v e i n t i n u e v e

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Había pasado ya casí dos años y me sentía bien. Estar con mis dos hijos, Felix de 5 años y Rory de un año y meses, me han ayudado mucho.

No había visto a su padre en ese tiempo y me ayudo a superarlo, tal vez un poco o más de un poco. Él era feliz con Dominique y me alegraba por él. Las veces que venía era para salir con sus hijos o verlos, nunca lo atendía yo, para eso estaba Hill.

A John y Brian los veía a veces, y a Mary, era a la que veía más seguido y estaba feliz. Ella y David se había casado hace un mes y no podía estar más feliz por ella, solo falta alguien, Freddie.

En este tiempo tampoco había salido con alguien o algo así. Tom, siempre estaba ahí y era lindo. Se llevaba bien con mis dos pequeños y ellos lo adoraban.

Los tres estaban en la sala, esperando a que Roger llegará y se llevara a los niños, yo tenía que ir a una de mis pasarelas, despues de tres años, tendría otra.

—Quiero ir contigo, mamá —me dijo Felix, mientras me ponía mis tacones.

—¿No quieres ir con tu padre? —pregunte y él miró al suelo—. ¿Qué ocurre, cariño? —alce su mentón, tenía los ojos llorosos.

—No me agrada, Dominique —suspire.

—Ya hablamos de esto, Felix. Es...

—No quiero ir, mamá —se aferro a mí y me abrazo y yo a él.

Escuche el timbre y no dudo que sea Roger, que vendría por sus hijos. Mi pequeño rubio no quería soltarme. Tom entraba a mi habitación con la pequeña Rory en sus brazos.

—Roger, los está esperando —avisó y asentí con la cabeza.

—Cariño —mi hijo me miró—, ¿quieres ir con Tom y conmigo? —sus ojos brillaron y miré a Tom—. Podrias decirle que ni Felix ni Rory iran con él, que sera después.

—Sí —sonrió y medio a mi pequeña rubia castaña, que ahora se parecía a mí.

Fuí arreglar a mis hijos, mientras escuchaba discutir a Roger con Tom y al final se fue furioso de la casa. Por la ventana de la habitación de Rory, pude ver como subía a su auto y se iba muy furioso.

—Papá —habló Rory, sorprendiendome, había dicho su primera palabra—. Papá —miraba a la puerta, donde estaba Tom.

—Él no es papá, Rory —murmure mientras terminaba de ponerle su vestido.

—Me gustaría hacerlo —lo escuche decir mientras se acercaba a nosotras.

—Tom, su padre es Roger, quieras o no —él suspiró.

—Lo sé, no tienes que recordármelo —murmuró dolido y lo mire triste—. Pero me gustaría hacerlo. ¿Crees que lo podamos intentar una vez más? —pregunto tomando mi manos, haciendome sentir los nervios de antes.

***

Escuche sonar el teléfono, eso hizo que abriera los ojos. Me asuste al sentir a alguien abrazándome de la cintura y luego recorde que Tom estaba acostado a mí lado. Ya estaba acostumbrada a dormir sola o solo con mis hijos, que me sentí un incómoda al tener su brazo en mi cintura.

Habíamos llegado la noche anterior los cuatro algo tarde y mientras él llevo en sus brazos a Felix a su habitación, yo lleve a Rory.

Hablamos hasta muy noche y caímos rendido y dormimos, solo eso y lo agradezco, porque tambien no había sexo en todo ese tiempo.

El teléfono volvió a sonar y estire mi brazo para tomar el teléfono.

—Voy yo —dijo adormilado Tom cuando escuchamos llorar a Rory.

These Are The Days Our Live - Roger Taylor & TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora