Siempre Fuiste Tú ©

Capitulo 35: Theia

Capítulo 35: "Ella no es la indicada para ti".

Observo en silencio a Derrick quien habla animadamente con su socio de trabajo. En unos días habrá una gran fiesta por que lo estarán ascendiendo de puesto y el puesto que le están dando es sumamente alto, es decir, estará en contacto directo con el presidente y el dueño de la empresa Reeve.

Ellos me ignoran mientras continúan hablando sobre sus estrategias de un edificio que quieren construir y yo bebo un poco más de mi te, el cual ya está helado.

Suelto un suspiro mientras veo mi vestido. Me coloqué este vestido por que quería ayudar a Derrick hoy. Cuando dijo que necesitaba mi ayuda impresionando a sus socios, creí que sería sobre mi trabajo como bióloga, no como una novia-por-ser-esposa trofeo.

Me levanto cansada y recojo sus tazas vacías junto a las mías antes de despedirme. Me dirijo a la cocina y maldigo a los tacones que estoy usando, me parece ridiculo usar tacones en la casa de mi propio prometido, es decir ¿Esta por ser mi casa también, no?

-Theia, querida ¿Que haces aquí?-pregunta la madre de Derrick al verme y aprieto mis dientes. Esperaba no encontrarla por aquí.

-Oh, solo venía a lavar estas tazas-sonrío levemente y ella me detiene con una cara insufrible.

-Cariño, serás esposa de Derrick, no tienes que lavar los platos-ella rueda los ojos-Llama a una sirviente y ella lo hará, tú deber es estar junto a mi hijo apoyándolo ¿Por qué no estás con él?

-No creo que él ocupe mi ayuda, señora-digo entre dientes dejando las tazas en el lavadero.

-Bueno, que podría necesitar de ti vestida así-dice y abro la boca indignada. Esa vieja...

Suelto un suspiro y le sonrío con falsedad-Tiene razón, debería ponerle algo más... como lo que trae usted-sonrío señalando su ropa pero dejo ver mi cara de asco y siento la furia en sus ojos. Elise y yo nunca nos hemos llevado bien, desde que Derrick y yo empezamos a salir, ella se ha empeñado en dividirnos pero Derrick y yo nunca caímos en sus trampas, ahora que estoy por casarme con él, como que tengo un poco de miedo de lo que esa vieja haga.

-Mira, Theia-me dice entre dientes claramente mostrándome que está furiosa pero aún sigue sonriendo-Ahora que tu y Derrick se casaran, tienes que seguir ciertas reglas-lleva su mano a mi mejilla apretándola más duro de lo que debería-Y creo que no te conviene ser mi enemiga-me suelta la mejilla y su expresión cambia a una de felicidad-¡Derrick, cariño! Cuéntamelo todo-suelto un suspiro tocando mi mejilla y oculto mi rostro de Derrick, los ignoro a ambos y me dirijo a mi habitación lo más rápido que puedo.

Decidí mudarme con Derrick cuando tuvo el accidente, necesitaba de mi cuidado casi las 24 horas del día pero cuando yo estaba en el zoológico las "sirvientas" como les dice Elise, se encargaban de él por mi.

Me siento en la cama de nuestra habitación y cierro los ojos conteniendo las lágrimas ¿Seré capaz de soportar esto durante el resto de mi vida?

Escucho toques suaves en la puerta y limpio mi rostro justo a tiempo porque Derrick entra sonriendo.

-Hola-digo débilmente y el frunce el ceño.

-¿Qué le sucedió a tu mejilla? Esta roja-sonríe un poco sentándose a mi lado. Me encojo de hombros sin decidirme por decir la verdad. El me observa atentamente-Dime la verdad, Theia.

-Derrick...no creo que le agrade mucho a tu madre-digo débilmente y suelto un suspiro-Se que no le agrado.

-Hablare con ella-cuando el se levanta, lo detengo y niego con la cabeza.