era imposible, no me quería ver y la entiendo, pero necesitaba verla una vez más.

Tome los papeles y sali de mi casa, subí a mi auto y conduje hasta aquella casa que siempre fuí bienvenido.

Cuando llegue, tome los papeles y salí del auto, tocando varias veces la puerta cuando estuve frente a ella. Espere unos segundos y ella abrió, estaba despeinada y claramente se había levantado, ya que eran las siete de la mañana.

Me miró unos segundos y luego mi mano, donde estaban los papeles.

—No tenías que traerme los papeles, solo eran firmarlos, Roger —hablo seria.

—Aún no los firmo —ella me miro sorprendida—. Tenemos que hablar.

—Sí —dijo unos segundos pensado—. Tenemos que hablar.

Me dejo pasar y ambos fuimos a la sala. La mire, había un cambio en ella, pero no sabía que era. Aunque no puede evitar sonreír al ver que dormía aún con unas de mis camisas y solo en ropa interior. Ella se sento en un sofá y yo en entró, frente a frente.

—¿De verdad quieres que firme esto? —señale los papeles—. ¿Lo pensaste bien?

—Sí, muy bien —suspiro—. No quiero hacer las cosas difíciles para ambos o para Felix o para... —se quedo callada unos segundos—. Roger —me miro a los ojos—, estoy embarazada.

Al oír aquellas palabras una vez más me sorprendí. La mire bien. Por eso se veía tan radiante otra vez, tendríamos otro bebé. Sentí lágrimas en mis ojos y no pude evitar sonreír.

—¿Hablas en serio? —ella asintió con la cabeza—. Entonces no podemos separanos —empecé a hablar rápido—. Ese bebé...

—Tendre a su padre y su madre, pero no creo que sea sano el que estemos juntos —mis animos cayeron—. Roger, de verdad te lo pido como tu mejor amiga y como la mujer que has hecho feliz en casi toda su vida, firma, por favor.

La mire unos segundos más y luego los papeles. Las consecuencias de mis actos se estaban reflejando. Era un estúpido y tenía que hacerlo. No podía hacerla sufrir aún más y después de todo, era mi mejor amiga y sin duda el amor de mi vida. Nunca le había podido nergar nada en esta vida.

—¿Tienes una pluma? —murmure.

***

Nuestro vídeo, I Want To Break Free, que había sido lanzado hace una semana, había sido botado de MTV de Estado Unidos, tal vez, no le agrado del todo que estemos vestidos de mujeres.

Brian, John y yo esperábamos a Freddie, pero no aparecía en ningún momento en el estudio y cuando le llamábamos, solo nos evadía o contestaba el idiota de Prenter.

These Are The Days Our Live - Roger Taylor & TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora